Perros sueltos y un pueblo de Zamora que vio venir la tragedia: "Le pasó a Arancha, pero pudo pasarnos a todos"

La estampa es habitual. Quizá demasiado. Entre Roales del Pan y La Hiniesta hay un camino de apenas tres kilómetros que emplean para pasear los vecinos de ambas localidades zamoranas. Se trata de una zona de campos abiertos, sin alambradas, como la que puede haber a las afueras de cualquier pueblo. Y ahí es muy normal que haya ganado y perros sueltos que lo pastorean, o simplemente canes a los que sus dueños les sueltan la correa para que corran.

Nunca había pasado nada, hasta ayer, cuando varios de estos perros atacaron a Arancha, una joven enfermera de 27 años que murió como consecuencia del suceso. Los vecinos, asustados y golpeados por el suceso, echan la vista atrás y dicen que se veía venir: "Le pasó a ella, pero nos podía haber pasado a cualquiera".

TE PUEDE INTERESAR

Muere una joven de 27 años tras ser atacada por unos perros en Roales (Zamora)

Europa Press

Arancha era una joven que vivía junto a sus padres en el pueblo. Era sanitaria, concretamente enfermera, y compañeros de batallas destacan su "profesionalidad" y, especialmente, el gran futuro que tenía por delante. Recuerdan, por ejemplo, cómo se empeñó a fondo durante la pandemia del coronavirus, cuando estuvo destinada en Toro. "Para su edad era una muy buena profesional, un ejemplo de que hay gente joven que está preparadísima", comenta uno de estos compañeros, que guarda bonitas palabras para ella y que no se explica cómo es posible que en pleno siglo XXI puedan darse situaciones así.

Otro vecino de Roales del Pan, localidad de poco más de 900 habitantes, y que prefiere mantener el anonimato, explica a El Confidencial que el suceso tuvo lugar en unos caminos de concentración en los que es muy usual ver a perros de todo tipo sueltos, sin ningún tipo de protección ni bozal. Tampoco es raro, dice, que por allí se pastoree al ganado y, por ende, que haya mastines sueltos, en una estampa calcada a la que ayer por la tarde terminó en desgracia.

"No entiendo cómo puede pasar esto, cómo pueden unos perros matar a una persona. Le ha pasado a Arancha, pero le podía haber pasado a mi mujer o incluso a mis hijos”, clama el vecino, que reconoce que ha paseado en numerosas ocasiones por la zona, igual que hacen otros habitantes de cualquiera de los dos pueblos.

"No entiendo cómo puede pasar esto, cómo pueden unos perros matar a una persona"

"Yo creo que casi todos aquí nos hemos cruzado con los perros alguna vez", resuelve otro vecino de este pueblo castellano, donde imperan el silencio y la rabia por la pérdida de la joven. Nadie quiere dar su nombre, todos se conocen, y saben el dolor que está sufriendo la familia de Arancha. En este sentido, todos se hacen la misma pregunta. "¿Por qué han atacado a una chica unos perros de pastoreo? ¿Cómo puede pasar esto? ¡Esa es la cuestión que deberíais buscar los periodistas!", exclama la propietaria de uno de los bares de Roales, que no puede ocultar el shock que el suceso allí ha producido: "Imagínate que le pasa esto a uno de tus vecinos…".

Perros sueltos

La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, ha confirmado ante los medios que ayer por la tarde los perros estaban sueltos "y sin presencia del propietario" en el camino que une Roales y La Hiniesta, en un punto enclavado en el término municipal de la segunda localidad.

Eran, como ha especificado, "siete perros: tres mastines, dos perros pastores careos y dos cachorros de menos de un mes de una perra pastor". De igual modo, ha señalado que cuatro de los animales "estaban identificados con chip y con cartilla y vacunación, mientras que un quinto no lo estaba, por lo que se investigan sus condiciones.

David García, el alcalde del municipio, ha dado esta mañana una rueda de prensa en la que no ha ocultado las lágrimas. Ha solicitado a Administraciones superiores que tomen medidas para que no se vuelvan a repetir sucesos como este. "Un perro no se tira así a una persona, te puede ladrar, pero un ataque tan violento, no", comenta, todavía perplejo y en conversación con El Confidencial, el primer edil. Advierte que, en las últimas semanas, se han datado ataques de lobos en la zona y no descarta que estos perros hayan podido estar en contacto con ellos. "Creemos que el contacto con los lobos ha podido volver más agresivos a los perros", subraya García, que sigue sin comprender cómo los animales actuaron así: "No sé si será por el contacto con los lobos o por una manipulación incorrecta del animal, pero un perro no se tira a destrozarte si no ha sido enseñado".

También esta mañana, el propietario de la explotación ganadera y dueño de los canes ha declarado, en calidad de investigado, después de un suceso que reconstruye la Guardia Civil. Fuentes de la investigación citadas por Efe señalan que, pese a lo habitual que era ver perros sueltos en la zona, no existen denuncias previas en los últimos dos años por ataques de estos perros, aspecto del que no existe confirmación oficial. Con todo, en el pueblo nadie se quita de la cabeza que se veía venir lo que pasó.