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El Colegio de Enfermería contra Sanidad: "El caso de Rayán no es excepcional en España"
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El Colegio de Enfermería contra Sanidad: "El caso de Rayán no es excepcional en España"

"Cuando las enfermeras salen de la facultad, tienen toda la responsabilidad de sus actos, pero sólo están preparadas para ofrecer unos cuidados generales y, por tanto,

"Cuando las enfermeras salen de la facultad, tienen toda la responsabilidad de sus actos, pero sólo están preparadas para ofrecer unos cuidados generales y, por tanto, no pueden dar seguridad clínica en actividades de alto riesgo como las que implica la atención a bebés prematuros". Así de tajante se ha mostrado Máximo González Jurado, presidente del Consejo General de la Organización Colegial de Enfermería, ante la muerte por negligencia médica de Rayán, el bebé de Dalilah, la primera fallecida por Gripe A. Según su opinión la supresión de personal sin cualificar, un modelo de contratación inadecuada y la falta de supervisión pudieron influir en el error que mató a Rayán.  

Si por él fuera, "a una enfermera recién graduada no la pasaría a estas unidades sin haberla formado previamente", haciendo alusión directa a la enfermera en cuestión del Hospital Gregorio Marañón que inyectó la leche en vena al bebé, en lugar de por sonda. La joven de 22 años llevaba dos años ejerciendo como enfermera y sólo un día en la Unidad de Neonatología. "Es necesario desarrollar la especialidad de Enfermera Pediátrica y otras que recoge la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS), así como un periodo de residencia, similar al sistema MIR de los médicos, que permita a las enfermeras hacer prácticas antes de iniciar su etapa profesional", insistió.

Caso similar en Canarias hace 9 años

González Jurado informó de que hace nueve años hubo un "caso gemelo" en Canarias. Una enfermera con "amplia" experiencia profesional cometió un error similar al actual y lo reconoció ante un juzgado. En este caso, la enfermera fue condenada a un año de prisión y tres de inhabilitación. Esto demuestra que el caso de Rayán no es un caso excepcional. "Se debe trabajar para minimizar cualquier riesgo propio de una actividad sanitaria como ésta", insistió. En el caso específico de la enfermera del Gregorio Marañón, "hay que esperar a que finalice la investigación". Hasta entonces, hay que acogerse a la presunción de inocencia de esta profesional que "está sufriendo muchísimo" y recibiendo tratamiento psicológico y psiquiátrico. "En una situación como ésta es una persona muerta".

Investigar el sistema de contratación

Hasta ahora, se ha puesto en contacto con la Comunidad de Madrid para obtener información sobre la situación actual de esta unidad y para pedir explicaciones sobre el tipo de contratación que tiene el centro. "La joven tenía un contrato temporal que, aunque es legal, a una enfermera no se la puede contratar por lista".

Asimismo, hizo un llamamiento a la proporción tan dispar de enfermeras por cada mil habitantes dependiendo de la comunidad en la que trabajasen. "España está a la cola europea con 5,4 profesionales por cada mil habitantes", frente a los 9 de media que hay en Europa.

Según González Jurado, lo sucedido con el pequeño Rayán es "una tragedia griega" que va a suponer un "punto y aparte para todo el mundo de la enfermería". Cuando concluya su investigación, se pedirá depurar todo tipo de responsabilidad, "la tenga quien la tenga". Contra Antonio Barba, director gerente del hospital, estudiará con sus expertos jurídicos iniciar algún tipo de procedimiento legal por sus manifestaciones "inmorales e indecentes". Calificar de un "terrorífico error sólo lo puede afirmar de forma tan categórica un juez y tras concluir una investigación".

Asimismo, insinuó que si hubiera sido un médico y no una enfermera el que hubiera provocado el error, "no hubiera hecho estas declaraciones tan rápidamente". Carmen Flores, presidenta del Defensor del Paciente, apoya al Consejo General de Enfermería en cada una de sus afirmaciones y sigue preguntándose por qué todavía no ha dimitido nadie. "Tenemos conocimiento de otro caso en Andalucía en los años 80 y no sólo no salió a la luz, sino que ni tan siquiera los padres del bebé se enteraron de la situación", afirma. Por ello, aconseja a los padres de los bebés prematuros o ingresados en planta o en UCI que soliciten autopsia judicial en caso de fallecimiento repentino sin motivo aparente para ello. Al mismo tiempo, el prematuro Rayán ha sido enterrado junto a Dalilah, su madre, en el pueblo marroquí de Mdiq, tras una ceremonia de tradición marroquí al que sólo asistieron hombres.

"Cuando las enfermeras salen de la facultad, tienen toda la responsabilidad de sus actos, pero sólo están preparadas para ofrecer unos cuidados generales y, por tanto, no pueden dar seguridad clínica en actividades de alto riesgo como las que implica la atención a bebés prematuros". Así de tajante se ha mostrado Máximo González Jurado, presidente del Consejo General de la Organización Colegial de Enfermería, ante la muerte por negligencia médica de Rayán, el bebé de Dalilah, la primera fallecida por Gripe A. Según su opinión la supresión de personal sin cualificar, un modelo de contratación inadecuada y la falta de supervisión pudieron influir en el error que mató a Rayán.