Emma García, la reina del fin de semana: "Estoy en mi mejor momento. No tengo intención de moverme de Telecinco"

Cinco años después de aterrizar en las tardes del sábado y del domingo de Telecinco con Viva la vida, Emma García se ha convertido por derecho propio en la reina del fin de semana de la mano de Fiesta: la presentadora vasca ha logrado no solo asentarse en una de las franjas más complicadas de la televisión (que se lo digan a Alfonso Arús, Toñi Moreno, Boris Izaguirre o Nuria Roca, quienes han pinchado con Aruseros Weekend, Plan de tarde, Más vale sábado o La Roca, respectivamente), sino erigirse como la oferta líder ante productos tan consolidados entre el público como el Multicine de Antena 3 o Cine de barrio de TVE.

"Estoy en mi mejor momento", valora la propia Emma en declaraciones exclusivas para EL CONFI TV, una opinión compartida por los profesionales del sector, ya que acaba de ser reconocida con el premio Antena de Oro por su labor periodística. Pese a ello, y a que se encuentra cada día más cómoda en Fiesta, donde acaban de celebrar su primer aniversario en Telecinco, García no se conforma: "Somos el magacín más visto, pero en esta profesión siempre podemos superarnos en todos los aspectos, y en ese camino creo que estamos. Estudio la curva de audiencia con mi directora para intentar dar siempre con la tecla. No podemos relajarnos".

En un período tan convulso para Mediaset España, envuelta en un cambio de ciclo, Emma García puede presumir de gozar de una posición inamovible que se ha ido ganando a pulso durante los últimos 21 años: no solo ha capitaneado espacios tan míticos como A tu lado, Mujeres y hombres y viceversa o El juego de tu vida, sino que lo ha hecho sin que su, en ocasiones, mala prensa le haya salpicado. "Yo me he adaptado a todos los cambios y a todas las etapas, porque han pasado muchas cosas desde que llegué, pero estoy agradecida y feliz de que la nueva directiva me haya mantenido y cuente conmigo", sostiene la comunicadora.

"No volvería a presentar 'El juego de tu vida'. Llegué a cansarme del programa"

Ese respaldo viene, en gran medida, porque su imagen siempre ha sido muy positiva entre el gran público, gracias a su carácter cercano, su versatilidad, su franqueza y, sobre todo, a no perder nunca la sonrisa, esa con la que llena la pantalla y que se ha convertido en su seña de identidad. "Recibo mucho cariño por la calle", reconoce con humildad, apuntando que muchos espectadores le destacan su eterna paciencia, aunque, como es obvio, también recibe "algunas críticas, pero siempre desde el respeto", ese que se ha ganado a pulso con su saber estar, incluso en las tardes más complicadas.

¿Y con qué sueña para el futuro inmediato? De momento, Emma apuesta por seguir creciendo junto al equipo de Fiesta, tratando de sacar el máximo jugo a las 10 horas de directo cada fin de semana, aunque sin cerrar la puerta a grandes formatos: "Virgencita, que me quede como estoy, aunque abierta a propuestas", apunta, satisfecha con lo logrado, pero dispuesta a no dejar de trabajar para seguir creciendo, dentro y fuera del magacín. ¿Presentar Supervivientes, quizás? Su respuesta, a continuación.

PREGUNTA. Cumplido el primer año al frente de Fiesta cada fin de semana en Telecinco. ¿Qué balance haces de la apuesta?

RESPUESTA. El balance es maravilloso. Llevamos un año en continua fiesta, como el propio nombre del programa, con muy buen ambiente, muy buen rollo y, lo más importante, con muchas ganas de disfrutar y trabajar cada fin de semana para llegar al espectador de la mejor manera posible. Estamos empezando, como quien dice, porque este año se nos ha pasado volando. Muy contentos y con muchas ganas de seguir dando mucha guerra.

P. En el terreno de las audiencias, el programa suele ser líder en el cómputo global, aunque depende mucho de la fluctuación que experimente el Multicine de Antena 3. ¿Estás satisfecha con los resultados obtenidos?

R. Nunca estoy contenta con las audiencias, siempre quiero más, porque sé que se puede más y nunca nos podemos relajar. Sé que hay una muy buena base. Somos el magacín más visto, estamos por encima de la cadena y bien de espectadores, pero siempre podemos y debemos estar muchísimo mejor. Esto lo pienso y yo y mi directora, Eva Espejo, con la que hablo mucho sobre esto. En esta profesión siempre podemos superarnos en todos los aspectos, y en ese camino creo que estamos.

