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Nueve pistas para descubrir la verdadera historia de Ricardo III
  1. Cultura
¿VILLANO, VÍCTIMA O PERSONAJE DE FICCIÓN?

Nueve pistas para descubrir la verdadera historia de Ricardo III

Ha sido la noticia de la semana. Un grupo de investigadores ingleses encontró el pasado año, bajo un aparcamiento de la ciudad de Leicester, un conjunto

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Nueve pistas para descubrir la verdadera historia de Ricardo III

Ha sido la noticia de la semana. Un grupo de investigadores ingleses encontró el pasado año, bajo un aparcamiento de la ciudad de Leicester, un conjunto de huesos que podrían haber pertenecido al monarca inglés Ricardo III. Esta misma semana, una posterior investigación realizada con algunos de los últimos adelantos tecnológicos les permitió asegurar que, efectivamente, así era: los restos mortales pertenecían al último monarca de la Casa York, tal y como anunciaron en la Universidad de Leicester. Pero el caso no parece cerrado, ya que los nuevos descubrimientos podrían arrojar una nueva luz sobre la figura del monarca, uno de los más polémicos de la historia de Inglaterra, por el carácter sanguinario que se le ha atribuido al rey inmortalizado por William Shakespeare en una de sus obras de teatro más importantes.

Muchos expertos han pedido que, ahora que se disponen muestras del ADN de Ricardo III, se realicen pruebas semejantes a los restos de dos niños enterrados en la Abadía de Westminster y que se cree podrían pertenecer a los herederos que, dice la leyenda, Ricardo asesinó. Sin embargo, como informa el Daily Mail, la Iglesia de Inglaterra, apoyada por la Reina, ha impedido durante los últimos veinte años que ningún experto accediese a dichos restos, y no parece que la situación vaya a cambiar. En primer lugar, porque consideran que los niños deben gozar del descanso eterno sin que sus restos sean molestados. Pero también porque temen que abrir las puertas a este tipo de prácticas, aunque sea por una vez, pueda llevar a muchos otros a comenzar a rebuscar en las criptas de la monarquía inglesa. Pero, ¿cuál es la verdad y cuál es la mitología que envuelven al personaje que han dado vida, entre otros, Al Pacino, Kevin Spacey o Laurence Olivier?

