Una IA resucita a un Van Gogh "plagado de errores" en el Museo de Orsay en París

A estas alturas parece una obviedad decir que la Inteligencia Artificial ha llegado para quedarse y que todavía no nos hacemos a la idea de las posibilidades que ofrece (aunque las estamos intuyendo). Además de hacernos dudar sobre nuestros sentidos o mostrarnos a Quevedo cantando canciones de las Ketchup, también tiene unas implicaciones más distópicas que pasan incluso por revivir a los muertos. Ahora podemos ver a María Callas en concierto o hablar con Vincent van Gogh, que está bastante ocupado pese a llevar años bajo tierra.

Como explica The New York Times en un reciente artículo, además de que sus cuadros han estado presentes en varias exposiciones importantes durante este año, algunos teatros en ciudades tan dispares como Miami o Milán han incluido sus paisajes en sus representaciones de los últimos tiempos. Tampoco falta nunca el merchandasing en torno al pintor que solo vendió un cuadro en toda su vida (a su hermano): desde colaboraciones con la franquicia de Pokémon a zapatillas o felpudos con sus flores. Pero, sin duda, el intento más ambicioso de defender su legado lo ha protagonizado recientemente el Museo De Orsay de París.

El museo francés ha creado, gracias a la Inteligencia Artificial, algo así como un doble realista del artista holandés que es capaz de hablar con los visitantes y ofrecer información sobre su vida y muerte (está repleto de errores, según los historiadores). Este nuevo Van Gogh 2.0 se llama Bonjour Vincent y ha sido creado basándose en 900 cartas que el artista escribió durante el siglo XIX y partiendo de distintas biografías sobre él. El algoritmo va refinando continuamente sus respuestas mediante el aprendizaje automático, especialmente aquellas más difíciles de contestar como la morbosa duda acerca de su suicidio.

Según declaraciones de Agnès Abastado, directora de desarrollo digital del museo, al periódico neoyorkino, la discusión sobre el desarrollo de un algoritmo de Van Gogh llevó casi un año. "Una de las preguntas que nos hicimos fue en qué momento este Van Gogh era el verdadero Van Gogh", explica. “Era importante mostrar cómo esta tecnología no sólo será un proyecto comercial, sino cultural que puede mejorar la exhibición del conocimiento”.

"Una de las preguntas que nos hicimos fue en qué momento este Van Gogh era el verdadero Van Gogh"

La inciativa del Museo de Orsay intenta afirmar su relevancia en la vida moderna pese a que parte de su colección es del siglo XIX. La Inteligencia Artificial del artista también está relacionada con su exposición actual, que durará hasta el 4 de febrero (Van Gogh en Auvers-sur-Oise: los últimos meses), que analiza la última época de vida del artista, cuando produjo más de 74 pinturas y 33 dibujos.

Sin embargo, muchos historiadores no han visto con buenos ojos esta versión digital del holandés, debido a que no solo parece un esfuerzo de los museos por mercantilizar el arte, sino que además consideran que está plagado de errores. Por ejemplo, Bonjour Vincent aseguró que La noche estrellada era su obra favorita puesto que representaba "una manifestación de mi personalidad agitada y mi anhelo por lo divino". El verdadero Vam Gogh fue mucho más ambivalente en las opiniones respecto a su obra en vida. Otros estudiosos, por su parte, aseguraron que podían entender el atractivo de la propuesta.

Jumbo Mana, la nueva empresa tecnológica que desarrolló el algoritmo de Van Gogh, ha señalado que planea lanzar el programa de InteligenciaArtificial de Van Gogh en dispositivos Amazon Alexa y Echo durante el próximo año. La compañía está trabajando en un proyecto similar basado en la vida del poeta francés y maldito Arthur Rimbaud.