Es noticia
Guía para sobrevivir al 'diccionario papanata' de la Fórmula 1: del 'porpoising' al 'rake'
  1. Deportes
  2. Fórmula 1
OLEADA DE ANGLICISMOS

Guía para sobrevivir al 'diccionario papanata' de la Fórmula 1: del 'porpoising' al 'rake'

Entre los seguidores de la Fórmula 1, existe una tendencia creciente a utilizar anglicismos para denominar cosas que toda la vida se dijeron en español. ¿Moda o pedantería?

Foto: Guía para sobrevivir al 'diccionario papanata'. (Reuters/Albert Gea)
Guía para sobrevivir al 'diccionario papanata'. (Reuters/Albert Gea)

La palabra estrella de los tests de Fórmula 1 en Barcelona ha sido sin duda 'porpoising'. Este término describe el fenómeno aerodinámico donde el coche rebota continuamente en las rectas a medida que alcanza más velocidad. La explicación física consiste en que los túneles aerodinámicos en forma de ala invertida del coche producen un progresivo efecto de compresión hacia el suelo, hasta que se hace tope y el coche rebota. Terminada la extensión del rebote, el monoplaza vuelve a comprimirse y, así, sucesivamente.

Sin embargo, aunque el término 'porpoising' sea ahora nuevo para nosotros, este fenómeno fue moneda común en la década de los ochenta, en los años del 'efecto suelo'. En aquellos años en España todavía decíamos 'tentempié' en lugar de 'brunch' y cuando un coche sufría de 'porpoising' simplemente decíamos que sufría de 'efecto rebote'. Nos enterábamos todos divinamente y no teníamos que acudir al traductor de Google para entender los nuevos 'palabros'.

El Lotus 80 rebotaba, no hacía 'porpoising'

Revisen la hemeroteca y verán cómo nadie por España jamás habló de 'porpoising' cuando debutó el Lotus 80, una joya de la ingeniería de la época que, al llevar tan al extremo el concepto de los paneles de ala invertida, solo funcionaba en los circuitos de asfalto sin baches y sin largas rectas. En el Jarama, en 1979, el coche debutó con un prometedor pódium, pero llegaron otras pistas y con su alocada tendencia a la compresión y la súbita extensión se convirtió en un peligroso coche de 'efecto rebote' en lugar de 'efecto suelo'. Tan peligroso como para que el genial Colin Chapman tuviera que retirar de las pistas una de sus creaciones más icónicas.

Darío Villanueva, el exdirector de la RAE, alertó de la absurda tendencia de utilizar términos ociosos en inglés por puro esnobismo: "Con una lengua tan rica como la española, creer que si una palabra se dice en inglés gana calidad es puro papanatismo", afirmaba hace unos años el académico con enorme clarividencia. Aunque es un fenómeno que nos encontramos por doquier hoy en día, la Fórmula 1 se ha apuntado a esta ridícula moda.

A continuación, acompañamos un resumen del 'glosario papanata' de la Fórmula 1:

Balaclava: término inglés que procede de la batalla de Balaklava (Crimea), donde se hicieron característicos los verdugos de sus guerreros. Ya ven, en los circuitos españoles, de toda la vida se dijo 'verdugo' o 'sotocasco', pero debe ser que para muchos les quedaba poco 'cool'.

Rake: en muchas localidades españolas es el diminutivo del nombre Raquel, qué necesidad de emplear un término tan confuso cuando todos podemos enterarnos diciendo 'inclinación'.

Drag: nada que ver con las 'Drag Queens' de los maravillosos carnavales canarios. 'Drag' es simplemente 'resistencia al aire'. Es verdad que en inglés es mucho más corto, pero como a fin de cuentas hay que terminar explicándolo, hubiéramos acabado antes diciéndolo en español.

Undercut & Overcut: adelantar en boxes y adelantar en pista. Ya ven que fácil de entender.

Downforce: desde que a mediados de los años 60 el norteamericano Jim Hall inventara los alerones en un coche de carreras, este fenómeno siempre se ha llamado 'carga aerodinámica', pero hoy en día, con esa precisa descripción, ya no te admiten en el club de los 'nuevos entendidos'.

Barge board: difícil de pronunciar correctamente y más difícil de intuir su significado. Otro gran ejemplo de complicar las cosas, pudiendo decir 'deflector lateral'.

placeholder FOTO: F1.
FOTO: F1.

