Es noticia
Walt Disney era de Mojácar, el montaje lunar de Kubrick y otros mitos de Hollywood
  1. Cultura
  2. Cine
leyendas urbanas del cine

Walt Disney era de Mojácar, el montaje lunar de Kubrick y otros mitos de Hollywood

Errata Naturae publica 'Kubrick en la luna', un repaso a las fábulas más interesantes del mundo del cine

Foto: 'Kubrick en la luna'.
'Kubrick en la luna'.

El séptimo arte es ese fantástico y mítico universo que da lugar a dos tipos de historias, las que cuentan, a través de los largometrajes que lo conforman, y las que suceden durante los rodajes de los mismos. Grabaciones en las que las consideradas estrellas de cine y los directores más laureados conviven para llevar a cabo una labor destinada a pasar a la historia. Unas jornadas en las que suceden multitud de situaciones que, antes o después, terminan dando lugar a leyendas y mitos sobre las películas y sus intérpretes. La trascendencia que acaben teniendo cada una de ellas dependerá de la capacidad para creérselas de los oyentes y de los medios de comunicación con los que se encuentre. O del interés recopilatorio de un periodista curioso y un dibujante detallista y lleno de sentido del humor.

El periodista salmantino Héctor Sánchez ha sido el encargado de escoger 33 de esas leyendas, las más conocidas y más curiosas del mundo del cine, para recopilarlas bajo el título ‘Kubrick en la luna y otras leyendas urbanas del cine’. Un libro publicado por Errata Naturae, e ilustrado por el madrileño David Sánchez, en el que el mito y la realidad se dan la mano para ofrecer una selección en la que se recogen las invenciones surgidas en torno a los proyectos más importantes de la historia del séptimo arte. Para Héctor Sánchez “estos mitos engrandecen a directores e intérpretes, pero también los humilla y los muestra vulnerables, con los mismos defectos que podemos tener cualquiera. Precisamente, creo estas leyendas urbanas humanizan a las estrellas del séptimo arte”.

Errol Flynn, Marilyn Monroe, Buster Keaton, Bruce Lee o el misterioso maletín de ‘Pulp Fiction’ son algunos de los protagonistas del libro, que por decisión del autor, se ciñe a Hollywood. Porque el cine patrio también tiene sus propias leyendas, y como comenta Héctor Sánchez, “grandes actrices del cine español como Ana Obregón tienen sus propias leyendas urbanas, como sus pechos explosivos dentro de un avión. Bueno, y según cómo se mire, Walt Disney pudo ser español”, señala refiriéndose al capítulo que dedica a la leyenda que habla de los orígenes andaluces del animador estadounidense.

Un hombre que, como describe Sánchez en ‘Kubrick en la luna y otras leyendas urbanas del cine’, tiene una biografía original “fascinante, pero su biografía alternativa la supera en originalidad”. Prueba de ello es que unos capítulos después, el autor se adentra en la rumorología sexual que existe en torno a algunas de las creaciones más famosas de la factoría Disney. Una sexualidad que para el periodista “depende de los ojos con los que mires estas películas. La supuesta erección del sacerdote de 'La sirenita' o la aparición de la palabra “sex” durante toda la película de 'El rey león' no son más que interpretaciones de mentes calenturientas. No obstante, en 'Los rescatadores' sí que hay una señorita en paños menores”, aclara.

La aparición del VHS contribuyó, en algunos casos, a agrandar esas leyendas, un mal con el que también se encontró la fantasía musical dirigida al público infantil, ‘El mago de Oz’. Aunque en este caso el mito no pertenece al género sexual, sino al funerario. Porque mientras Dorothy, el Espantapájaros y el Hombre de Hojalata recorren el camino que lleva al Mago de Oz, al fondo de la escena se intuye una figura que se asemeja a un hombre colgado de un árbol. Y las conclusiones a las que llegaron los espectadores fueron, como cuenta Sánchez en su libro, de lo más variopintas.

De miembros y hazañas sexuales

Si algo caracteriza el universo de las leyendas del mundo del cine es la diversidad de argumentos que, supuestamente, las sustentan. Por ejemplo, la leyenda urbana que señala que Jaime Lee-Curtis no es una mujer, sino una persona intersexual, se ha apoyado durante décadas en las habladurías en torno a su ambiguo nombre, los cotilleos que tratan de justificar que sus hijos sean adoptados o los desafortunados artículos de profesores de antropología. Sánchez pone nombres y fechas a la sucesión de hechos que han dado lugar a tan sorprendente leyenda que, como el propio autor señala, quizá ella misma quiso enterrar con su baile en ropa interior en la película de 1994, ‘Mentiras arriesgadas’.

Otros mitos nacen de autores más reconocidos y respetados, algo que añade cierto glamur a la leyenda. Porque no es lo mismo que nazca en un periódico local que sea fruto de una entrevista a una estrella del cine como Marilyn Monroe. Y menos cuando el que hacía las preguntas era un escritor como Truman Capote, que publicó su encuentro con la ambición rubia en su libro ‘Música para camaleones’. “¿Te conté alguna vez lo de aquella ocasión en la que vi a Flynn sacarse la picha de repente y empezar a tocar el piano con ella?”, preguntó Monroe a su interlocutor, aclarando después que el tema elegido por el actor para tamaña proeza fue ‘You Are My Sunshine’. Aunque, según recoge Sánchez en su libro, las hazañas sexuales de Errol Flynn forman parte de una leyenda aún más grande.

