David Chipperfield, arquitecto antirretórico (y sobre todo humilde), gana el Pritzker 2023

Su nombre estaba desde hace años en todas las quinielas… Y por fin se ha acabado imponiendo. El arquitecto británico David Chipperfield (Londres, 1953) ha sido galardonado con el Premio Pritzker 2023.

Chipperfield, de 68 años, practica una arquitectura minimalista y antiretórica, dominada por volúmenes simples. «La apuesta de Chipperfield es por una arquitectura cívica, sobria pero también innovadora, que siempre ha llevado a cabo con austeridad, evitando movimientos innecesarios y alejándose de tendencias y modas”, en palabras del jurado del Premio Pritzker, presidido en esta edición por Alejandro Aravena.

En un mundo que en las últimas décadas ha visto el triunfo de los arquitectos-estrellas, convertidos en auténticos ídolos del arte de construir edificios, Sir David Chipperfield destaca por lo contrario. Su modestia y su humildad apabullan. "Todavía me siento como un farsante, todavía siento que he improvisado algo que aspira a ser un arquitecto adulto", decía en 2020 en una entrevista a Dezeen, la prestigiosa revista de arquitectura.

Responsable de la renovación de la Royal Academy of Arts de Londres, Chipperfield también ha firmado, entre otros, la ampliación del cementerio de San Michele en Venecia, la galería en Berlín James Simon, el museo Neus de Berlín, el cuartel general de Amorepacific en Seúl y la sede escocesa de la BBC en Glasgow. En España llevan su firma un proyecto de viviendas sociales en la localidad madrileña de Villaverde, el edificio Veles e Vents en Valencia y la Ciudad de la Justicia de Barcelona.

Chipperfield tiene importantes conexiones con España. Posee una casa en la localidad gallega de Corrubedo, y fue a esa casa donde se trasladó junto a su familia durante la pandemia de coronavirus.

“Creo que la buena arquitectura proporciona un escenario, algo que está ahí y no está ahí. Como todas las cosas que tienen un gran significado, están tanto en primer plano como en segundo plano, yo no estoy fascinado todo el tiempo por el primer plano. La arquitectura es algo que puede intensificar y ayudar a nuestros rituales y a nuestras vidas. Las experiencias de la vida hacia las que yo me inclino y con las que más disfruto son esas cosas normales que se vuelven especiales, en oposición a eso donde todo es especial”.

El premio Pritzker, instituido en 1979, reconoce a un arquitecto vivo cuyo trabajo muestre talento, visión y compromiso y haya supuesto una contribución consistente y significativa para la humanidad. El galardón fue creado por Jay A. (1922-1999) y Cindy Pritzker, quienes estaban convencidos de que un premio importante de arquitectura estimularía una mayor conciencia pública sobre los edificios y una mayor creatividad entre los profesionales.

El Pritzker se otorga anualmente y a menudo se lo denomina Nobel de arquitectura. Está dotado con 100.000 dólares y un medalla de bronce.