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"Tuve que contratar un CEO para mi 'startup' porque no podía ir al instituto"
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Noa Mintz creó una empresa con 13 años

"Tuve que contratar un CEO para mi 'startup' porque no podía ir al instituto"

'Nannies by Noa' es un servicio que ofrece a los padres la posibilidad de contratar a las 'babysitter' con todas las garantías, y a éstas encontrar una forma de trabajo estable y bien remunerado

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“De acuerdo, si crees que puedes encontrar una cuidadora mejor, adelante”. La voz de la madre sonó desesperada. Noa, que por aquel entonces apenas sumaba 13primaveras, se tomó la amenaza como un interesante reto. ¿Por qué no buscar ella misma una nueva babysitter que la atendiera? En aquel intercambio de impresiones en la cocina se forjó lo que a día de hoy es todo un negocio.

Nannies by Noa esun servicio que ofrece a los padres la posibilidad de contratara las babysitter con todas las garantías, y a éstas encontrar una forma de trabajo estable y bien remunerado. Esta agencia de colocación cuenta ya con un volumen de negocio tal, que su fundadora ha tenido que contratar un CEO para no perderse niuna clase del instituto.

Noa Mintz está hecha de una pasta especial, de eso no cabe duda, pero en su casa la atmósfera acompañaba. Su madre le suscribió a la revista Entrepeneur y la neoyorquina fue poco a poco empapándose con el espíritu emprendedor. El reto planteado por su madre aquella mañana sería sin duda una buena oportunidad para foguearse en este terreno.

Noa se dedicó a buscar cuidadoras para su propia familiay, tras un riguroso proceso de selección, encontró una que parecía hacer feliz a todos. Su madre no tardó en comentárselo a sus amigas y pronto comenzó a sonar el teléfono. El “oye, ¿tu hija me podría buscar una nanny?” se hizo tan habitual que en la familia pronto vieron que ahí podía haber negocio. Lo siguiente fue la web, confeccionada en los huecos al terminar los deberes, y a partir de ahí el proyecto se hizo enorme. No hay realmente un punto de inflexión, sino que el goteo de contrataciones fue haciéndose cada vez mayor y Nannies by Noa pasó el Rubicón de experimento a empresa de éxito.

“¿Pero tú no eres demasiado joven?”

Parte de azar, pero también de mérito: Nannies by Noa consiguió resolver la papeleta para muchas familias que no tenían manera de contrastar la seriedad de una babysitter a la que confiarían el cuidado de sus niños. Nuestra protagonista logró sistematizar el proceso de forma quecontaba ya con unas profesionales de confianza que a su vez encontraron una fuente de ingresos constante, y se olvidaron de poner anuncios en el periódico o internet.

Lo primero era contactar con las candidatas que debían enviar su currículum junto con una solicitud. Después llegaba la entrevista telefónica y también una labor de investigación en internet y redes sociales para conocer más detalles sobre la persona. Nadie era consciente de ello, pero todo este proceso lo hacía una cría de apenas trece años. “¿Pero tú no eres demasiadojoven?”, le llegaban a preguntar por teléfono. Daba igual. Ella zanjaba el asunto rápidamente: “Soy una empresaria y esto es una agencia”. A ver quién le discutía.

Con el paso del tiempo y acumulando cada vez más clientes, Noa fue perfeccionando el sistema. Al principio cobraba una cantidad fija por nanny que colocaba, pero alguien le asesoró que resultaría más rentable cobrar también una comisión, y aunque la adolescente ha guardado a buen recaudo las cifras, se estima que ésta es del 15% sobre el salario anual de la cuidadora.

El negocio crecía vertiginosamente y en pocos meses pasó de contar con 50 clientes a llegar a los casi 200, y eso que únicamente cubre el área metropolitana de Nueva York. La web seguía contando con el aspecto de haberse hecho en casa, pero la facturación crecía y con ella la dedicación necesaria para gestionar el negocio. Se le fue de las manosy llegó el momento de contratar un gerente.

Dicho y hecho, Nannies by Noa, comenzó a ser dirigida por Allison Johnson, una licenciada universitaria con postgrado que daba el empaque que le faltaba al negocio de cara a terceros.Eso sí, de puertas adentro, la estampa cotidiana se repite día a día: Noa vuelve de clase y con la mochila en la espalda, pide cuentas a Johnson sobre el funcionamiento del negocio.

¿Planes de futuro? Noa lo tiene claro: “De momento terminar el instituto y más adelante, quién sabe, igual creo otra empresa”.

“De acuerdo, si crees que puedes encontrar una cuidadora mejor, adelante”. La voz de la madre sonó desesperada. Noa, que por aquel entonces apenas sumaba 13primaveras, se tomó la amenaza como un interesante reto. ¿Por qué no buscar ella misma una nueva babysitter que la atendiera? En aquel intercambio de impresiones en la cocina se forjó lo que a día de hoy es todo un negocio.

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