Boadilla del Monte, epicentro de Gürtel, quiere dar a Esperanza Aguirre una Avenida

Propuesta para la polémica y por partida doble. El Ayuntamiento de la localidad madrileña de Boadilla del Monte puede ser el primero en rendir homenaje a Esperanza Aguirre, la ya expresidente de la Comunidad de Madrid, que el pasado lunes anunció su retirada de la política activa. El consistorio debatirá en su próximo pleno municipal la propuesta presentada para dedicar una avenida a la aclamada líder regional del Partido Popular durante los últimos diez años.

Según la moción presentada por el grupo municipal Alternativa por Boadilla, tras la inesperada dimisión, es un "momento idóneo" para que, al margen de discrepancias políticas, se reconozca "la fortaleza política y personal que Esperanza Aguirre ha demostrado en todos sus años de trabajo. Una mujer que nunca ha dejado indiferente a nadie, que siempre ha hablado claro, con valentía y se ha esforzado al máximo por llevar a cabo sus propuestas".

Además de adelantarse al propio PP, fuerza política que gobierna Boadilla del Monte, la propuesta del partido independiente encierra una trampa para los populares. Aunque consideran a Esperanza Aguirre "merecedora de un calle importante en nuestro municipio", la iniciativa pretende que se aproveche esta oportunidad para "eliminar el nombre de la Avenida del Generalísimo de nuestra principal calle y sustituirlo por el de una persona libre y demócrata".

Según la Ley de Memoria Histórica, aprobada durante la primera legislatura del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, los escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación personal o colectiva del levantamiento militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura deben ser retirados de los edificios y espacios públicos. Sin embargo, Boadilla del Monte, como otros municipios, sigue haciendo caso omiso a esta ley.

"Creemos que el Partido Popular tiene hoy una oportunidad única para eliminar una larga controversia entre los vecinos del municipio", expone el partido APB para argumentar su propuesta de cambio. "Es un momento, pues, para reconocer lo que nos une, la Democracia, con personas de nuestra propia etapa política. Es un momento para sustituir nombre que nos enfrentan por nombre que nos merecen un reconocimiento por su contribución a la Democracia y al trabajo político en libertad".

Boadilla del Monte ha sido, precisamente, uno de los municipios madrileños que más quebraderos de cabeza ha generado a Esperanza Aguirre durante su etapa al frente de la Comunidad de Madrid. Esta localidad popular resultó ser el epicentro del sonoro caso de corrupción política bautizado como 'Trama Gurtel', que descubrió la implicación, entre otros, de varios dirigentes locales y regionales del PP a los que la presidenta tuvo que apartar para no resultar afectada.