Aquos Phone Zeta, un móvil adelantado a su tiempo

Sí, es muy posible que el grueso de los fabricantes en telefonía móvil se hayan embarcado en una guerra por ofrecer terminales cada vez más potentes, ecosistemas más completos y una experiencia de uso por momentos más satisfactoria. Pero algunos se empeñan en demostrar que todavía queda margen para la innovación en lo que respecta a los componentes, y cómo no, nos toca viajar a Japón para descubrirlo. 

La criatura que rompe moldes la ha fabricado Sharp, una casa que no vive precisamente sus mejores momentos, pero que ha querido lucir músculo con el innovador Aquos Phone Zeta SH-02E. No es el más bonito, ni siquiera el más potente, pero este dispositivo cuenta con un poderoso argumento que nos adelanta en el tiempo: es el primero en equipar una pantalla IGZO.

El fabricante japonés lleva tiempo investigando en el desarrollo de estas pantallas, que suponen la evolución lógica de las LCD convencionales. Esta tecnología permite la fabricación de paneles mucho más finos, pero sobre todo con una eficiencia en el consumo energético muy superior, lo que toca a uno de los aspectos críticos en los teléfonos móviles: la duración de la batería. Pero este tipo de pantallas ofrece además una resolución muy superior a los LCD convencionales, algo que Sharp no ha alcanzado a conseguir en este primer terminal, que se queda en unos discretos 300 píxeles por pulgada. Aún y todo, es el primer aviso de lo que puede llegar a corto plazo.

Características técnicasEste Aquos será comercializado por el momento únicamente en Japón y de la mano del operador NTT DoCoMo, y como apuntamos, sería el primero del mundo en equipar una pantalla IGZO. Siendo éste su principal elemento diferenciador, el equipo de los japoneses no se queda corto en el resto de las especificaciones: con sus 4,9 pulgadas se une a la moda de los megasmartphones compitiendo directamente en este terreno con los Galaxy Note 2 y S3 de Samsung, o HTC One X, equipando además una colosal cámara de 16 megapíxels, procesador de cuatro núcleos a 1,5 GHz, NFC y por supuesto, LTE.

Además del escaso impacto en la resolución de la primera pantalla IGZO que vemos en un móvil y que ha decepcionado a los primeros que han podido probar el equipo, sorprende descubrir que el equipo lleve la versión Ice Cream Sandwich de Android y no el codiciado Jelly Bean. 

Este terminal es además resistente al agua y al polvo y saldrá a la venta en diciembre, siendo en este momento una incógnita si Sharp planea un posterior lanzamiento internacional del equipo.