El último charco de Bartomeu: su Junta se enteró por la prensa de la nueva equipación

Josep Maria Bartomeu tiene un talento especial para meterse en charcos. Cuando aún estaba fresquita en la memoria la monumental bronca al presidente del FC Barcelona y a Zubizarreta por aparecer en el vídeo homenaje a Messi tras batir a Zarra, andan de nuevo los culés tirándose de los pelos por el diseño de la nueva equipación para la próxima temporada. Y, entre ellos, hay que contar también a la mayoría de la Junta directiva, que se enteró leyendo el periódico de cuáles serían los nuevos diseños. Sí, sí. Tal cual.

A Nike, después de los colores fosforitos, se le ha ocurrido la revolucionaria idea (eso sí que lo tiene, el diseño es lo nunca visto) de que la camiseta tenga las franjas horizontales en lugar de las verticales de toda la vida, y el jaleo ha sido importante. No es que solamente no guste, es que se ha digerido casi como un atentado a la identidad del club, un sacrilegio. El diseño de las equipaciones filtradas en exclusiva al diario Sport no era un globo sonda para comprobar la aceptación, no. Están aprobadas, el proceso de producción ya ha empezado. Y la afición no fue la única que se quedó boquiabierta, sino que, sorprendentemente, también la mayoría de los directivos.

Los nuevos uniformes no están aprobados en Junta. A la reunión con Nike sólo asistieron Bartomeu, el director general Rossich y no ha trascendido si los acompañaban algunos directivos más del ‘núcleo duro’ del presidente, como el vicepresidente deportivo Jordi Mestre, por lo que el asunto de las franjas horizontales traerá cola ya que algunos dirigentes están que trinan porque cada vez pintan menos, como han podido comprobar.

Tiene mala solución, además, porque el Barça tiene derecho a veto, pero es que ya han dicho que sí y dar marcha atrás no es fácil. Además, a principios de año el Barça renegociará su contrato con la multinacional. Al United, Adidas le pagará cerca de 95 millones por año, más del doble de lo que ingresa el Barça, un desfase que el club azulgrana pretende corregir.

Ya puede entrar la pelotita y que el equipo de Luis Enrique firme una buena temporada, porque el Camp Nou ya ha dejado claro que no está con Bartomeu y el presidente cuenta cada vez con menos apoyos entre su propia Junta. Es decir, que, a la mínima, habrá follón. El Barça es más que un club y la camiseta va camino de convertirse en algo más que un problema de diseño.