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Bandera blanca en Valencia: prohibido hablar de la patada de Malasia
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DORNA Y FIM SE LO HAN PEDIDO A LOS PILOTOS

Bandera blanca en Valencia: prohibido hablar de la patada de Malasia

El Mundial de Motociclismo afronta su última carrera del calendario, una fiesta por todo lo alto. Eso es lo que pretenden todos los implicados en el GP de Valencia por orden expresa de la FIM y Dorna

Foto: Marc Márquez a su llegada a Cheste este miércoles (Efe).
Marc Márquez a su llegada a Cheste este miércoles (Efe).

El Mundial de Motociclismo afronta su última carrera del calendario. La más importante, la más crucial y, sobre todo, una fiesta por todo lo alto. Eso es lo que pretenden todos los implicados en el GP de Valencia. La cita arrancó con la reunión que la FIM y Dorna convocaron para verse con los pilotos y los jefes de equipo. Éstos últimos no intervinieron, pero recibieron un mensaje claro: prohibido hablar del pasado. O lo que es lo mismo, de Malasia. Y esa es la línea que siguieron los tres pilotos que están en boca de todos: Lorenzo y Rossi porque de ellos saldrá el campeón de MotoGP y Márquez debido a lo vivido desde Sepang. Mientras Jorge se ha disculpado por sus gestos en el último podio, Valentino ha lamentado la decisión del TAS y ha recordado que sólo se arrepiente de haberse abierto tanto en Sepang. ¿Y Marc? Se ha limitado a enmarcar la dureza de lo vivido a lo largo de toda la temporada.

Tras la cita, el primero en comparecer ante los medios fue Jorge Lorenzo. Con el motorhome de Yamaha lleno hasta la bandera, el piloto mallorquín ha asegurado que no le afecta la decisión del TAS de mantener la sanción de Rossi: “Tenemos que respetarla. No me importa, correré de la misma manera el domingo. Siempre trato de dar lo máximo y eso intentaré hacer. Llegué aquí con la idea de concentrarme en este fin de semana y no quiero hablar de nada más que de lo que pueda pasar en el futuro y sobre la pista”. El balear reconoció que el hecho de que “Valentino salga último seguramente pueda afectar a sus opciones de ganar el Mundial porque es más complicado, pero esto varía muy poco mi estrategia de intentar ir lo más rápido posible desde los libres, cometer pocos errores y a final de carrera se verá quién tiene más puntos. No hay excesiva presión. Después de esta carrera seguirá todo igual”.

Pese a que se juega el título con su compañero de equipo, descartó que vayan a levantar un muro en Cheste: “La única manera de ocultar datos es romper las ordenadores, pero es algo que no haremos ni por asomo porque somos un equipo deportivo y queremos ganar siendo más rápidos en la pista”. Respecto a su relación con su equipo, explicó que “en un matrimonio siempre hay desencuentros y a Yamaha le ha tocado defender a un piloto que ha sido sancionado a pesar de que pueda influir en el resultado del otro. Yamaha siempre se ha portado muy bien conmigo desde que llegué en 2008 y estoy seguro de que seguirá siendo así. Siempre he recibido el mismo trato que mis compañeros. El año que viene tengo contrato y mi intención es seguir aquí para siempre y, cuando me retire, también quiero seguir perteneciendo a Yamaha. Valentino y yo formamos uno de los mejores equipos del mundo y mi idea sigue siendo la misma”.

El único aspecto del pasado que sí quiso comentar fue su actuación en el podio de Malasia, donde hizo el gesto de bajar el pulgar cuando Rossi recibió su trofeo: “Fue un error que lamento. Quiero disculparme, sobre todo, ante los espectadores porque no es un buen ejemplo de comportamiento deportivo”. Para rebajar la tensión después de lo ocurrido en aquella carrera, Lorenzo explicó que han recibido indicaciones de la organización de MotoGP: “Lo que dicen la FIM y Carmelo va a misa porque son los que mandan. Nos han dicho que nos están viendo muchas personas y que intentemos dañar la imagen del motociclismo lo menos posible excluyendo un poco la carrera de Sepang”.

Valentino Rossi, por su parte, declaró que lo único que lamenta de lo sucedido en Sepang fue que se abriese tanto en la curva en la que se produjo su incidente con Márquez: “No me quedó otra opción. Lo único que lamento es haberme abierto tanto y no haber seguido mi trazada normal”. De todos modos, lamentó la decisión del TAS de no concederle la cautelar por lo que tendrá que empezar el domingo último: “Hará que todo sea muy difícil. Ya lo era antes, pero empezando el último va a hacer que las cosas sean más duras. Mucha gente ha hablado de Malasia y del incidente, pero yo era el que estaba en la moto y decidí explicarle luego al TAS que trataba de luchar por el campeonato de manera normal. Tenemos que esforzarnos, mantener la concentración, llegar siendo competitivos y de la mejor manera posible. Luego a ver qué pasa”.