Leyendas clásicas del séptimo arte

Entre los protagonistas de las leyendas más añejas de la historia del séptimo arte se encuentran clásicos como Groucho Marx, Charlie Chaplin o Buster Keaton. Y lo hacen con historias tan dispares como el mito sobre la lápida del mediano de los hermanos cómicos, el del concurso de imitadores que perdió el protagonista de ‘El gran dictador’ o las cláusulas de los contratos que, durante toda su vida, firmó Cara de Palo.

Otro de los mitos clásicos del cine, aunque más reciente, es aquel que da nombre al libro, la leyenda sobre el rodaje de ‘2001: Odisea en el espacio’. Esa que entonan los más escépticos cuando se habla de la llegada del hombre a la Luna y que relacionan la proeza de Armstrong y Aldrin con la película de Kubrick. Una historia que razonan, tal y como recoge Sánchez, con dos rodajes posteriores del director neoyorquino, los de ‘Barry Lyndon’ y ‘El resplandor’.

Cada uno de los 33 capítulos de 'Kubrick en la luna y otras leyendas urbanas del cine' está centrado en un personaje o una película. Sin embargo, en el libro de Errata Naturae resulta destacable la presencia de un nombre que aparece en varios episodios: el de Frank Sinatra. “Frank Sinatra es un artista polifacético que da mucho juego y, sin pretenderlo, se convirtió en un personaje muy recurrente en el libro”, comenta el autor. Su vínculo con la mafia y la relación de esta con 'El padrino', su afinidad con Bela Lugosi o el nexo que le unía con JFK son algunas de las historias en las que la Voz es un personaje secundario pero vital para la trama.

Rodajes infernales

Otro de los proyectos complicados más conocidos de la historia del cine escogido por Héctor Sánchez es el de la mítica película de 1939 ‘Lo que el viento se llevó’. Partiendo del particular carácter de Clark Gable, el periodista desvela la sucesión de celos, desplantes, broncas y renuncias que marcaron el rodaje del largometraje. Un ambiente tan tenso e irrespirable como el de ‘¿Qué fue de Baby Jane?’, que en 1962 protagonizaron Joan Crawford y Bette Davis. Dos mujeres que se odiaron de tal manera que Ryan Murphy, creador de ‘The People Vs. O.J. Simpson: American Crime Story’, llevará próximamente a la pequeña pantalla el rodaje de la película. “La relación entre estas actrices es material exquisito para una serie de televisión, con todas las perrerías que se hacían una a la otra. Una especie de Tom y Jerry protagonizado por dos mujeres de avanzada edad. Además, la elección de Susan Sarandon y Jessica Lange me parece muy acertada”, comenta Sánchez sobre el próximo estreno, que llevará el título de ‘Feud’.

Los mitos del séptimo arte no se alimentan únicamente de egos, y las maldiciones y los fenómenos paranormales también son ingredientes importantes del universo de las leyendas cinematográficas. En este apartado tienen un lugar destacado películas míticas del género del terror como ‘La semilla del diablo’ o ‘El exorcista’. Para Sánchez, la intrahistoria más sorprendente de todas las que componen ‘Kubrick en la luna y otras leyendas urbanas del cine’ es la de ‘La semilla del diablo’. Para el autor la historia que reúne a “Roman Polanski, Charles Manson y los Beatles es escalofriante”. Y es que la grabación de la película de 1968 concentró a su alrededor una serie de personajes y sucesos que hicieron inevitable el nacimiento de la leyenda. Entre ellos, cómo no, Frank Sinatra.

Sin embargo, el mito que más sorprendió al autor fue uno de los que surgieron en torno a ‘El exorcista’, la maldición de Noel Marshall. El productor “invirtió el dinero que ganó en dirigir la película 'El gran rugido'. Aquello de juntar leones y actores no fue buena idea y todos acabaron heridos”. Y eso después de otro rodaje, el de ‘El exorcista’, digno de una película propia. Porque la adaptación de la novela de William Peter Blatty que dirigió William Friedkin fue una de las experiencias más terribles que vivieron algunos de los que trabajaron en ella. Los métodos del director y una macabra, y sorprendente, sucesión de defunciones relacionadas con varios miembros del equipo convirtieron en leyenda el rodaje de una película que, todavía hoy, inspira a creadores televisivos. Nadie dijo que fuera fácil pasar a la historia del cine.

El séptimo arte es ese fantástico y mítico universo que da lugar a dos tipos de historias, las que cuentan, a través de los largometrajes que lo conforman, y las que suceden durante los rodajes de los mismos. Grabaciones en las que las consideradas estrellas de cine y los directores más laureados conviven para llevar a cabo una labor destinada a pasar a la historia. Unas jornadas en las que suceden multitud de situaciones que, antes o después, terminan dando lugar a leyendas y mitos sobre las películas y sus intérpretes. La trascendencia que acaben teniendo cada una de ellas dependerá de la capacidad para creérselas de los oyentes y de los medios de comunicación con los que se encuentre. O del interés recopilatorio de un periodista curioso y un dibujante detallista y lleno de sentido del humor.

Ana Obregón Frank Sinatra
El redactor recomienda