  • Su reinado apenas duró dos años, entre 1483 y 1485. Lo que mal comienza, mal acaba, y el reinado de Ricardo III siempre estuvo envuelto por las sospechas de manipulación y su confrontación con los diferentes candidatos al trono. Fue uno de ellos, Enrique Tudor, descendiente ilegítimo de la casa Lancaster, quien finalmente acabaría con su vida y obtendría el trono el 22 de agosto de 1485.
  • Sufría escoliosis. Una de las dudas que ha permitido resolver el hallazgo de la ciudad de Leicester ha sido la de si verdaderamente era tan jorobado y deforme como Shakespeare lo pintó. En realidad, parece ser que sufría una importe escoliosis que probablemente causase que le costase caminar con dificultad y diese pábulo a ese retrato desfigurado que siempre se le ha sido atribuido, seguramente agudizado por la mala fama del monarca tras el fin de reinado.
  • Inspiró a William Shakespeare… y a George R.R. Martin. Ricardo III quizá sea uno de los grandes personajes pergeñados por el Bardo, un monstruo deforme tanto exterior como interiormente, corroído por la envidia y la ambición. Además, la Guerra de las Dos Rosas en la que se vio envuelto contra la Casa de Lancaster fue una de las principales fuentes de inspiración históricas para el Juego de tronos de George R.R. Martin. No sólo ficción y realidad coinciden en su descripción de las pasiones y debilidades humanas, sino que ciertos personajes, nombres y acontecimientos parecen sacados directamente de dicha confrontación por la corona de Inglaterra. Al fin y al cabo, ¿no suena eso de Lancaster muy parecido a “Lannister”?  
  • Su ambición le llevó a acabar con sus sobrinos y su hermano. Este es uno de los puntos que más polémica han generado alrededor de la figura del monarca. Ricardo se encontraba en competencia directa en la línea de sucesión con el príncipe Eduardo V, hijo del rey fallecido Eduardo IV y sobrino suyo. Se dice que Ricardo III capturó al niño de doce años y a su hermano, los llamados “príncipes de la Torre”, y acabó con su vida, una versión que la obra de teatro de Shakespeare ha contribuido a reforzar. Precisamente, la petición de nuevas investigaciones tienen como objetivo esclarecer estos hechos. Además, su hermano Jorge, duque de Clarence, fue ejecutado por traición, orden firmada por el propio Ricardo.
  • Fundó el King’s College de Cambridge. A pesar de la mala fama que arrastra el monarca, él y su mujer, Ana Neville, fueron los responsables de la creación de uno de los college más importantes, si no el que más, de la Universidad de Cambridge. Sin embargo, no fue él quien concibió la idea de su construcción, sino Enrique VI. Pero fue durante el reinado de Ricardo III cuando la mayor parte de la obra de la capilla fue llevada a cabo, llegando a concluir seis tramos de la misma. La capilla no sería finalmente inaugurada hasta 1544, más de un siglo después del comienzo de su construcción, bajo el reinado de María Tudor.
  • Tomás Moro lo retrató por primera vez. Gran parte de lo que conocemos hoy en día sobre Ricardo III procede de lo que el teólogo Tomás Moro escribiese de él a comienzos del siglo XVI. Fue en su obra de 1513 Historia de Ricardo III en la que fue descrito por primera vez como un hombre deforme, malvado y casi monstruoso, una imagen que ha llegado hasta nuestros días y que, con el paso intermedio del Ricardo III de Raphael Holinshed, inspiró a Shakespeare en su obra definitiva sobre el monarca.
  • Murió en batalla. El final de su breve reinado se produjo a manos del ejército de Enrique Tudor, poniendo punto y final al reinado de la Casa de los Plantagenet y de los York: la era de los Tudor daba comienzo. Fue en los campos de Bosworth donde Ricardo perdió la vida, y donde a pesar de contar de partida con un ejército mayor que el de su adversario, terminó sucumbiendo debido a la traición a última hora de los Stanley. El hallazgo de esta misma semana concreta de qué manera fue abatido: el cuerpo presentaba hasta 10 heridas de batalla, pero probablemente la mortal fuese la que recibió en la parte trasera de su cabeza con una alabarda. Curiosamente, Ricardo III fue el último monarca inglés abatido en batalla.
  • Suya es la célebre frase “mi reino por un caballo”. Fue precisamente en la batalla de Bosworth en la que, según señala la obra de teatro de William Shakespeare, Ricardo III exclamó dicha sentencia. Esto ocurre en el clímax de la obra, cuando el rey ha sido derribado de su caballo e inmediatamente antes de ser abatido por Richmond. ¿Pronunció la frase el monarca? No, pero desde luego, se trata de una de las sentencias más recordadas de la literatura universal que nos recuerdan que, cuando todo va mal, ni siquiera todo el poder del mundo puede salvarnos la vida.
  • ¿Una víctima de la propaganda de los Tudor? Muchos historiadores han considerado que los rasgos tan negativos atribuidos al monarca probablemente tengan su origen en la campaña de difamación emprendida por los Tudor después de su caída del trono. Al fin y al cabo, sus principales biógrafos (Moro, Shakespeare) no conocieron de primera mano los acontecimientos que envolvieron a su reinado, y además, vivieron en tiempos de la monarquía Tudor, en los que Ricardo era siempre retratado como un tirano. Por ejemplo, Moro se basó para su trabajo –que nunca pretendió publicar en vida– en testimonios de “gente sabia” para conformar ese despiadado retrato del monarca, que es el que finalmente ha pasado a formar parte de los libros de historia.

Ha sido la noticia de la semana. Un grupo de investigadores ingleses encontró el pasado año, bajo un aparcamiento de la ciudad de Leicester, un conjunto de huesos que podrían haber pertenecido al monarca inglés Ricardo III. Esta misma semana, una posterior investigación realizada con algunos de los últimos adelantos tecnológicos les permitió asegurar que, efectivamente, así era: los restos mortales pertenecían al último monarca de la Casa York, tal y como anunciaron en la Universidad de Leicester. Pero el caso no parece cerrado, ya que los nuevos descubrimientos podrían arrojar una nueva luz sobre la figura del monarca, uno de los más polémicos de la historia de Inglaterra, por el carácter sanguinario que se le ha atribuido al rey inmortalizado por William Shakespeare en una de sus obras de teatro más importantes.