El italiano se mostró contento por el cariño de los aficionados: “Creo que con el paso de los días se entiende mejor lo que ocurre. Algunas cosas de las que se han dicho me han molestado y me ha sorprendido que Jorge quisiese intervenir en mi apelación al TAS”. Rossi indicó que “es muy difícil decir cuántas opciones tengo de ser campeón del mundo. Más que enfadado por esta situación, estoy desilusionado porque me han quitado la oportunidad de jugarme un Mundial, algo que me había trabajado todo el año”. Por otro lado, confesó que espera “un comportamiento normal del resto de pilotos” y dejó claro que “es muy difícil preparar una estrategia. Hay que trabajar bien en los entrenamientos y ser competitivo. Es una carrera larga, 30 vueltas y si empiezas el último hay más riesgos. Trataré de recuperar posiciones, pero es pronto para decir nada. Necesito saber mi potencial y escoger bien la puesta a punto, las gomas y luego dar todo lo que tengo dentro. Sería el desafío más grande de mi carrera si saliese en un puesto normal”.

El de Urbino comentó que su sueño era “pelear por el campeonato de forma limpia, pero todo lo sucedido no cambia mi pasión por el motociclismo. El año que viene correré en Yamaha porque tengo contrato y estoy bien. A lo largo del año que viene cambiarán muchas cosas, quizás mi nivel también”. De todos modos, Rossi deseó que todo sea “normal en Cheste, como en cualquier otro fin de semana en Valencia, que siempre es fantástico y siempre hay mucha gente. Que haya mucho apoyo sin un solo problema”.

Marc Márquez ha comentado que no se siente culpable de lo sucedido con Rossi en Sepang y ha recalcado que sigue pensando lo mismo, que fue el italiano quien le tiró al suelo provocando su abandono y ha pedido que se acate la decisión del TAS: “No me siento culpable, ya lo dije en Malasia y lo repetiría aquí. No quiero hacerlo porque nos lo han pedido y estoy de acuerdo. Todo el mundo es libre de opinar, pero al final se tiene que respetar la decisión de Dirección de Carrera, la de la FIM y la del el TAS en este caso”. Además, aseguró que únicamente lamenta haberse ido al suelo: “Sólo me arrepiento de que no acabé la carrera y me sabe muy mal por mi equipo. Cada vez que salgo a la pista intento hacer lo mejor que sé, lo he hecho siempre y lo haré este fin de semana. Intentaré acabar primero o en la cabeza luchando por el podio y la mejor posición”.

“No espero una disculpa de Rossi, al final le entiendo: se está centrando en ganar el campeonato y con tiene que pelear con Jorge en la pista. No quiero estar en medio aunque cada uno hace su carrera y lucha por su resultado. Espero que mejor temprano que tarde podamos hablar con Valentino, pero tiene que pasar esta carrera”, declaró. Eso sí, el catalán recalcó sus palabras para no dar lugar a malentendidos: “No he dicho que quiera hablar con él, he dicho que espero que tarde o temprano podamos hablar y que todo vuelva a la normalidad”. Es más, para Márquez ha sido “una de las semanas mas difíciles de mi vida. Después de Malasia intenté olvidarme de todo para preparar esta carrera como siempre y no ha sido posible. Como todo el mundo ya sabe, ha sido complicado. Desde este miércoles estoy con mi segunda familia, mi equipo, y esto me ha ayudado mucho a meterme en la burbuja aunque esta vez es más difícil que otras”.

Finalemente, también ha ehcho balances de una temporada que él mismo ha calificado como la más complicada de su carrera deportiva: “Ha sido experiencia muy dura, no es fácil para un piloto estar aquí y además tengo 22 años. Toda la temporada ha sido de aprendizaje, me ayudará de cara al futuro. Intentaré aprender de los errores cometidos para luchar por el título la temporada que viene. Lo que saco es que a veces una tercera o cuarta posición es buena para el campeonato. Una temportada es muy larga, esta no la empezamos del mejor modo y el gran error fueron las seis primeras carreras; la moto no tenia las mejores condiciones, pero yo estaba allí para intentarlo. A partir de Assen las cosas cambiaron, me encontraba mejor. En un año es difícil que pasen más cosas. Ha sido el más difícil de mi carrera por como empecé el y por como ha ido, pero esto te curte”.

El Mundial de Motociclismo afronta su última carrera del calendario. La más importante, la más crucial y, sobre todo, una fiesta por todo lo alto. Eso es lo que pretenden todos los implicados en el GP de Valencia. La cita arrancó con la reunión que la FIM y Dorna convocaron para verse con los pilotos y los jefes de equipo. Éstos últimos no intervinieron, pero recibieron un mensaje claro: prohibido hablar del pasado. O lo que es lo mismo, de Malasia. Y esa es la línea que siguieron los tres pilotos que están en boca de todos: Lorenzo y Rossi porque de ellos saldrá el campeón de MotoGP y Márquez debido a lo vivido desde Sepang. Mientras Jorge se ha disculpado por sus gestos en el último podio, Valentino ha lamentado la decisión del TAS y ha recordado que sólo se arrepiente de haberse abierto tanto en Sepang. ¿Y Marc? Se ha limitado a enmarcar la dureza de lo vivido a lo largo de toda la temporada.

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