"¡Qué ojo tenéis!": curiosa coincidencia en 'First Dates' entre dos fogosos comensales

María de las Montañas, Monty, ha desembarcado este miércoles, 6 de septiembre, en First Dates para encontrar a un chico que le haga olvidar sus anteriores fracasos amorosos: "Mis parejas han sido bastante duraderas, pero al final se han acabado. Ellos eran muy celosos y yo muy sociable". Desde luego, su cita, Juan, no podía ser más lo segundo.

Y es que, encima, los concursantes del programa de Cuatro ya se conocían, tal y como ha explicado la joven de 27 años a Laura Boado, antes de que el chico entrase en el restaurante: "Me ha pasado una cosa muy fuerte, Laura. Yo venía en el tren y he visto a un chico muy guapo. Se me ha quedado mirando y yo a él también".

Juan: "Aunque esté trabajando, me gusta guardar fuerza para la noche, para cumplir como hombre"

Al parecer, han entablado conversación y han descubierto que los dos se dirigían al mismo lugar, al dating show de Mediaset España. La camarera de piso ha alucinado cuando ha visto que, en efecto, se trataba de su "flechazo del tren": "¡Hola! ¿Qué haces? Mi flechazo del tren. ¡Qué ojo habéis tenido!". Ya durante la cena, los participantes han indagado en sus aficiones, bastante similares entre sí.

"Lo que sea salir de mi ciudad e ir a sitios nuevos, con gente nueva, me encanta. Vamos un río, a una playa. Cualquier cosa", ha asegurado el chófer, y su compañera no ha ocultado su fascinación: "Me encanta que una persona tenga iniciativa". En el transcurso de la velada, Juan ha ido con todo, sin escatimar en piropos: "Tengo el corazón acelerado. No sé si es por el sitio o por la belleza que tengo delante".

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"A mí me imponen esos ojos azules. Me pierdo en ellos como en el mar", ha comentado la otra comensal. La temperatura de la conversación iba subiendo y ninguno de ellos hacía nada por evitarlo. "¿Eres muy pasional? Yo lo soy, cuando conozco a un chico, el 80% es sexo", ha dejado claro la de Marbella. "Aunque esté trabajando, me gusta guardar un poquito de fuerza para la noche, para cumplir como hombre", le ha soltado él. Un comentario que a ella le ha convencido de lleno: "Ahí tengo a mi machito alfa, a mi hombre".

Lo que pasaría en los juegos del postre estaba más que cantado. A Juan el papelito le pedía que diese a su cita un beso que no pudiese olvidar; a Monty, un beso largo. Pues dicho y hecho. Él no ha dudado ni un segundo, lanzándose a besar apasionadamente a la hostelera: "Y, si lo olvidas, lo repetimos. Lo vas memorizando". Por supuesto, habría segunda cita y continuaría justo después de la primera.