Los concesionarios dicen que la nueva norma abaratará el precio de los coches

Los concesionarios hacen oídos sordos a las amenazas de desinversiones por parte de los fabricantes, después de ganarles el pulso que mantenían desde hace años al aprobar el Congreso una enmienda a la Ley de Economía Sostenible por la que las marcas deberán recomprar sus stocks 60 días después de la venta y asumir las indemnizaciones pertinentes si suspenden el contrato de distribución con un agente de venta. Defienden, además, la idoneidad de la nueva norma y aseguran que abaratará entre 400 y 500 euros de media el precio de los coches.

El presidente de Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto), Antonio Romero Haupold, asegura que la norma es justa y necesaria para "equilibrar la relación entre las marcas y las redes comerciales" y evitar posibles abusos, puesto que los fabricantes ya no podrán imponer volúmenes de compra por encima de lo solicitado por los concesionarios. Según el máximo responsable de Faconauto, los grandes beneficiados serán los consumidores al abaratararse el precio de los automóviles, ya que "si los concesionarios dejan de asumir los costes financieros de los vehículos no pedidos, los clientes dejarán de pagar las ineficiencias del sistema".

La norma ha producido cierto alivio entre los concesionarios, ya que, según la patronal, las marcas habían comenzado una reorganización de las redes con numerosos preavisos de cancelación de contratos que podrían suponer el cierre de hasta un 30% de los concesionarios, según Blas Vives, secretario general de Faconauto. Desde la patronal de concesionarios confían en que las aguas vuelvan poco a poco a su cauce y la polémica no llegue a mayores. Convencidos de que 'la unión hace la fuerza', consideran negativa una 'guerra' en la industria en un momento en el que el sector atraviesa una profunda crisis, con un desplome de las ventas del 23%. "Esperemos que sea sólo un cabreíllo de fin de semana", afirma Francisco Salazar-Simpson, vicepresidente de Faconauto.

Industria convoca a las partes implicadas

Mientras, el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, tratará esta semana de calmar los ánimos en el sector. Mañana se reunirá con responsables de las comunidades autónomas que tienen plantas automovilísticas, y el miércoles con las asociaciones de fabricantes (Anfac) y de concesionarios (Faconauto). Los encuentros, convocados con carácter de urgencia, tienen como objetivo analizar la situación del sector tras los cambios normativos, que suponen un vuelco a la relación entre las marcas y los concesionarios.

La nueva norma, que partió del PNV y fue respaldada por PP y CiU entre otras formaciones, establece la obligación para las marcas de indemnizar a los concesionarios cuando se produzca la cancelación de un contrato, por las inversiones no amortizadas, el stock y el personal despedido. Actualmente, los concesionarios españoles tienen 'stock' por un valor de 18.000 millones de euros, según datos de Faconauto.

Pero mientras los concesionarios celebran la medida, los fabricantes se han levantado en pie de guerra y han advertido de que la norma pone en peligro las inversiones ya comprometidas y futuras en las factorías españolas, así como el empleo. Anfac, además, se muestra tajante y asegura que si se aplica la norma, los fabricantes optarán por establecer sus propias redes comerciales, lo que podría traducirse en la desaparición de la mitad de los concesionarios existentes. Además, la producción se reduciría en 125.000 vehículos al año y se perdería el 5% del empleo en las plantas.