Los empleados de Roca: “Montan fábricas fuera y ahora aprovechan la crisis para echar gente”

Roca, la compañía número uno del mundo en fabricación de sanitarios que preside José Miguel Roca Sans, presenta hoy ante el Ministerio de Trabajo el expediente de regulación de empleo que propone despedir a 713 de sus empleados de las plantas de Barcelona (356 afectados),de Alcalá de Henares (180 afectados) y Alcalá de Guadaira (177 afectados). “El tema de la construcción está a la baja. Las previsiones para este año son malas, lo mismo que las del año que viene. Y con casi 3.000 trabajadores no podemos estar pensando en que dentro de dos años puede empezar a remontar la situación. Hemos de hacer algo ya”, declararon fuentes de la empresa a El Confidencial.

El conflicto en la líder mundial de sanitarios (fabrica 40 millones de piezas anuales) tiene visos de extenderse a otros sectores. “En el ámbito político, alguien ha de ir espabilándose -apunta a El Confidencial José Bernal, coordinador de las secciones de la UGT en las factorías de Roca-. Se ha de dar un impulso al sector, ya sea con un Plan Renove o con facilidades para la renovación del parque de piezas”. La pelota, pues, puede acabar en el tejado del ministro de Industria, Miguel Sebastián.

Los trabajadores se muestran incrédulos ante la estrategia de la compañía. “El pasado mes de marzo fue aprobado un expediente de regulación de empleo que afectaba a 1.900 trabajadores durante un año. Y desde marzo no ha cambiado tanto la situación. A la empresa se le ha ido la mano”, declaró a El Confidencial Felipe Trigueros, secretario general de la sección intercentros de Comisiones Obreras (CCOO) de Roca.

Bernal reconoce que “la situación de los mercados no es buena”, pero cualquier solución ha de pasar por la garantía de estabilidad del empleo y de las factorías españolas”. El líder ugetista argumenta que en el año 2008 se puso en práctica una estrategia de prejubilaciones para mayores de 55 años, por la que la empresa cubría el 85% de los salarios de las bajas voluntarias con un salario referenciado al mismo año 2008 y actualizado al 2,5% anual, además de un convenio especial con Tesorería de la Seguridad Social hasta la jubilación a los 63 años. “En estos momentos, estamos afectados por un ERE temporal de 12 meses que no se ha agotado. Y la empresa habla ya de expediente de extinción. No podemos aceptarlo. Primero, agotemos el plazo del ERE que está en marcha y busquemos mientras tanto otras medidas menos traumáticas, como las que se utilizaron en el 2008”, añade Bernal.

En los últimos años, Roca ha invertido fundamentalmente en mercados exteriores, como Croacia, Marruecos, China, Egipto, Rusia o Malasia. Fuentes de la compañía reconocen que el holding tiene 65 centros de trabajo repartidos por 135 países de cuatro continentes. “Cada centro abastece al mercado que le corresponde y apenas fabrica para mercados exteriores”, añade esta fuente.

Para los sindicatos, ése es precisamente el problema de la empresa. “Se ha invertido fuera. Ha estado montando fábricas en otros países y ahora aprovecha la crisis para plantear el expediente de rescisión de contratos. Nos ha pillado por sorpresa, porque habíamos firmado hace poco más de tres meses un expediente temporal hasta febrero del 2010. Pensábamos que con eso estarían solucinados los problemas”, subraya Trigueros.

Las primeras pérdidas desde 1976

Pero desde la dirección las cosas se ven diferentes: “El sector inmobiliario cayó bruscamente. No es que no haya obra nueva. Es que ni siquiera se acaba la obra que se había comenzado. Y, además, las obras particulares han quedado paralizadas porque la gente establece sus prioridades y ha habido un parón de la demanda. En el 2008, facturamos 1.708 millones de euros, un 4,5% menos que el año anterior. De ellos, 592 millones correspondían al mercado español. Y eso supone un bajón del 22%, aunque es verdad que las ventas al exterior aumentaron alrededor de un 15%. Además, por primera vez desde 1976, hemos tenido pérdidas, que fueron de 95 millones de euros. Ante esta situación, se han de tomar medidas drásticas”.

Según los números de la empresa, que fueron presentados el pasado 30 de junio, el ebitda se situó en 236 millones y las inversiones durante el pasado ejercicio ascendieron a 283 millones. De ellos, 143 millones fueron destinados a la adquisición de nuevas compañías industriales en China y Taiwan, además de una joint ventura con el grupo Cosmic en España. Otros 132 millones se utilizaron para la finalización de proyectos en China, Portugal, Marruecos y países del Este de Europa, a la construcción de salas de exposición en Madrid, Barcelona, Londres, Lisboa, Viena y Laufen y a diversos proyectos de reducción de costes, mejoras mediambientales y nuevos productos.

“La situación se le ha hecho saber al comité de empresa y ahora se le expondrá al Ministerio de Trabajo”, dicen fuentes de la compañía. Tanto empresa somo sindicatos esperan poder comenzar a negociar condiciones del expediente “en la primera semana de septiembre”. Y ello porque, en estos momentos, una gran parte de la plantilla está fuera de los centros de trabajo, tanto por vacaciones como por la afectación del ere temporal. Por ello, se ha planteado una moratoria de algo más de un mes para empezar a negociar. La empresa dice que la acepta, ya que los sindicatos consideran primordial esta condición.

“Comprendemos que tras años en que los beneficios se disparaban a 100 o 200 millones de beneficios anuales, ahora los mercados se encojan. Pero la empresa no puede tomar una decisión unilateral como la que ha planteado”, dice Bernal. Y Trigueros abunda en la materia: “Sabemos que ha habido una caída del mercado y de la vivienda construida, pero hemos de ver cómo evoluciona este mercado para saber qué medidas hacen falta”. La solución al conflicto, pues, se hará a cara de perro a la vuelta de las vacaciones.