Los mercados logran su objetivo: Alemania claudica al crecimiento antes de la Cumbre

Ahora sí que sí. Ha llegado la semana en mayúsculas para los mercados. Entre el jueves y el viernes se tiene que decidir el futuro de la Unión Europea tras días de declaraciones, desmentidos, especulaciones, encuentros bi, tri o cuadriterales y una reunión de los líderes de las 20 mayores economías del mundo. Amén de unas elecciones griegas que estaban llamadas a convertirse en un cataclismo para Europa.

Si los mercados europeos ignoraron completamente las conclusiones de la reunión que mantuvieron el viernes la canciller alemana, Angela Merkel, el galo Françoise Hollande, el italiano Mario Monti y el español, Mariano Rajoy, donde realmente Alemania se vio obligada a cambiar definitivamente el discurso, los analistas esperan que el lunes los mercados arranquen la semana con buen tono.

"Los mercados serán previsiblemente más positivos porque han logrado lo que venían buscando, que era que Alemania flexibilizara su postura", asegura Victoria Torres, de Selftrade a Cotizalia.com. "Se va a destinar una parte importante del PIB al crecimiento y ya no es todo austeridad como exigía Merkel", ha asegurado.

Así, en la rueda de prensa posterior a la reunión, los cuatro mandatarios han confirmado su intención de poner sobre la mesa en Bruselas destinar el 1% del PIB de la eurozona, unos 130.000 millones de euros, al crecimiento. De esta manera, la postura de Hollande, el último en llegar, marca la agenda de Bruselas donde también se espera que se acuerde una unión bancaria, quizá una unión fiscal que permita empezar a hablar de eurobonos, y más unión política, como han adelantado desde Roma.

Con todo, mientras que las bolsas europeas se mostraban indiferentes, la española subía en solitario, un 1,5%, gracias a los bancos medianos. A pesar de que entre las palabras mágicas de los analistas sobre el resultado de las auditorías al sector se encuentran: decepción, insuficiente, incertidumbre... no obstante, lo que parecía que iba a ser un castigo para los bancos se ha convertido una fiesta. Y el lunes, el ministro de Economía, Luis de Guindos, pedirá finalmente la recapitalización a Bruselas de manera oficial.

A parte de esto, no se puede perder del radar esta semana al Banco Central Europeo. Ya el viernes dio la primera señal de querer tomar cartas en el asunto para rebajar la presión sobre los mercados de deuda anunciando la flexibilización de las garantías en sus operaciones de préstamo, así como aceptar activos de menor calidad a cambio de efectivo. Esto ha sido interpretado por los mercados como una puerta abierta a una intervención en toda regla.

La prima de riesgo española cayó a su nivel más bajo en dos semanas. Tras superar los 570 puntos básicos el lunes cerró en los 480 puntos básicos. No en vano, fuentes del mercado han venido defendiendo que la institución que preside Mario Draghi podría comprar bonos de España e Italia en la antesala de la Cumbre. Una acción que se lleva esperando desde hace quince semanas sin entrar en el secundario para adquirir deuda.