El director de la Selección solo responde a su abogado y niega haber coaccionado a Hermoso

El director de la selección masculina de fútbol, Albert Luque, ha negado este martes ante la Audiencia Nacional haber coaccionado a la futbolista Jennifer Hermoso para que saliera en defensa del ya expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales tras el beso que le dio durante la entrega de trofeos del Mundial de Sídney (Australia) . Luque ha declarado como imputado por videoconferencia y, según apuntan fuentes jurídicas, solo ha respondido a las preguntas de su abogado.

La Fiscalía sostiene en su querella que Hermoso "sufrió una presión constante y reiterada por parte del Sr. Rubiales y el entorno profesional de este, con la finalidad de que, públicamente, justificara y aprobara el acto cometido contra su voluntad; sufriendo D.ª Jennifer una situación de hostigamiento, en contra del desarrollo de su vida en paz, tranquilidad y libremente".

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En el caso de Luque, la investigación se centra en si presionó a Hermoso durante el viaje de las jugadoras a Ibiza para celebrar la victoria. Según apuntan las mismas fuentes, el director de la selección masculina ha reconocido que trató de hablar con ella durante aquellos días, pero solo porque eran amigos y porque él mismo ya se encontraba en Ibiza por sus vacaciones. Tras no conseguir hablar con ella, Luque comentó entonces lo sucedido con una amiga de la futbolista.

Además de Luque y Rubiales, por estos hechos también constan como imputados el director de Marketing de la RFEF, Rubén Rivera, y exseleccionador femenino Jorge Vilda. Este último declaró el 10 de octubre y también negó haber presionado a la futbolista para que exculpara a Rubiales por el beso, pero, al mismo tiempo, reconoció que mantuvo una conversación con su hermano, Rafael Hermoso, durante el vuelo de regreso a España. Según defendió ante el juez, aquella conversación fue por iniciativa propia "para bajar el suflé" y no por orden de Rubiales.

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Rivera declaró el mismo día y apuntó a que durante el viaje a Ibiza ejerció como portavoz de la RFEF ante las jugadoras, pero negó las coacciones o que recibiera órdenes directas de Rubiales. El director de Marketing limitó su papel al de una especie de recadero, hasta el punto de realizar gestiones como la compra de bikinis o de entradas para las discotecas. También reconoció que habló con una de las amigas de Hermoso, pero solo para que la convenciera de que tenía que hablar con el propio Luque sobre lo ocurrido. Según Rivera y el propio director de la selección, aquella conversación nunca llegó a producirse.

Tras esta ronda de declaraciones, el magistrado tomará declaración como testigos el 2 de noviembre al seleccionador masculino Luis de la Fuente, al exdirector de Comunicación de la RFEF Pablo García Cuervo y al subdirector de Comunicación, Enrique Yunta. El 14 de noviembre, comparecerán a su vez el psicólogo de la selección femenina, Javier López Vallejo; el exdirector de gabinete de Luis Rubiales, José María Timón; y el responsable de 'compliance' de la selección, Javier Pujol. Dos días después, están también citados como testigos la futbolista Laia Codina y al presidente del Comité Nacional de Fútbol Femenino, Rafael del Amo, y el 30 de noviembre se celebrará un careo entre la amiga de la futbolista y el director de Marketing.