Feliciano López: "La del viernes es la peor derrota de mi carrera"

"La de las semifinales fue la derrota más dura de mi carrera profesional. Fue un palo", comentaba Feliciano López tras caer derrotado ante Benneteau y Gasquet y quedarse sin medalla olímpica cuando prácticamente la tocaron en la tarde del viernes en su partido ante Llodrá y Tsonga, derrota a la que hace referencia el tenista español. "Esto ha sido muy cruel. Tuvimos cuatro ocasiones para llevarnos la medalla y tras perderlos hemos llegado a este partido muy 'tocados'. El deporte es cruel y más cuando juegas por tu país".

 

Feliciano justifica el motivo por el que considera que fue más dolorosa la derrota ante Tsonga y Llodrá que la de ayer. "Hemos ganado partidos y estuvimos a una bola de la gloria de una final olímpica y ahora nos vamos como si hubiéramos perdido el primer día ante los polacos. Lo tuvimos tan cerca... No podía dormir, pero al jugar tan pronto no quería tomar nada para no salir demasiado relajado. No hemos sabido reponernos del palo de la derrota del viernes. Ellos han sabido jugar, porque al enfrentarse a los Bryan en semifinales, pensaron más en este partido que en la posibilidad de jugar la final".

 

Lo cierto es que la pareja Ferrer-López era la última esperanza del tenis español para seguir recopilando medallas. Una pista poco favorable, la lesión de Nadal y algunas derrotas inesperadas dejan huérfano al deporte de la raqueta. "Uno tiene que intentar mirar las cosas de manera más general. Aquí se lucha por ganar, nosotros también, te ganan, de una manera muy cruel, pero bueno. No hemos sabido aprovechar este momento y es una pena, porque a pesar de haberlo luchado, no hemos estado al mismo nivel que los otros días", señala el tenista toledano.

"No hemos sabido gestionar bien los momentos claves. Creo que nos ha pesado mucho la derrota del viernes. Aquí se viene a por medalla y quedar cuarto o eliminado el primer día es lo mismo. No pienso si serán mis últimos Juegos o no. Aquí he llegado con 30 años y en plenitud. Veremos qué sucede. Han sido dos semanas estupendas, con el equipo y me da mucha pena de que el tenis no haya sido capaz de conseguir medalla alguna", confiesa un David Ferrer menos hundido que un López que su rostro denotaba la tristeza que arrastraba.