Es noticia
La demanda de turismo rural baja en España por primera vez en la historia
  1. Mercados
  2. Fondos de inversión
LA OFERTA CRECIÓ UN 10% EN 2008

La demanda de turismo rural baja en España por primera vez en la historia

En 2008 el número de pernoctaciones en alojamientos de turismo rural en España bajó un 2,3%. Es la primera vez en la historia que el sector

Foto: La demanda de turismo rural baja en España por primera vez en la historia
La demanda de turismo rural baja en España por primera vez en la historia

En 2008 el número de pernoctaciones en alojamientos de turismo rural en España bajó un 2,3%. Es la primera vez en la historia que el sector vive un descenso de la demanda. En este mismo periodo, el número de alojamientos rurales creció más de un 10%. En otras palabras, hay menos viajeros para más casas rurales y esto supone la pérdida de ocupación y de ingresos para los alojamientos. Son las conclusiones de François Derbaix, consejero delegado y fundador de Toprural.com, a la luz de la evolución de un sector que se ha mostrado fuerte hasta ahora, pero que también empieza a sufrir los efectos de la crisis.

Si analizamos el último trimestre la tendencia es aún peor: -17% en octubre, -20% en noviembre y -11% en diciembre 2008. El descenso de octubre y noviembre se explican en parte por la casi-ausencia de puentes durante estos meses en 2008 (un puente o fin de semana largo en 2008 versus tres en 2007). No es así para diciembre 2008, mes en el que, a pesar de tener puentes y festivos similares a diciembre 2007, la demanda baja más del 10%. La tendencia es claramente negativa: empezamos 2008 con un crecimiento positivo y acabamos con una bajada de más del 10%.

Evolución desigual

De todas maneras, la evolución del sector ha sido desigual en el territorio nacional. De hecho, en 2008 hubo crecimiento en pernoctaciones en 6 comunidades autónomas (Aragón, Cataluña, Navarra, País Vasco, Cantabria y Baleares), mientras que el descenso fue acusado en el resto, encabezada por Comunidad Valenciana, seguida por Asturias y Madrid.

Para Derbaix, el origen de esta bajada está claro: el turismo rural también sufre las consecuencias de la crisis. “En Toprural comentábamos en otras ocasiones que el turismo rural podría resistir mejor por ser un turismo de destinos cercanos, de escapadas cortas y a un precio económico. Aún así, estas ventajas se han visto finalmente anuladas por la extrema dependencia del turismo rural de los viajeros españoles. Por tanto, teniendo en cuenta que el 83% de las pernoctaciones de turismo rural son de residentes en España, que somos el país europeo donde más ha crecido el paro y que los viajeros prescinden de las estancias cortas en épocas de dificultades económicas, entonces el resultado está claro. Esta realidad nos hace pensar que el turismo rural corre el riesgo de bajar aún más en 2009. Calculamos que de mantenerse la situación, podría descender entre un 10 y un 20%”.

Algunos consejos

Entre los consejos propuestos por Toprural, se incluye mejorar la promoción de los alojamientos en Internet: el 93% de los viajeros rurales busca un alojamiento en la web (según la Radiografía del viajero rural 2008); traducir los contenidos a otros idiomas para atraer al público extranjero; emplear las redes sociales para conseguir notoriedad; mejorar la oferta visual, publicando fotos en Flickr y producir uno o varios vídeos para publicarlos en Youtube, Dailyotion, etc.; y fomentar que los clientes viajeros publiquen opiniones de los alojamientos en Internet.

En 2008 el número de pernoctaciones en alojamientos de turismo rural en España bajó un 2,3%. Es la primera vez en la historia que el sector vive un descenso de la demanda. En este mismo periodo, el número de alojamientos rurales creció más de un 10%. En otras palabras, hay menos viajeros para más casas rurales y esto supone la pérdida de ocupación y de ingresos para los alojamientos. Son las conclusiones de François Derbaix, consejero delegado y fundador de Toprural.com, a la luz de la evolución de un sector que se ha mostrado fuerte hasta ahora, pero que también empieza a sufrir los efectos de la crisis.