Kyrie Irving y el misterioso hotel fantasma que aterroriza a la NBA

El pasado 22 de febrero, los Cleveland Cavaliers derrotaban a los Thunder en su visita a Oklahoma City (92-115). Sin embargo, la gran noticia del encuentro fue el mal partido de una de las grandes estrellas visitantes, Kyrie Irving, que tan sólo estuvo nueve minutos en pista. Un par de días después de aquel partido, el base de los Cavs ha explicado el motivo de su bajo rendimiento aquel día: los chinches de un hotel maldito para los jugadores de la NBA.

Según comentó el propio Irving, "la culpa fue de ese extraño hotel". Y es que el jugador de Cleveland asegura que su habitación se encontraba en perfecto estado cuando llegó a ella. En mitad de la noche, y cuando todo parecía tranquilo, se despertó con grandes picores: "Sólo pude dormir tres horas. Me encontré cinco chinches gigantescos a las tres de la mañana cuando me desperté lleno de heridas", tal y como confesó el jugador en 'ESPN'.

Pero el Hotel Skirvin es de sobra conocido por lo jugadores de baloncesto como el 'hotel maldito' de la NBA. Quizá el caso de Irving sea el más 'natural' de todos los que se han reportado en los últimos años, aunque no deja de ser su última víctima. Hace algunos años, una mujer se suicidó saltando por una de sus ventanas mientras sostenía a su hijo en brazos. Según cuenta la leyenda, la figura de esta señora suele aparecerse, así como reproducirse el llanto del niño.

Tal y como informaba 'Marca', desde ese momento, han sido varios los jugadores de la NBA que han reconocido haber vivido extraños sucesos en sus distintas visitas a Oklahoma City. Puertas que se abren solas, armarios que cuyas puertas se cierran de madrugada e incluso grifos que inundan baños sin que se hayan abiertos han sido hechos denunciados de manera común por deportistas de primer nivel que, evidentemente, no ganan nada aumentando la leyenda.

Pero incluso hay testimonios de jugadores de primer nivel que hablan abiertamente de ello. Posiblemente el más claro, el del mítico Tim Duncan: "Escuché un bebé en la habitación de al lado. Sin duda había alguien o algo ahí dentro. No me extrañó, porque pensé que estaba ocupada y se la habían asignado a otra persona que no fuera un jugador. Pero, al día siguiente me contaron que llamaron desde recepción y allí no había nadie. Es para volverse loco. Allí había un bebé sin duda".

En su época en los Knicks, Eddy Curry aseguró que vio el fantasma de una mujer en los pasillos del hotel, lo que le hizo dormir en la habitación de Nate Robinson -por cierto, curiosa debíió de ser la imagen de Robinson (1,75m) protegiendo a Curry (2,13m)-. Hace escasas fechas, era Lou Williams -el hombre de las dos novias-quien se negaba a domir en el Hotel Skirvin, haciéndolo en un hospedaje cercano. Así es el hotel encantado de la NBA que 'castigó' a Kyrie Irving.