"¡Cómo me haces esto!": los jueces de 'MasterChef' reciben a sus famosos a tartazos

La tercera entrega del navideño MasterChef se la ha jugado a sus famosos nada más entrar en cocinas. Los aspirantes han tenido que ponerse hasta las cejas de merengue como parte obligatoria a seguir antes de la prueba de exteriores.

Ataviados con sus mejores galas después de la fiesta de Nochevieja, las celebridades que participan en esta ocasión extraordinaria del formato de Shine Iberia se han encontrado con una mesa repleta de siete enormes tartas. "Siete tartas para siete amigos", han titulado la prueba en la que han tenido que escoger al azar delante de la que ponerse.

Flo: "La prueba me parece un poquito, un puñal por la espalda, pero esto es 'MasterChef"

"Aparentemente, las siete tartas parecen iguales, pero aquí nada es lo que parece", les advirtió Pepe Rodríguez antes de ordenarles que debía comerse las tartas sin poder utilizar en ningún momento las manos, hasta descubrir el corazón de las mismas. "¡Dios mío! Con toda esa azúcar", "¡Pepe, cómo me haces esto!", "¡Me ahogo!", chillaban y se quejaban algunos de ellos antes de proceder al autotartazo.

Sin embargo, nadie entendía el fin de esta actividad, hasta que Mario Vaquerizo observó que algunos tenían manchada la cara de rojo y otros de azul: "¡Lo acabo de ver! Es lo del equipo rojo y el equipo azul". Efectivamente, ha sido la manera en la que los jueces del programa de TVE han elegido a los miembros de cada grupo de trabajo.

En el caso de Terremoto, por mucho que hurgaba, no había color alguno entre el merengue, porque solo tenía el blanco en toda su cara. Es decir, la artista tuvo que afrontar el trabajo de doble capitán, tanto del equipo rojo, formado por Cayetana Guillén-Cuervo, Mario Vaquerizo y Anabel Alonso, como el del azul, compuesto por Carmina Barrios, Boris Izaguirre y Florentino Fernández.

TE PUEDE INTERESAR

"Se ha dado un corte serio": Anabel Alonso, obligada a salir corriendo de 'MasterChef'

Álvaro Roldán

"La prueba me parece un poquito, un puñal por la espalda, pero esto es MasterChef, y qué mejor que hacerlo con merengue suizo", protestó Flo, en tono de humor, con toda la cara y las gafas totalmente empapadas en merengue y después de chuparlo para adivinar, según él, la procedencia del merengue.