El Gobierno rompe el hielo y vuelve a negociar con sindicatos y empresarios

Los contactos se hacen con sigilo. “Se trata de no hacer ruido”, asegura alguien que conoce bien las reuniones, pero lo cierto es que los agentes sociales y el Gobierno han vuelto a hablar tras la última huelga general.

Oficialmente, se trata de discutir sobre la estrategia del Gobierno para abordar el drama del empleo juvenil, pero lo cierto es que las reuniones van más allá de una simple negociación sobre un asunto concreto. Es prácticamente la primera vez desde que Rajoy reside en la Moncloa que el Ejecutivo retoma el diálogo con los sindicatos y la patronal a nivel confederal.

Hasta ahora los contactos se habían limitado a las empresas del sector público en dificultades, pero el Ejecutivo parece que ha decidido cambiar de estrategia y volver al diálogo, roto -al menos de manera formal- nada más llegar Rajoy a la presidencia del Gobierno. De hecho, es lo que le pidieron los sindicatos al presidente del Gobierno en diciembre pasado, cuando le enviaron un documento en el que reclamaban sin matices la recuperación del diálogo social.

"El actual Gobierno ha despreciado hasta el momento esa posibilidad y es tiempo de recuperarlo porque puede ayudar mucho a salir de la crisis con menos costes y con cimientos más sólidos para el futuro", sostenían Toxo y Méndez.

Ninguna de las partes quiere, por el momento, desvelar el contenido de las negociaciones. Se teme que naufraguen si se hacen públicas más allá de filtraciones interesadas, y de ahí que haya habido una especie de pacto de silencio. Sólo unas ‘imprudentes’ declaraciones de Jesús Terciado, vicepresidente de CEOE hace unos días, en las que reivindicaba un contrato juvenil al margen del convenio colectivo, han roto el clima de entendimiento. Hasta el punto de que fueron los propios sindicatos -no el Gobierno- quienes negaron públicamente que se estuviera discutiendo la aprobación de un nuevo contrato juvenil que tuviera como referencia el salario mínimo interprofesional (645 euros al mes).

No los a los 'minijobs'

En el Ejecutivo se niega por activa y pasiva que haya alguna intención de crear un nuevo contrato en línea con los llamados minijobs existentes en Alemania. Entre otras cosas porque eso supondría derogar el SMI, algo a lo que ningún Gobierno se ha atrevido. En Alemania los minijobs han salido adelante, precisamente, porque no hay salario mínimo.

La intención del Gobierno, en todo caso, no pasa por centrar el debate en la cuantía de los salarios de los jóvenes ni en una rebaja generalizada de las cotizaciones sociales, sino por crear una nueva cultura del emprendimiento, que es lo que se plantea en Estrategia Española de Política Económica remitida por el Gobierno a Bruselas.

El único documento oficial que ha circulado hasta ahora sobre cómo crear empleo lo presentaron hace unas semanas CCOO y UGT, y en él se propone establecer porcentajes de plantilla fija en los convenios, además de mecanismos “que garanticen la conversión de contratos temporales y/o formativos en indefinidos”. Junto a medidas para la estabilidad y contratación de personas jóvenes. Igualmente, proponen la limitación de los encadenamientos en la contratación temporal premiando a las empresas que mantengan altas tasas de empleabilidad. Lo que se niega con rotundidad es poner en marcha una especie de doble escala salarial en las empresas en función de la edad de los trabajadores.