La queja de Simeone por la acción que pudo evitar el gol del portero en el Lazio - Atlético de Champions

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Jarro de agua fría para empezar esta Champions League 2023-24. El Atlético de Madrid perdió dos puntos cuando ya acariciaba la victoria en su estreno, en un campo complicado y siempre hostil: el de la Lazio. El Olímpico de Roma solo rebajó el tono para homenajear a un Simeone que ganó cuatro títulos con esa camiseta en su etapa de jugador. Ni siquiera el minuto de silencio por las víctimas del terremoto de Marruecos previo al inicio relajó los ánimos en la parte más radical de su hinchada... que entró en éxtasis con lo sucedido justo al final.

Los rojiblancos estaban siendo empujados hacia su campo frente a una Lazio que no demostró nada del otro mundo, pero Pablo Barrios volvió a convertirse en bidón de oxígeno para el equipo. Por su juego, pero también por su primer tanto en la competición con el Atleti. Un disparo lejano que tocó en un defensor antes de acabar en la red. El plan estaba saliendo a la perfección pero no tardó en torcerse. Fue en el descanso y otra vez con las malditas lesiones que llevan años azotando al equipo. Primero con el propio Barrios, que se quedó en la caseta en el intermedio. Luego con Witsel, para dejar al equipo sin un solo mediocentro sano cuando llevamos poco más de un mes de competición y se pasó más de medio verano con rumores de que iba a llegar un 5. Y que quedaron en eso, simples rumores.

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La segunda parte puso igualmente de manifiesto el alarmante tono físico de los jugadores. El método del Profe Ortega hace ya años que está en entredicho. A 20 de septiembre son ocho los jugadores lesionados, en plena escalada de partidos miércoles-domingo que ya acabó muy mal la temporada anterior. A los colchoneros se les acabó la gasolina cuando aún quedaban media hora de partido, y resistieron como pudieron... hasta el minuto 95.

Con el tiempo ya cumplido después de que el árbitro añadiera cuatro minutos, el guardameta de la Lazio, Ivan Provedel, subió a la desesperada para rematar un córner. A la primera logró sacarla (que no despejar) la defensa. A la segunda el portero entró como cuchillo en mantequilla ante la mirada de la zaga para desatar el delirio en las gradas. Los de Mauricio Sarri arañaban un punto que puede acabar siendo decisivo en la siempre peligrosa fase de grupos de la Champions.

La queja de Simeone por la acción sobre Correa

El partido acabó en tablas pero con el sabor de boca más amargo posible para el Atlético. Pese a sacar un punto como visitante frente a un claro candidato a meterse en los octavos. Todo ello pudo haber cambiado en una acción que se produjo justo antes del saque de esquina que acabó condenando a los rojiblancos. Restaba alrededor de medio minuto para que se cumpliera el 94' y Ángel Correa fue claramente agarrado para evitar un contraataque del argentino. Ahí hubiera muerto el partido, pero el árbitro no solo no señaló nada, sino que amonestó al jugador rojiblanco por las protestas. Acto seguido llegó el 1-1. Algo que no dudó en recordar Simeone al atender a los medios.

"El partido ya estaba casi terminado. La jugada anterior al centro final hay un posible foul a Correa", explicó el Cholo justo después de acabar el encuentro. El entrenador argentino volvió a incidir en ello en la rueda de prensa: "De nuestro lado no podemos hacer nada, ese agarrón a Correa en el contragolpe fue claro, pero más allá de este pequeño detalle, ellos jugaron mejor con la pelota en la primera parte, no pudimos pararles pese a que no crearon peligro. Llegó el gol, con fortuna y en la segunda parte pese a los golpes que sufrieron varios chicos nos reinventamos y no pudimos cerrarlo y en la última jugada llegó un golazo que convierten esas noches en apoteósicas".