El Gobierno responde a Cebrián: “No sabemos quién dirige ahora la orquesta de Prisa”

Sube de temperatura el divorcio entre el Grupo Prisa y el Gobierno del PSOE. Si duras fueron las palabras de Juan Luis Cebrián, consejero delegado de la compañía, quien, arropado por Ignacio Polanco y Javier Díez Polanco, criticó duramente a Zapatero, no menos contundente ha sido la respuesta del líder del Ejecutivo.

Dos son las ideas claras que fuentes próximas al Gobierno han querido transmitir. La primera, directa a la yugular del grupo mediático: “No sabemos quién dirige ahora la orquesta del Grupo Prisa”. La declaración tiene que ver con el fallecimiento del fundador, Jesús Polanco, el vacío de poder que éste ha dejado y la pelea entre los dos Polanco y el propio Cebrián por el poder dentro de Prisa. En definitiva, sal a la herida que más duele. E insisten: “No sabemos si Cebrián ha hablado en calidad de consejero delegado de Prisa, de Sogecable, como ex director de El País o como Juan Luis Cebrián”.

Y la segunda, también muy directa, relativa al conflicto que ha originado el inicio de divorcio entre el PSOE, o el Gobierno, y el conglomerado mediático de los Polanco: la 'guerra del fútbol'. “Es un conflicto entre empresas en el que no nos vamos a meter”. Justo, otra vez, lo que más le duele a Prisa y lo que más beneficia, en principio, a Mediapro.

Los zarpazos de Cebrián

Respuesta dura a unas duras declaraciones que Cebrián hizo ayer por la mañana en un desayuno en el Ritz y que desde luego será recordado durante mucho tiempo por la crudeza de los ataques a Zapatero. En un cuidado discurso que llevaba escrito, y en medio de la conocida como ‘segunda guerra del fútbol’, el consejero delegado de Prisa criticó al presidente y su política como nunca antes se había oído a un directivo de Prisa.

Primero, intervencionista. Cebrián acusó al gobierno hasta de participar en los casos de asalto al BBVA y Endesa para asegurar que los “brujos visitadores de Moncloa”, en referencia a los ejecutivos de Mediapro y La Sexta, han conseguido lo que buscaban: influir en el panorama mediático con la obtención de una televisión en abierto “a unos ex socios del ex secretario de Estado de Comunicación”, Miguel Barroso.

En este sentido, Cebrián recordó que ya anteriormente hubo algún intento de crear un grupo mediático afín al PSOE, por Alfonso Guerra, que “acabó con unos cuantos muy ricos, otros arruinados, y la soledad creciente de la izquierda en el panorama mediático español”. Cebrián sólo salvó a Felipe González, “verdadero impulsor del pluralismo mediático en España”.

Segundo, política de comunicación fallida y causante de la posible derrota electoral del PSOE. “¿Cómo es posible que un Gobierno que retira las tropas de Iraq, mantiene el crecimiento de la economía en el 4% y la inflación controlada, no despegue en las encuestas?”, se preguntaba Cebrián. Si no gana las elecciones, “será por sus errores”, dijo.

Sobre este asunto, más. “La política de comunicación del Gobierno se ha basado en el oportunismo y la falta de estrategia, siempre a la defensiva y motivado por manías e intereses particulares”. Cebrián se ha quejado también de la falta de apoyo del Gobierno en la expansión internacional del Grupo Prisa. “Somos el único grupo de capital español y, enredado en cuestiones menores sobre el editorial de cada día, este gobierno no ha querido o no ha sabido acompañar a las empresas culturales e informativas españolas en su expansión fuera de nuestras fronteras. Todavía está a tiempo de hacerlo”.

El Rey y Federico Jiménez Losantos