"Esto no va a volver a pasar": el monumental enfado de Raphinha con Xavi por sustituirle

El Barcelona sufrió mucho en el Camp Nou para conseguir salvar un empate en los dieciseisavos de final de la Europa League ante el Manchester United (2-2), en un partido en el que el conjunto culé no fue capaz de desplegar su mejor fútbol ante un rival bien plantado en el césped. De hecho, de no ser por un fallo defensivo de los devils y un centro chut de Raphinha que se transformó en el definitivo empate, el resultado podía haber sido peor. Pero la imagen del partido estuvo en el banquillo.

De hecho, el protagonista fue el propio Raphinha, posiblemente el jugador más activo durante el partido, que mostró un gran enfado tras ser sustituido. El Barça no estaba encontrando su mejor versión y estaba sufriendo sobre el césped, un equipo al que principalmente sostenía el brasileño con sus arrancadas por banda. Y sería en una acción suya en la que el conjunto culé lograría el empate final para llegar con vida a Old Trafford. Pero, una vez más, no iba a acabar el partido.

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A pesar de estar siendo el jugador más desequilibrante del choque, Xavi Hernández consideró que el brasileño debía de ser sustituido, algo que sucedió en el minuto 83... solo siete después de anotar su tanto. Cuando Raphinha vio el cartelón del cuarto árbitro con su número, no dudó en mostrar su enfado públicamente con sus gestos y sus expresiones sobre el césped, mientras se encaminaba al banquillo. Pero lo peor de su reacción aún estaba por suceder.

Tras chocar la mano con Xavi con claro gesto de enfado, Jordi Alba fue el primero en ver que el brasileño estaba encendido. Trató de tranquilizarle y de calmarle, pero el jugador recién sustituido estaba realmente enfadado por tener que ocupar un lugar en el banquillo en ese momento del partido. Así, tras sentarse en su sitio, no dudó en golpear el asiento delantero con puñetazos y patadas de manera repetida, mientras algunos compañeros intentaban calmarle.

Al término del encuentro, la imagen no tardó en dar la vuelta al mundo, por lo que ambos protagonistas no dudaron en dar explicaciones de lo sucedido. Mientras que el propio Xavi aseguraba "entender al jugador", aunque también añadía que era algo que "no tiene que hacer", recordando que cuando él jugaba también le "molestaba" que la cambiaran, Raphinha pidió perdón públicamente por la imagen ofrecida en el momento del cambio.

"Ya hablé con el míster después del partido, pero aprovecho aquí para pedir perdón a todos. A veces, tenemos tantas ganas de estar dentro del campo para ayudar al equipo a ganar que acaba pasando esto. Somos seres humanos, tenemos momentos que no podemos controlar, pero sé que cometí un error y estoy aquí para pedir perdón a todos. Esto no va a volver a pasar", explicaba el brasileño, que volvía a ver cómo era cambiado a pesar de estar brillando.

A pesar de lo ocurrido, Xavi le quito hierro e, incluso, lo vio de manera positiva: "Siempre pido ambición a mis jugadores y él lo ha sido", afirmaba. Raphinha se convirtió este jueves en el jugador más destacado del Barça que, por primera vez en mucho tiempo en la temporada, se le vio desdibujado sobre el césped durante muchos minutos. Y el brasileño dio un puñetazo sobre la mesa para reivindicarse... y otro en el banquillo para desquitarse de su enfado.