El Real Madrid se plantea el final de los Ultras Sur si no se garantiza su paz social

La cúpula del Real Madrid se reunió en la tarde del jueves con la todavía cabeza visible de los Ultras Sur, en un intento de poner fin al enfrentamiento y la lucha de poder que existe dentro del grupo radical desde la aparición de una facción extremadamente violenta y vinculada a la extrema derecha. El club es tajante y si se vuelven a repetir escenas como las vividas el pasado sábado, con duros enfrentamientos en los alrededores del estadio, la jaula que hay en el fondo sur desaparece como tal, regresando a su aspecto normal como cualquier otro sector delestadio madridista.

La primera reacción a la emboscada perpetrada en el bar donde habitualmente se concentran antes de los partidos, fue la de clausurar los abonos de la jaula, salvo, claro está, los que ya estuvieran en el interior del estadio. Algunos de los que pretenden asumir el control de los Ultras Sur han sido expulsados como socios del club. Los dirigentes han dado dos semanas de plazo para que todo vuelva a su ser, que la normalidad vuelva a imperar. En caso contrario, el grupo dejaría de tener categoría de peña madridista.

El control de los Ultras sigue estando en manos de los históricos del grupo. Todos ellos por encima de los 40 años y en algunos casos, casados y con hijos. Dentro de su postura radical, en el último lustro ha primado el fútbol y el respeto dentro del estadio, la nueva hornada (sus líderes tienen alrededor de los 30 años) pretenderomper con esa paz social que hainstaurado de acuerdo con el club. De hecho, su intento de llegada a la jefatura es a través de la violencia tras dos años de disputas y discusiones. Cuentan algunos testigos que lo del sábado pasado fue una auténtica batalla campal y que lo extraño es que todo se saldara con simples contusiones.

Este incidente, catalogado por la Policía como muy grave, ha paralizado el proyecto de ampliación de la zona destinada a los Ultras Sur, que iba a pasar a llamarse 'grada de animación', llegando a los 2.800 abonados de capacidad, por los 800 actuales. En ese acuerdo estaban incluidos todo tipo de grupos que aparecen por el fondo sur como 'Orgullo Vikingo', 'Bersekers', 'La Clásica'...

Ahora, y tras lo acontecido el sábado y las amenazas que aparecen en las redes sociales de repetir en el próximo partido de Liga, Florentino Pérez ha sido directo y claro: 'Cierre si se repiten escenas parecidas o si la transición no se lleva a cabo de una manera pacífica'. Y es que el club no admite que varíe el rumbo del fondo sur. No quiere incidentes y no se va a convivir desde dentro del club con la violencia o con manifestaciones políticas.