Safety car: lo han adivinado, siempre se dijo 'coche de seguridad' o 'coche S', pero todavía en España no habían llegado las 'influencers' que llaman 'outfit' al 'conjunto' así como 'batch cooking', 'trendy', 'oversize' y demás tontadas a cosas que hacen que mi madre me pida ayuda cuando está leyendo el 'Telva'.

Sidepod: nada que ver con un dispositivo de Apple. Así llaman algunos a un 'Pontón lateral'.

Qualy: aquí tenemos un falso amigo del inglés, porque el diminutivo de 'qualification' o 'qualifying' se traduce como calificación cuando en realidad es 'clasificación' porque determina el puesto en el que clasificas en la parrilla.

Understeer & oversteer: como reza el dicho popular de los rallies, 'subviraje' es cuando ves venir al árbol de frente y 'sobreviraje' es cuando solo lo sientes.

Blisters: ampollas. Igualitas en forma a las de los pies haciendo el camino de Santiago (way of St.James blisters).

Graining: fenómeno que ocurre cuando hay degradación en el neumático y se forman 'pegotes' de goma, que se acumulan por la delaminación de la cubierta. Con permiso de la RAE, daremos por bueno el término sin que sirva de precedente porque, reconozcámoslo, ni 'granulación' ni 'pegoteando' parecen buenas alternativas.

Parc-Fermé: esta es maravillosa. Una palabra que nos llega de la dominante comunidad británica del paddock que, en realidad, en origen es un galicismo para decir 'parque cerrado', término que gracias a Dios todos los que practican automovilismo en España siguen utilizando.

placeholder FOTO: EFE/Enric Fontcuberta.
FOTO: EFE/Enric Fontcuberta.

Stewards: esta se ha puesto muy de moda últimamente a raíz de los acontecimientos del final del Mundial 2021 en Abu-Dabi y son los 'comisarios', o 'comisarios deportivos' que asisten al director de carrera. Qué quieren que les diga, me impone más respeto el término español que el inglés (lo digo porque quizá con unos 'stewards' más contundentes, Michael Masi habría tenido la vida más fácil).

Tear-off: en mi pueblo, Mota del Cuervo siempre lo conocimos por 'visera desechable'.

Caster, Camber, Toe: el colmo de la pedantería para explicar las tres opciones básicas de la puesta a punto de un chasis, como son el avance, la convergencia y la caída de las ruedas tal y como desde 1940 tan sabiamente reflejaban los manuales del automóvil Arias-Paz.

Vuelta de formación: traducción literal de 'Formation lap'. Otra bobería recurrente de un tiempo a esta parte, para lo que siempre se llamó como 'vuelta de reconocimiento'.

Supersoft, Inters: ese tipo de expresiones que utiliza el que quiere fardar de que sabe mucho de Fórmula 1 y utiliza esos 'palabros' para referirse a los compuestos de neumáticos blandos, duros o intermedios.

Shakedown: Cervantes se horrorizaría al ver cómo utilizamos hoy en día esa palabra, cuando en español tenemos algo tan poético para describirlo como 'bautismo de fuego'. Pero si preferimos ir a lo práctico y olvidarnos de lo literario, podemos usar simplemente 'debut' o 'estreno'.

Stop & Go: este lo he dejado para el final, porque prefiero hacer con él una analogía con el lema de la RAE de 'Limpia, fija y da esplendor' al idioma. Pues si paramos de emplear anglicismos (stop) y seguimos tirando como siempre de nuestro idioma (go), les aseguro que no por ello sabemos menos de Fórmula 1 y, desde luego, créanme que nos enteraremos mucho mejor de lo que en el fondo lo hacen los 'racing papanatas'.

La palabra estrella de los tests de Fórmula 1 en Barcelona ha sido sin duda 'porpoising'. Este término describe el fenómeno aerodinámico donde el coche rebota continuamente en las rectas a medida que alcanza más velocidad. La explicación física consiste en que los túneles aerodinámicos en forma de ala invertida del coche producen un progresivo efecto de compresión hacia el suelo, hasta que se hace tope y el coche rebota. Terminada la extensión del rebote, el monoplaza vuelve a comprimirse y, así, sucesivamente.

RAE Fórmula 1
El redactor recomienda