Es noticia
Subir el Kilimanjaro en silla de ruedas, el reto que se gestó en un hospital
  1. Deportes
Gema Hassen-Bey sería la primera mujer en hacerlo

Subir el Kilimanjaro en silla de ruedas, el reto que se gestó en un hospital

"Lo de menos es que conquiste esa cima. Lo importante es que todos sepamos que podemos conquistar las nuestras", dice la cinco veces paralímpica por España

Foto: Gema Hassen-Bey quiere ser la primera mujer en subir al Kilimanjaro en silla de ruedas (Foto: Cumbre Bey-Kilimanjaro Challenge)
Gema Hassen-Bey quiere ser la primera mujer en subir al Kilimanjaro en silla de ruedas (Foto: Cumbre Bey-Kilimanjaro Challenge)

Gema Hassen-Bey decidió que iba a subir el Kilimanjaro, casi 6.000 metros de montaña en medio de la sabana africana, mientras estaba en el hospital. ¿Por qué no? Las personas se ponen retos de manera constante, y subir al punto más alto de África tampoco parece la idea más extravagante en un momento en el que la búsqueda de los propios límites se ha convertido en un negocio muy rentable. Pero el suyo es un caso especial: ella quiere hacerlo en silla de ruedas.

Hassen-Bey se quedó paralítica a causa de un accidente de coche. Eso no le impidió convertirse en una deportista de élite que compitió en cinco Juegos Paralímpicos (de Barcelona 1992 a Pekín 2008) en esgrima y ganó cuatro medallas. Ese etapa de su vida se acabó, pero quedó el gusanillo de seguir probándose y demostrando que no es menos que nadie —"Si batimos marcas, representamos a nuestro país... ¿dónde está la discapacidad?", dice —. Por eso lo de ascender al Kilimanjaro en silla de ruedas, algo que solo una persona ha hecho antes: el estadounidense Chris Waddell. Ella sería la primera mujer.

Foto: La medallista paralímpica Gema Hassen-Bey sale del armario

"Lo de menos es que conquiste esa cima", afirma Hassen-Bey. "Lo importante es que todos sepamos que podemos conquistar las nuestras". Con este reto, la madrileña busca dos cosas. Primero, dar visibilidad a las personas que están en su misma situación y que cada día encuentran obstáculos que dificultan su movilidad. "Tenemos un pequeño Kilimanjaro cada día en la ciudad", dice. Por otra parte espera dejar un legado teconológico del que puedan beneficiarse otros.

Cinco cimas en dos años

El reto de Hassen-Bey llegará a su cénit en 2017 cuando haga cumbre en el Kilimanjaro, pero antes de subir a la cima más alta de África le esperan cuatro más dentro del 'Cumbre Bey-Kilimanjaro Challenge'. Ya ha subido al Monte Abantos (aquí puedes ver un vídeo de 'ASTV') y a la Bola del Mundo, ambos en Madrid, y su próximo desafío será en Extremadura, donde subirá una montaña aún por decidir en la zona del Valle del Ambroz. Para ello ha recibido una ayuda de 30.000 euros por parte de la Obra Social "la Caixa". Después tiene previsto subir al Teide, última parada antes de viajar a Tanzania.

En Extremadura, Hassen-Bey tendrá que hacer noche por primera vez, algo que reconoce que le genera muchas dudas. Uno de los principales obstáculos en sus retos es la logística. Es ella la que con su esfuerzo supera las empinadas cuestas que se encuentra, pero va acompañada de un equipo que le permite concentrarse solo en impulsar la 'handbike' con la que se mueve.

Precisamente el vehículo con el que sube lentamente (el esfuerzo que tiene que hacer para impulsarlo cuesta arriba con sus brazos es extraordinario) está siendo uno de sus principales dolores de cabeza. El que tiene no está hecho a su medida y le supone un esfuerzo extra. Para la próxima ascención espera tener ya una nueva 'handbike' que se adapte mejor a su tamaño.

Gema Hassen-Bey decidió que iba a subir el Kilimanjaro, casi 6.000 metros de montaña en medio de la sabana africana, mientras estaba en el hospital. ¿Por qué no? Las personas se ponen retos de manera constante, y subir al punto más alto de África tampoco parece la idea más extravagante en un momento en el que la búsqueda de los propios límites se ha convertido en un negocio muy rentable. Pero el suyo es un caso especial: ella quiere hacerlo en silla de ruedas.