Estas son las cosas que más odian los alemanes, según una española: "El teléfono, fuera"

Entre la rica y diversificada cultura alemana, existen ciertas costumbres y actitudes que pueden resultar especialmente molestas para sus habitantes. Aunque este país es célebre por su arquitectura impresionante, su fervor por el fútbol y su meticulosa eficiencia, hay aspectos cotidianos que pueden provocar el desagrado de los más tolerantes alemanes.

Mimi, una de las tiktokers españolas con más éxito en redes sociales y que vive en Alemania, ha subido un nuevo vídeo en el que explora las cinco conductas que son particularmente intolerables para los germanos. Con algunas de ellas más de uno se sentirá reconocido, mientras que otras pueden resultar más draconianos. Sea como sea, te vendrá bien saber estos detalles por si estás planificando un viaje al corazón de Europa.

La puntualidad se erige como la primera y más universal de las ofensas. En Alemania, el retraso no se considera una falta menor; es casi vista como una ofensa grave. "Si no llegas 5 minutos antes, ya vas tarde y realmente les enfada mucho", revela Mimi. Esta predilección por la puntualidad se manifiesta con claridad en las reuniones de trabajo, que comienzan y finalizan con una precisión inigualable.

Respeto por la privacidad

El respeto a la privacidad ocupa un lugar prominente entre estos desencuentros culturales. Ya sea en el ambiente laboral o en momentos de ocio, invadir el espacio personal es considerado inaceptable. Esto abarca desde la reticencia a discutir aspectos de la vida personal hasta la prohibición tácita de tomar fotografías o grabaciones sin consentimiento. "Muchas veces te pueden decir: 'Oye, el teléfono, fuera'", indica la tiktoker, subrayando la importancia del respeto por el espacio ajeno.

Adentrarse en un hogar alemán sin descalzarse representa otra grave falta de etiqueta. Este simple acto, quitarse los zapatos al entrar, simboliza respeto y consideración por el espacio doméstico. Por otro lado, el uso indebido de los carriles bici no solo es visto como una molestia, sino que también constituye un peligro tanto para peatones como para ciclistas. "Es horrible", describe la española, haciendo hincapié en la facilidad con la que se distingue a los residentes de los visitantes por este comportamiento.

El reciclaje: una prioridad

Finalmente, el reciclaje emerge como un aspecto crucial de la vida en Alemania. La sociedad alemana otorga una importancia capital al tratamiento de residuos. "Aquí se recicla muchísimo y de esto sí que podríamos aprender todos un poquito", apunta el vídeo. La rigurosidad con la que se separan los desechos no solo es motivo de orgullo nacional, sino que el incumplimiento de estas normas puede acarrear sanciones económicas.

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Conocer y adherirse a estas peculiaridades culturales resulta esencial para cualquiera que visite o decida establecerse en Alemania. No solo facilitará la integración, sino que también evitará las miradas de reprobación. Así que, recuerda: la observancia de la puntualidad, el respeto por la privacidad, las normas domésticas, la concienciación sobre el uso de carriles bici y el compromiso con el reciclaje pueden marcar la diferencia en tu experiencia alemana. Y, cuidado, no te sorprendas si tu vecino verifica tu basura para asegurarse de que reciclas adecuadamente.