P. ¿Eres de las que se obsesiona con el dato de audiencia cada mañana?

R. Es verdad que tuve mis momentos de obsesión, y no es algo que ayude realmente, tensa y bloquea. Por supuesto que me gusta ver las audiencias cada mañana, pero no me obsesiona ni estoy ansiosa con ello, pero sí que estoy pendiente y lo analizo mucho con la dirección para tratar de mejorar el dato, subir la curva y congregar a más espectadores. Estamos muy activos en ese sentido.

P. Parece que, con un año de bagaje, atináis más con los contenidos que funcionan, colaboradores y secciones. ¿Es esa también tu impresión de la evolución del programa?

R. ¿Sabes qué pasa? Que lo que funciona un día, a lo mejor, el fin de semana siguiente ya no. Al final, como tenemos cinco horas, dependemos mucho de toda la competencia que tenemos enfrente. El fin de semana es diferente porque hay fútbol y otras muchas cosas, el público se mueve mucho. Hay sábados y domingos que el programa no tiene mucho que ver, que parecen dos espacios diferentes, pero por eso estudiamos la curva para intentar dar siempre con la tecla. Esto es así, no puedes relajarte, afortunadamente, en esta profesión.

P. En cinco horas cada tarde caben muchas cosas. Tenéis tertulia sobre reality shows, actualidad, crónica negra, entrevistas a actores y cantantes, virales de internet... ¿Hay alguna parte que disfrutes más?

R. Me encantan las entrevistas. En cinco horas creo que podemos hacer más entrevistas, y se lo digo desde aquí a la directora, porque parece que es algo para lo que siempre nos falta tiempo. Pero es verdad que lo bueno de un directo de cinco horas es ir cambiando de un tema a otro, muy diversos todos ellos, cambiando de estados de ánimo un poco también. Eso es lo más positivo, lo que te hace estar ahí como primera opción entre el público.

Me gustan las entrevistas porque cada vez que entrevistas, aprendes. Me encanta escuchar. Hay gente con mucho bagaje profesional, pero también los que acaban de salir de un reality show. Yo aprendo de todo el mundo, y a ubicarme también en ese momento. Buscas que cualquiera de ellos te responda a todo lo que tú quieres, por supuesto, desde el respeto absoluto y del cariño.

En cualquier caso, me siento muy cómoda en todas las facetas porque cada programa es distinto. A mí eso me carga las pilas, me pone enfrentarme a temas tan variadísimos, desde los que están planteados en la escaleta hasta los que van surgiendo a lo largo de la tarde.

P. Últimamente parece que te mojas más, que estás más implicada en las tertulias. ¿Estás más cómoda tras cinco años en el fin de semana de Telecinco?

R. Creo que siempre he sido así, pero es verdad que creo que estoy en mi mejor momento. Cuando el ambiente es bueno, suelo decir lo que pienso, siempre sin herir a nadie. En cinco horas tienes que ser tú, el programa te lo pide, pero hay veces en que te mojas más que otras, sobre todo cuando te has empapado de toda la información. Si el personaje me gusta y estoy con él, lo digo, pero si no es así, prefiero no decirlo. ¿Para qué?

P. Precisamente de un tiempo a esta parte se buscaba más eso, un presentador que se posicione y no sea un busto parlante, aunque no sé si eso ha cambiado en la nueva Telecinco.

R. Es imposible ser un busto parlante en un magacín en directo de tantas horas. Al final tienes que ser tú. A mí también me pasa mucho que, aunque no hable, se me nota mucho en la cara lo que pienso. De todos modos, creo que es muy positivo para el programa estar implicado de todas las maneras. Unas veces más, porque te apetece, el tema te llega o te arrastra y sientes esas ganas, y otras veces menos, porque no te dejan hablar, que esa es otra de las cosas que tenemos por culpa de la pasión y las ganas de los colaboradores de dar su opinión.

"No tengo intención de moverme de Telecinco"

P. El hecho de mojarse puede granjearte simpatías entre el público, pero también lo contrario. ¿Cómo es el feedback que recibes en la calle?

R. Recibo críticas y mucho cariño también. Quizá una de las cosas que más me dicen es que tengo muchísima paciencia, pero desde hace muchísimos años. Al final está bien que te digan lo bueno y lo menos bueno. Es lógico que la gente tenga una opinión, que puede gustarle cómo nos hemos posicionado o al contrario, pero para eso estamos. Me parece bien que la gente nos critique, siempre que lo haga desde el respeto.

También es verdad que yo soy la primera crítica y que, además, tengo a mi madre que es la primera que me da su opinión con toda la sinceridad. No te preocupes que en la calle no me suelo encontrar más críticos que en casa. Pero, en general, recibo mucho cariño en la calle y si hay críticas siempre son con muchísima educación, que es lo que hace falta.

P. En la nueva temporada los colaboradores se han revalorizado, con importantes fichajes entre cadenas y programas. ¿Cómo ves la situación del "mercado de fichajes"?

