Verónica, abochornada en 'MasterChef': tiene que salir a pedir perdón por no sacar un plato

Ni los chefs ni los compañeros de grupo de cocinas han estado contentos con el trabajo de Verónica en la prueba por equipos de 'MasterChef'. La actitud de la joven ante los fogones se saldó con tener que anular un plato principal y retrasar el servicio, además de tener que dar explicaciones ante los comensales invitados en exteriores.

Pensó que tenía las recetas bajo control, pero nada más lejos de la realidad. Vero hacía caso omiso a las recomendaciones del cocinero con Tres Soles Repsol, las de sus propios compañeros y hasta las de Pepe Rodríguez, que estaba al cargo de este grupo. "No se daban las órdenes correctas, no se ha trabajado bien", resumía el cocinero al término de la prueba.

Pepe: "No vas a evolucionar en la vida, porque vas a creer que lo sabes todo"

Antes de romper a llorar por el rapapolvo de Pepe, y de tener que ir junto a sus compañeros de equipo a la prueba de eliminación, la aspirante tuvo que salir al salón para disculparse ante los invitados, ya que uno de los platos más esperados de la velada tuvo que ser cancelado por no reunir los requisitos básicos para salir a las mesas. "Un resultado penoso", llegó a sentenciar Pepe.

"Pocas decisiones pueden doler más que esta, pero no me queda más remedio y nos quedamos sin plato. A eso le queda más de media hora y no podemos servirlo, por lo cual, se ha terminado la prueba", les comunicaba el cocinero encargado de este equipo, ya que la elaboración del Wellington tuvo que quedarse en cocinas.

Sin embargo, el bochorno de Verónica sí lo paseó en el salón con los comensales. "Lamentablemente, el Tuna Wellington, elaborado por el equipo azul, no va a poder salir", informaba Samantha Vallejo Nágera a los invitados catadores de este reto. "Soy Verónica, capitana del equipo azul, y venía a pediros disculpas. El servicio no ha salido como esperábamos, me gustaría no estar aquí ahora mismo y estar sirviéndolo, pero no va a poder ser. Espero que podáis disfrutar al menos del resto de elaboraciones", les dijo.

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Á. Roldán

El veredicto final, como era de esperar, fue muy negativo, sobre todo para la capitana. "A mí que me sigue costando con 30 años de oficio, y llegas tú y me dices: '¡Sí, lo tenía controlado!", le afeó, por no reconocer que no tenía clara la receta de los reputados platos a elaborar. "Quiero que aprendas, pero si no detectas los errores no vas a evolucionar en la vida, porque vas a creer que lo sabes todo", remató el chef haciéndola llorar por no estar de acuerdo con esta valoración.