Gas Natural ultima la compra de un 10% de Medgaz a la argelina Sonatrach

Gas Natural Fenosa y Sonatrach van a pasar de ser enemigos acérrimos a socios en varios negocios. Tras el acuerdo extrajudicial alcanzado el pasado 14 de junio que resolvió el conflicto por el suministro de gas de la argelina a la española por 1.300 millones de euros, el grupo participado por Repsol y La Caixa ultima la compra de cerca de un 10% del gaseoducto de Medgaz.

Gas Natural Fenosa ha confirmado las conversaciones y los trabajos para cerrar la transacción, pero no ha querido dar más detalles del proceso. Otras fuentes indican que el grupo presidido por Salvador Gabarró ha contratado a Rothschild para valorar esa participación, mientras que Sonatrach se ha puesto en manos de Citi. Los dos bancos están en pleno proceso de due dilligence junto con directivos de las dos empresas. La operación no es sencilla, puesto que el resto de accionistas de Medgaz tienen derecho de tanteo sobre cualquier traspaso de acciones. En el capital de la empresa que transporte el gas desde Argelia a España se encuentran Iberdrola, Endesa, Cepsa y Gaz de France Suez.

La transacción, que puede rondar los 150 millones de euros, está prevista que se cierre antes de fin de año. No obstante, el reciente relevo en la presidencia de Sonatrach podría demorar ligeramente los plazos de la adquisición de esa participación por parte de Gas Natural, que se ejecutaría a principios de 2012.  El pasado 17 de noviembre, Argelia decidió relevar al director general de Sonatrach, Nourredine Cherouati, que en sus 18 meses en el cargo fue el encargado de resolver el enfrentamiento con Gas Natural. Su puesto ha sido ocupado por Abdelhamid Zerguine, que ahora tendrá que validar esta operación.

En cualquier caso, la compra de un paquete cercano al 10% en Medgaz culminaría el acuerdo por el que el grupo con sede en Barcelona cerró el litigio con la sociedad estatal del norte de África. Parte de ese pacto fue la entrada de Sonatrach en el capital de Gas Natural con la toma del 3,8% por algo más de 500 millones de euros.  Cuando se firmó la tregua, ambas compañías ya dijeron que se abría una nueva etapa  con “oportunidades de asociación”.

El pago de los 1.300 millones fue ligeramente inferior a los 1.500 millones que la compañía gasista debía abonar a la sociedad pública Sonatrach por la divergencia de precios en los contratos gasistas entre 2007 y 2009. No obstante, hay que tener en cuenta que incluyó un período más amplio, del 1 de enero de 2007 al 31 de mayo de 2011.

Derecho preferente de compra

El gasoducto Medgaz está gestionado por Enagás, pero está controlado por el grupo argelino Sonatrach (con un 36%), con participaciones de Cepsa (20%), Iberdrola (20%), Endesa (12%) y Gaz de France Suez (12%). Cualquiera de los cinco puede tiene derecho preferente de compra sobre cualquier movimiento accionarial, por lo que podría darse el caso de que Iberdrola o Endesa vetarán a Gas Natural. La primera, que compró inicialmente un 12%, aumentó después su presencia hasta el 20%.

Estas participaciones confieren a cada uno de los socios derechos proporcionales sobre el volumen total de tránsito, de modo que Sonatrach podrá disponer de 2.880 millones de metros cúbicos de gas, frente a los 1.600 millones de Cepsa e Iberdrola, y los 960 millones de GDF Suez y Endesa.

El gasoducto, que entró en funcionamiento a principios de marzo tras una inversión de 1.000 millones de euros, tiene una longitud de 210 km y cuenta con una capacidad de transporte de 8 bcm, el equivalente a mil millones de metros cúbicos de gas natural. La profundidad máxima que alcanza el gasoducto es de 2.160 metros. Esta infraestructura es de importancia “estratégica” para España, que hasta el pasado año compraba el 30% del gas que consumía al país norteafricano. Con la puesta en marcha del gaseoducto, esa proporción se ha elevado hasta el 50%.