R. Esto es muy positivo para los colaboradores, porque se valora más que nunca su trabajo. Esto siempre ha existido, pero ahora con los últimos cambios mucho más. Es normal que la gente cambie de programa o cadena, porque la vida son ciclos y etapas, mucho más en televisión. Pero yo no tengo intención de moverme, por cierto (risas).

P. Una de tus colaboradoras estrella es Alejandra Rubio, a quien has visto crecer mediáticamente durante los últimos años. ¿Cómo valoras su evolución?

R. Alejandra está mejorando mucho. Ha ido superándose poquito a poquito, pero yo la veo especialmente suelta, pese a todo lo que tiene encima ahora. Está cada vez más abierta. Se tensa todavía mucho, pero yo, como la conozco bien, intento relajarla y mirarle a los ojos para que vea que estoy ahí. También luego le digo todo, cuando me pide mi opinión. Se deja asesorar y, sobre todo, escucha, que esto es muy importante. A mí Alejandra me parece la mejor de las Campos, aunque todas son muy diferentes.

P. Hablando de colaboradores, muchas veces se critica que puedan hablar de cualquier tema, incluso sin formación. ¿Qué piensas de los denominados "todólogos"?

R. Para hablar de un tema, lógicamente, tienes que haber leído un poco y estar al tanto de todos los asuntos. Como todo en esta vida, si vas a hablar de algo, prepárate, y, si no lo sabes, cállate. Prepararse es lo más importante. Es cierto que muchas veces vemos a personas hablar de ciertos temas, dando opiniones, y esa me parece un poco la clave, siempre que sea opinar y no dar datos, pero sí que es verdad que hay que tener mucho cuidado, y más en este momento.

P. En esta última etapa se han vetado en Telecinco a los colaboradores de Sálvame, fuente de mucho contenido en Fiesta, como es el caso de Kiko Matamoros o Belén Esteban. ¿Crees que os ha perjudicado?

R. Como es un cambio, es un nuevo ciclo y hay entusiasmo por sacar esta etapa adelante, tampoco procuro mirar mucho al pasado. Ojalá pudiésemos hablar de todo el mundo y en todo momento, pero hay suficientes temas sobre los que hablar. Echo mucho de menos a mis compañeros de Sálvame, por el trato que teníamos. Les deseo lo mejor, con mucho cariño, pero al final una se adapta a los nuevos cambios, encantada de seguir estando ahí.

P. ¿Cómo ves tu posición dentro de la nueva Mediaset?

R. Tampoco ha cambiado mucho mi situación. Yo me he adaptado a todos los cambios y a todas las etapas, porque llegué a Telecinco en 2002 y han pasado muchas cosas desde entonces. He pasado por muchos programas. Lo que decía antes, creo que estoy en un momento buenísimo a nivel personal y profesional, tratando muchísimos temas en cinco horas de directo, rodeada además de un equipo que tiene la misma pasión que yo por el programa. Estoy agradecida y feliz de que la nueva directiva me haya mantenido y cuente conmigo, que siempre es de agradecer. No tengo intención de moverme.

P. ¿Eres de las que piensa "virgencita, que me quede como estoy" o de las que quiere nuevas oportunidades, asumir otros retos?

R. Comparto las dos cosas. Que me quede como estoy y mientras esté aquí doy lo mejor de mí y trato de mejorar cada fin de semana, pero siempre estoy abierta a nuevos proyectos. Yo soy una curranta de la tele, y en este caso de Mediaset, y todo lo que pueda venir me sacará de mi zona de confort, me hará vibrar y ponerme las pilas. De momento, estoy muy feliz en el fin de semana, con el equipo de Fiesta, muy bien organizada a nivel familiar, que es una de las cosas más complicadas cuando tienes que cambiar de horarios. Así que, que me quede como estoy, pero siempre con la puerta abierta a aprender y disfrutar.

"Estoy peleando con mi directora para retomar los testimonios"

P. Y si de ti dependiera, ¿qué reto te gustaría afrontar?

R. Este magacín abarca casi todos los géneros realmente, así que mi puerta está abierta al cambio, pero poco, porque aquí toco casi todos los palos. Sí que es verdad que me gustaría tocar más los testimonios, sorpresas, tratar con la gente, sacar las emociones, y además creo que la gente tiene la necesidad de sacar sus emociones fuera y a mí me encantaría escucharlas.

Hablo todos los días con mi directora, intentando buscar diferentes cosas y secciones. No le pido realmente nada, pero sí que analizamos todo y vamos buscando asuntos, como el tema de los testimonios que te decía. Eso y otras cosas en las que estamos trabajando y que espero que podamos sacar adelante en los próximos meses. Es complicado, estamos continuamente buscando cosas porque tenemos cinco horas por delante cada tarde y hay mucho sobre lo que hablar e informar, pero siempre estamos trabajando en cosas que nos hagan mejorar.

