El PSOE frena su caída electoral y se acerca a un posible Gobierno con CiU y PNV

El Partido Popular no puede cantar victoria antes de tiempo. Aunque las últimas encuestas, incluidas las del CIS, les auguran una cómoda victoria frente al PSOE, los socialistas parecen remontar el vuelo y meterse de nuevo en la batalla electoral. Este giro está propiciado por la renuncia del presidente José Luis Rodríguez Zapatero a encabezar la carrera por las generales de 2012 y la hipotética candidatura de Alfredo Pérez Rubalcaba, un líder no tan efímero como muchos pensaban. Asimismo, la controvertida incorporación de Francisco Camps a las listas Valencia también han frenado el impulso electoral de Mariano Rajoy.

Las últimas encuestas electorales dan un respiro al partido socialista. En ellas recorta distancia con el PP, que ve como la mayoría absoluta se aleja. La renuncia de Zapatero, muy desgastado políticamente por la crisis, ha sido clave para recuperar terreno. Además, la posible candidatura de Rubalcaba sería otro de las razones por las que el partido parece abandonar los números rojos. Este panorama es el que intentará aprovechar el PSOE para retener el Gobierno en los comicios generales de 2011.

Según adelantaba José Antonio Zarzalejos en El Confidencial, una de las hipótesis que barajan los socialistas es un acercamiento con las fuerzas nacionalistas. Así, si el descalabro electoral no fuera muy abultado (necesitan unos 155 o 158  escaños sobre los 350 del Congreso), el candidato del PSOE podría intentar pactar con CiU y PNV y conseguir la mayoría simple desbancando al PP, que sería la fuerza más votada. Para ello, este partido se vería obligado a realizar una serie de concesiones a los nacionalistas que pasan por un pacto fiscal con Cataluña o por devolver el Gobierno del País Vasco al PNV.

Por otro lado, el PP debe evaluar la factura política del caso Camps. El Comité Electoral de los ‘populares’ dio el visto bueno a unas listas autonómicas del PP valenciano con nueve implicados en casos de corrupción. Además, el presidente de esta comunidad está pendiente de juicio por su relación con el caso Gürtel. Esta problemática judicial podría recortar votos a los populares en uno de sus tradicionales feudos, y así lo empiezan a atestiguar ya algunas de las encuestas preelectorales. Las autonómicas serán una prueba de fuego de cara a los comicios nacionales de 2012.

Baile de encuestas

Las últimas encuestas de las elecciones nacionales, dan ciertas esperanzas a los socialistas pese al baile de números. Tras los malos resultados de los últimos meses, el PSOE ha remontado ligeramente el vuelo, aunque todavía consigue la mayoría el Partido Popular. Así, según Público, los socialistas han recortado 11 puntos, por lo que la ventaja del PP quedaría en tan sólo 2,3 puntos tras la decisión de Zapatero de no presentarse como candidato a las generales de 2012. De acuerdo con este diario, el PP obtendría el 40,1% de los votos y el PSOE, el 37,8%.

Este sondeo confirma el publicado por El Mundo o la Cadena Cope a principios de abril, en el que afirmaban que la ausencia de Zapatero permitiría al PSOE recuperar hasta 1,6 millones de votos. Pese a que la ventaja sigue siendo amplia en estas encuestas, el PSOE gana poco a poco unos votos para las nacionales que le será muy difícil mantener en las próximas autonómicas.

Otras encuestas, como la publicada por La Razón, dan por enterrado al PSOE. Así, este diario asegura que el PP aventajaría al PSOE en 14,5 puntos si se celebrasen hoy las elecciones generales. La renuncia de Zapatero no serviría por tanto para “revivir” a los socialistas. Además, apuntan que la debacle sería menor si Rubalcaba fuera candidato en vez de Carme Chacón, otra de las posibilidades que barajan los socialistas. Sea como sea, las autonómicas y locales del 22-M serán la próxima prueba de fuego para medir las fuerzas entre el socialistas y populares, una partida que parece ganada de antemano.