El Jeque ya no pone más dinero y el Málaga reduce a la mitad su presupuesto

Ingeniería financiera. Eso es lo que están haciendo los actuales dirigentes del Málaga con tal de devolver al club andaluz a la realidad económica. Vicente Casado, director general del equipo que está compitiendo y arrasando en la Champions, se ha desplazado hasta Qatar para conocer con exactitud el sitio que ocupará el Málaga a partir de ahora. La noticia que ha recibido el que llegara al club como responsable de márketing es que la aportación económica procedente de Doha ha terminado, que a partir de ahora debe ser el club el que genere y gestione el dinero que produzca por sus propios recursos. La primera medida será la de reducir el presupuesto de forma drástica. Los 150 millones de euros de la pasada campaña son historia. Sin cerrar los números todavía, las primeras estimaciones hablan de reducir a la mitad el presupuesto, tal y como informó As. El tope marcado es el de 75 millones de euros, cantidad que los dirigentes creen que pueden obtener a través de taquillas, derechos de televisión.

Abdullah Bin Nasser Al-Thani, que compró el club a Fernando Sanz y al que todavía adeuda 3,8 millones de euros, no piensa poner más dinero para la gestión del club y así se lo ha confirmado a Casado. Continuará controlando el club con los diferentes enviados que manda a la capital andaluza, pero lo que ya parece fuera de duda es que el dinero se ha terminado. El objetivo de los actuales dirigentes de la entidad es la de evitar la venta de más jugadores como podrían ser Isco o Monreal,ya que Pellegrini insiste en mantener la actual estructura de la plantilla como premisa fundamental para continuar al frente del equipo. El grupo está demostrando una lealtad fuera de toda duda y está siendo capaz, pese a la dificultades que están atravesando, de llevar al Málaga a triunfar en la Champions y a hacer un gran papel en la Liga.

Las próximas semanas serán decisivas en el futuro del club. La entidad tiene que hacer frente al compromiso adquirido el pasado mes de agosto de pagar el 70% de las deudas que mantenía con la plantilla, así como diversos pagos a agentes y otros clubes. Además, debe pasar el examen de UEFA y que por el momento mantiene retenido el dinero que por méritos deportivos el club ha ganado sobre el terreno de juego logrando su pase a la fase de grupos de la Champions. Hasta el momento el Málaga ya ha obtenido cerca de 20 millones de euros por su participación europea, dinero que por el momento no ha llegado a La Rosaleda.

Los jugadores y el técnico se están manteniendo al margen de todas las gestiones que mantienen Casado y su equipo. La confianza en los actuales dirigentes es máxima, algo que no sucede con el jeque y su equipo de trabajo. La fuente parece haberse agotado, al menos en eso de poner millones sin más. La gestión es la que volverá a presidir los pasos del Málaga. La primera decisión, dejar atrás el sueño de ser el tercer equipo de la Liga en cuanto al presupuesto.