"El capital semilla español todavía está muy lejos de otros países europeos"

¿Existen suficientes ayudas públicas para los emprendedores españoles? Esa es una de las preguntas que se han tratado de responder en el segundo panel del Venture Day, organizado por el Instituto de Empresa. Los ponentes coinciden en que el modelo de financiación pública de España ha mejorado mucho en los últimos tiempos, aunque todavía queda mucho por hacer, especialmente en materia de aligerar los trámites burocráticos para poder crear una empresa.

 

Según Arturo Azcorra, director general del CDTI, dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, para que mejore el espíritu emprendedor en España se tienen que dar cambios en elementos estructurales de la economía y también la sociedad para favorecer un entorno propicio para que crezcan las startups.

“En España existen buenos instrumentos públicos para ayudar a las empresas y está empezando a funcionar bien la conexión público-privado. Lo que todavía falta es desarrollar aún más el capital semilla porque estamos algo lejos de otros países europeos. Desde las administraciones públicas cada vez estamos mirando más por el emprendedor. Nosotros vamos a lanzar un nuevo fondo de capital riesgo para empresas tecnológicas que se llamará INNVIERTE y que será la suma de esfuerzos entre el Ministerio de Ciencia e Innovación y el Ministerio de Economía y Hacienda. Todavía estamos en fase de negociación, pero en principio el fondo cubrirá 300 millones de euros de las arcas públicas y 300 millones de euros de inversores privados”.

Pero además del capital riesgo, las startups también pueden contar hoy en día con otras fuentes de recursos como los créditos ICO o NEOTEC, un fondo que ofrece una línea de créditos blandos al 0% y que facilita el cobro para cuando el cash-.flow de la startup sea positivo. Otras entidades como el ICEX también apoyan al emprendedor facilitando la internacionalización de las empresas. “En España no hay atomización, sino una proliferación de ayudas para los emprendedores. Según la OCDE, nuestro país cuenta con el marco fiscal más favorable del mundo para el emprendizaje junto con Francia. Ahora falta que los emprendedores también acudan a consultoras especializadas para que les orienten sobre qué programa se ajusta más a su demanda”.

Todos los ponentes del panel coinciden en que estamos en un momento en el que el sector público está decidido a cambiar el patrón productivo. Aún así, la financiación pública no es “la salvadora del mundo”, sino que es una fuente más a la que poder recurrir: “Uno de los valores que no han cambiado en Silicon Valley durante los últimos 30 años es que se reinventan cada día y que una de sus premisas es que nunca van a recurrir al dinero público para salir adelante. La financiación pública es una ayuda y hay que aprovecharla”.

Respecto a los cambios sociales, todos coinciden en que la sociedad debe que conocer el importante papel que desarrollan los emprendedores y que les apoyen: “Los españoles somos extremadamente autocríticos. Por un lado esto es bueno porque nos ayuda a mejorar, pero por otro negativo porque desprestigiamos puntos fuertes que tenemos. Sólo echando la vista atrás se puede ver que empresas como Inditex, Telefónica o Repsol eran compañías de segunda fila hace apenas una década. Hoy por hoy, España se ha convertido en la novena economía del mundo y doblamos la renta per capita de países como Alemania, Francia o Italia”.