Los March abandonarán Isofotón ante el aplazamiento de la salida a bolsa

Sólo un año después de comprar el 26% de Isofotón por 150 millones de euros, la familia March ha decidido deshacer su inversión. Desde hace varias semanas, después de que los principales responsables del fabricante de placas solares abandonaran o fueran relevados de sus cargos, el holding financiero Corporación Alba trabaja en el “proceso de salida” de la compañía, según han confirmado a este diario fuentes próximas a la operación.

Consultados por este diario, desde Corporación Alba afirman que son accionistas de Isofotón y que actuarán como tales en defensa de los intereses de su inversión. Ninguna explicación más. Aún así, fuentes jurídicas apuntan que grupo Bergé, con quien la familia March tiene intereses en otros sectores, resolverá la desinversión de su socio a lo largo del próximo año recomprando la participación del 26% que le vendió hace un año vía ampliación de capital.

La decisión de los March obedece a distintos motivos, aunque tiene que ver con el cambio de expectativas sobre el negocio del grupo a corto plazo. Según las fuentes consultadas, “las condiciones del mercado han variado, la salida a bolsa prevista se ha aplazado”, de manera que el perfil de la inversión ha cambiado. “La salida está en estos momentos en marcha, aunque todavía no ha cambiado nada, Alba es aún accionista de Isofotón”.

De acuerdo con las cláusulas existentes, la familia March tiene la posibilidad de deshacer su inversión si en el plazo de dos años Isofotón no sale a bolsa. Así las cosas, transcurrido ya un año y ante la actual coyuntura del mercado, en cuanto el nuevo consejo de administración del fabricante de placas solares –al que se incorporará en breve su nuevo primer ejecutivo- confirme el aplazamiento de su salida, el proceso de desinversión se llevará a cabo.

El pasado lunes 30 de junio tuvo lugar la junta general de accionistas del Grupo Bergé, propietario del 64% de Isofotón y único accionista -hasta la entrada de los March- desde 1997, cuando compraron la compañía a la Junta de Andalucía. En el acto, el consejero delegado del grupo, Fernando D´Ornellas, dio explicaciones sobre la situación de su participada, que en la actualidad está sujeta a un proceso de auditoría interna llevado a cabo por Deloitte.

Los resultados de esta auditoría estarán listos para finales del mes de julio y supondrán un nuevo punto de partida para el nuevo consejero delegado, el ejecutivo vasco Ignacio de Colmenares, procedente de la siderúrgica catalana Celsa. Con su llegada, recomendada precisamente por los March, el plan estratégico de Isofotón adquiere un perfil puramente industrial, con un mandato completamente distinto al que había para salir a bolsa.

El pasado mes de mayo, sólo tres meses después de su llegada como presidente, Carlos Torres, ex director general de Endesa, el hombre por el que apostó el grupo Bergé, abandonó el cargo. De un perfil más financiero, su marcha tenía que ver con el aplazamiento de la salida a bolsa de Isofotón, tarea fundamental para la que fue contratado y con la que estaba vinculada su retribución. Sin embargo, el cambio de planes precipitó la catarsis, primero en la dirección y, en breve, en el accionariado.