P. En esa línea empezó A tu lado, ¿hablamos de un talk show puro?

R. Esa es una parte que estoy peleando para retomarla, pero es verdad que es complicado. No sé si del mismo modo que en A tu lado, que empezamos así pero, pronto cambió a un magacín más tradicional. Pero sí que es verdad que esta sociedad está tan revuelta que es muy bueno escuchar. Yo siempre escucho para aprender, y es algo que me llevo a mi trabajo, de alguna manera. Así que sí, bienvenido sea un apartado así en el programa, y me da igual que sea tanto con anónimos como con famosos, porque tienen historias que compartir. A veces la cuentan y otras veces no, y al final siempre nos muestran otras perspectivas de la vida.

P. Hablando de A tu lado, otro de los espacios más míticos de tu carrera es Mujeres y hombres y viceversa, un dating show tan seguido como polémico. Pese a todo, tú siempre pareciste disfrutarlo mucho. ¿Es así o te afectaban las críticas constantes al formato?

R. Amado y criticado, como suele pasar en estos casos. Yo no permanecía ajena a las críticas, que me parecían normales, ya que no se le puede gustar a todo el mundo. En general, es un formato que me ha dado muchísimas alegrías durante 10 años de vida. Cada vez que me encuentro con alguno de mis chicos y chicas me hace mucha ilusión. Disfruté mucho de esos años, de compartir experiencia con gente muy joven que estaba enfrentándose a ciertas situaciones por primera vez, viviendo las cosas con mucha frescura, aunque quizá se veían superficiales. La verdad que fue muy bonito.

P. Era además una cantera para Mediaset, nutriendo de participantes a muchos de sus programas, un hueco que ahora parecen cubrir los influencers.

R. Eso es verdad, quizá debería de volver. Hay mucha gente que lo pide y lo echa en falta, que han vivido esos 10 años con nosotros. Creo que era un programa alegre, aunque con sus momentos. Te llevaba a la emoción y el entretenimiento a partir de jóvenes de 18 o 20 años. Han salido mucha gente de ahí que sigue trabajando, que ha hecho su carrera en el medio, como puede ser Violeta, que ahora es una gran influencer, por poner un ejemplo.

P. Durante las últimas temporadas no lo presentaste tú, ¿sería un espacio que te gustaría retomar en caso de que regresase?

R. Si me dan a elegir, me quedo con Fiesta, no lo cambio, pero es verdad que Mujeres y hombres y viceversa es un formato atemporal y creo que puede seguir funcionando.

P. Otro formato icónico de tu curriculum es El juego de tu vida. ¿Dirías sí a ese regreso?

R. Ese no lo volvería a hacer. Desarrollé tal psicología que no lo volvería a hacer. Yo llegaba sin saber las respuestas, lógicamente, quería llegar como el concursante, y al final cuando veía cómo reaccionaban a mi pregunta sabía si era verdad o mentira. Llegaba un momento que no daba más de mí, lo sabía y lo veía todo. No me asombraba a mí, entonces creía que al espectador tampoco. Llegué a cansarme un poquito al final del programa.

Era un programa complicado, la verdad. Ya te digo que yo, si vuelve, no lo volvería a presentar. No apuesto por él. Aprendí mucho de psicología, pero terminó aburriéndome mucho, aunque sí que es verdad que era cañero. Pasábamos situaciones difíciles a veces.

P. Pese a que el reality show es el formato estrella de Mediaset durante los últimos 20 años, pocos han sido tus coqueteos con el género. ¿Es un tipo de programa que no te llama especialmente o es que no han pensado en ti para ello?

R. Presenté dos o tres debates de Supervivientes, pero sí que es verdad que creo que no se ha dado el caso. En todos estos años es verdad que no he parado, no he tenido un parón. Hubo una época además que compaginaba otros proyectos con Mujeres y hombres y viceversa, así que creo que ha sido más bien por falta de tiempo y porque otras personas estaban ahí sin tener programas. Creo que la razón ha ido más bien un poco por ahí.

P. Los rostros de los grandes reality shows de Telecinco están cambiando y Supervivientes todavía no tiene presentadores. ¿Te gustaría dar ese salto?

R. A mí me encanta Supervivientes como espectadora, pero yo, como estoy tan centrada en Fiesta, lo veo complicado. Para compaginar esas diez horas de directo en el fin de semana con otra cosa hay que estar muy en forma. Yo si me llaman, fenomenal, pero tampoco es algo que yo tenga en la cabeza. Es que estoy muy a gusto en el fin de semana, pudiendo compaginar mi vida personal con la profesional. Estoy abierta a todo, pero centrada en Fiesta, esto que quede claro.