De ‘La Noria’ a Telemadrid: el ‘road show’ de Blanco anula a todo el Gobierno

José Blanco defendió ayer prácticamente en solitario el pabellón del Gobierno en el Congreso de los Diputados. Las ausencias de José Luis Rodríguez Zapatero, María Teresa Fernández de la Vega, Elena Salgado o Alfredo Pérez Rubalca en la sesión de control confirmaron al ministro de Fomento como la única voz autorizada del Ejecutivo y del PSOE. El vicesecretario socialista ha asumido en la última semana la defensa de los recortes sociales, acaparando también el papel de Leire Pajín, y jugándose su crédito político en la defensa de la marca ZP.

Prueba de ello es la intensa gira por radios y cadenas de televisión que ha protagonizado desde que, el pasado 12 de mayo, Zapatero anunciara las nuevas medidas para reducir el déficit. Su aparición en La Noria ha sido la más controvertida, pero también ha sido entrevistado en Onda Cero, Televisión Española, Telemadrid, Cuatro y Telecinco. Un completo road show que le ha convertido en el verdadero portavoz y número dos del Gobierno.

“En el entorno de Zapatero no hay duda de que Blanco es el hombre fuerte, y el único que podría sustituirle. Todavía tiene problemas de imagen, pero en el partido nadie le discute. El PSOE está en su ADN”, afirmaron las fuentes cercanas a Moncloa.  A Blanco se le atribuye también el impulso de medidas electoralistas como la anunciada subida de impuestos a las rentas altas. “Sabe que las bases quieren gravar a los ricos, las transacciones financieras o el patrimonio, y traslada esa sensibilidad a Zapatero”, señalaron las citadas fuentes.

El PP es consciente del monopolio que Blanco está ejerciendo en la comunicación de la acción de Gobierno, pero, por ahora, descarta aplicar un marcaje especial, al estilo del que ha protagonizado Soraya Sáenz de Santamaría con De la Vega. Los populares pretenden aprovechar la suspensión de obra pública y el recorte en la inversión en infraestructuras para desgastar al titular de Fomento, que ayer tuvo que responder en la Cámara a cinco preguntas al respecto.No obstante, fuentes del PP explicaron que si Blanco continúa ejerciendo de portavoz gubernamental, elevarán el tono de sus réplicas. Así lo hizo la semana pasada el secretario de Comunicación, Carlos Floriano, quien aseguró que “el ministro de Fomento encarna el socialismo de pacotilla o socialismo basura”.

A la conquista del espectador

En su esfuerzo por defender la marca ZP y sostener el ánimo del PSOE, Blanco tuvo la audacia de acudir el pasado sábado al programa de Telecinco La Noria. Para el consultor político Iván Redondo, se trata de un día histórico para la comunicación política española. El día en que un dirigente se atrevió a “usar la bala” de participar en un polémico programa de entretenimiento para encontrar a sus potenciales votantes, en lugar de limitarse a los informativos. Algo habitual en otros países, pero insólito en España.

Para Redondo, La Noria fue el final de un estudiado relato en tres capítulos: primero, el CIS levantó la moral socialista al situar al PSOE a 1,5 puntos del PP en intención de voto; después, Zapatero anunció el fuerte recorte social; y, por último, Blanco utilizó todos los recursos a su alcance para minimizar los daños. El ministro de Fomento todavía no domina el formato y “sobreactúa”, pero se presentó en Telecinco con un discurso calculado al milímetro.

“Trató de humanizar el mensaje apelando a su padre o contando una anécdota sucedida en la peluquería. Su principal interés era tranquilizar a los pensionistas y defender la marca ZP”, apuntó Redondo. De acuerdo con este analista, el discurso de Blanco pasa por presentar a Zapatero como un presidente valiente que protege a los españoles de los especuladores, tarea para la que ahora habría necesitado recortar los derechos sociales. Sin duda, un mensaje difícil de vender, incluso desde La Noria.