Estreno de 'La Última Piel': ¿Y si tu hijo reaparecido es en realidad un impostor?

La impostura, la invención del pasado y la falta de afecto forman un cóctel explosivo en la última película de Isaki Lacuesta, 'La próxima piel' (La propera pell), que codirige con su guionista y pareja Isa Campo y se estrena este viernes tras triunfar en el Festival de Málaga.

En una entrevista con Efe, Lacuesta comenta que "era importante que la historia narrada estuviera enclavada en un pequeño pueblo fronterizo del Pirineo, donde todos te conocen, todos recuerdan quién eres". En ese contexto tan cerrado -ese pueblo que tiene "función narrativa"- 'La próxima piel' sitúa al personaje de Gabriel, que reaparece ocho años después de haber desaparecido en la montaña con unas condiciones climáticas de difícil supervivencia para un niño de ocho años.

El origen de 'La próxima piel' es, recuerda Campo, una serie de noticias que aparecieron en la prensa en 2003 de personas desaparecidas y que reaparecieron, y algunas de ellas eran impostoras. La película, añade Lacuesta, habla de "si podemos desprendernos de todo el pasado y comenzar una nueva vida" y, sin contradecir esta afirmación, Campo precisa: "hablamos de identidad, de construir una nueva vida, de las estructuras sociales de los pequeños pueblos".

"Escribimos este guión hace diez años pensando en Emma Suárez", ha explicado Campo. "Es un guion complejo, con elementos de 'thriller' psicológico, que juega con la verdad y la mentira y plantea cómo a veces necesitamos convertir las mentiras en verdades", explica Emma Suarez. "Habla de la relación madre e hijo más allá de los vínculos de sangre y de la necesidad de amar que sienten ambos, desde un lugar muy honesto", añade la actriz.

A vueltas con el maltrato

La película habla de "si podemos desprendernos de todo el pasado y comenzar una nueva vida

Sin ser el argumento principal, "los maltratos y la violencia machista son uno de los temas centrales de la película, planea todo el tiempo, y la amnesia disociativa que sufre Gabriel es propia de chavales que han sufrido traumas y agresiones físicas", señala Lacuesta. A estas estructuras narrativas se suma además "una parte de película de 'amour fou', con personajes con carencias afectivas muy graves" que dibujan una "película que combina el suspense y el drama familiar".

Precisamente, lo que más costó a ambos directores, anota Lacuesta, fue "encontrar el equilibrio entre el suspense y el drama", como demuestra que estuvieron durante años escribiendo y reescribiendo el guión y al final tuvieron que contratar al guionista Fran Araújo. La intervención de Aráujo fue fundamental para redondear una historia que no se resuelve hasta el final: "Fran Araújo nos dijo que el final debe ser sorprendente pero inevitable, y que no pudiera ser intercambiable", explica. El espectador asiste durante la película a una "delegación de dudas", pero ambos directores querían que el final fuera "inequívoco, que no hubiera trampa ni cobardía".

Además de Àlex Munner, que da vida al personaje de Gabriel, Emma Suárez y Sergi López completan el reparto para dar vida, respectivamente, a la protagonista, Ana, y a su cuñado y amante Enric. Ambos cineastas confiesan que los actores han sido muy generosos: "son actores que interpretan a unos personajes que están mintiendo dentro de la película y por ello debían ser muy buenos, y eso se consigue además con ensayos durante bastante tiempo y a que se quedaron todo el rodaje, con lo cual pudimos adaptarnos a la climatología", zanjan.