Un tercio de los muertos en Gaza son niños

Un millar. Mientras Egipto intensificaba sus esfuerzos para lograr una tregua, el número de muertos en la ofensiva israelí contra la Franja de Gaza ascendió ayer a 1.018. Un tercio de ellos son niños, según informa la BBC, que cita a fuentes médicas en la zona. El Centro Palestino para los Derechos Humanos, con sede en Gaza, añade que hay más de 670 civiles entre los fallecidos.Y, pese a las esperanzas que alberga la comunidad internacional tras la "respuesta positiva" que dió ayer Hamás a la propuesta egipcia para pactar un alto el fuego, la tregua parece improbable.

El movimiento integrista exige que Israel detenga sus ataques, retire sus tropas de Gaza y levante el implacable bloqueo que mantiene sobre el paupérrimo territorio. Tel Aviv, por su parte, dijo ayer que no aceptará una tregua temporal que sirva a Hamás para rearmarse y que los milicianos deben detener el lanzamiento de cohetes. Un enviado israelí se reunirá hoy con mediadores egipcios para estudiar su plan, que incluye la presencia de fuerzas internacionales en las fronteras de la Franja.   

Mientras, la guerra prosigue. El Ejército hebreo lanzó ayer 60 ataques aéreos contra la Franja, bombardeando túneles bajo la frontera con Egipto, que Hamás utiliza para proveerse de armas, y un cementerio en Ciudad de Gaza. Anoche, sus tropas mantenían intensos combates con milicianos palestinos en las afueras de la urbe, según gazadíes citados por la BBC. Los analistas señalan que Israel podría estar evitando una guerra urbana, porque causaría numerosas bajas en ambos bandos y entraña muchos riesgos políticos a menos de un mes de las elecciones. Además, Hamás lanza cada vez menos cohetes contra el sur de Israel. Ayer fueron 16, sin causar daños. 

No obstante, parece que la ofensiva ha provocado opiniones encontradas en el Gobierno israelí. El ministro de Defensa, Ehud Barak, ha propuesto una "tregua humanitaria" de una semana de duración en la Franja, pero el primer ministro, Ehud Olmert, está intentando prolongar lo máximo posible la operación militar 'Plomo fundido' por considerar que aún no ha conseguido sus objetivos, según informó ayer el diario israelí Haaretz.

Barak opina que la operación ha conseguido sus principales objetivos y que la continuidad de la ofensiva no va a generar más beneficios, sino, al contrario, puede causar complicaciones operativas y víctimas. Asimismo, coincide con la opinión del jefe del comando sur de Israel, el general Yoav Galant, según la cual la operación y ocupación de Gaza requeriría un despliegue de soldados duradero, posiblemente de hasta un año.

Ataques desde Líbano

Por otra parte, al menos tres cohetes Katyushas disparados desde el sur de Líbano impactaron ayer por la mañana en el norte de Israel sin causar heridos ni daños materiales, según informó Haaretz, que citó fuentes policiales. Ningún grupo reclamó la autoría de los ataques, a los que el Ejército hebreo respondió con disparos de su artillería.