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El laberinto vasco es hoy, dos días después de los comicios autonómicos, más laberinto que nunca. A Ibarretxe no le gusta ninguna de las dos únicas opciones viables que tiene para pactar, los socialistas y el PCTV. De hecho, el lehendakari ha reconocido
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El laberinto vasco es hoy, dos días después de los comicios autonómicos, más laberinto que nunca. A Ibarretxe no le gusta ninguna de las dos únicas opciones viables que tiene para pactar, los socialistas y el PCTV. De hecho, el lehendakari ha reconocido

Juan José Ibarretxe, el gran derrotado de la jornada electoral del domingo pasado, aseguraba ante sus militantes, tras conocerse el batacazo de la coalición PNV-EA, que

Foto: El laberinto vasco es hoy, dos días después de los comicios autonómicos, más laberinto que nunca. A Ibarretxe no le gusta ninguna de las dos únicas opciones viables que tiene para pactar, los socialistas y el PCTV. De hecho, el lehendakari ha reconocido
El laberinto vasco es hoy, dos días después de los comicios autonómicos, más laberinto que nunca. A Ibarretxe no le gusta ninguna de las dos únicas opciones viables que tiene para pactar, los socialistas y el PCTV. De hecho, el lehendakari ha reconocido

Juan José Ibarretxe, el gran derrotado de la jornada electoral del domingo pasado, aseguraba ante sus militantes, tras conocerse el batacazo de la coalición PNV-EA, que “tenemos una partida complicada, pero nosotros somos los que tenemos las cartas”. Unas cartas que, según ha señalado el propio lehendakari a sus más estrechos colaboradores, se resiste a compartir con el Partido Socialista de Euskadi (PSE) y con su líder, Patxi López.

Así lo ha podido confirmar El Confidencial en fuentes del Gobierno tripartito, que reconocen que, en las últimas horas, el propio Ibarretxe les ha manifestado su “resistencia a presidir un Gobierno de coalición con el PSE”. ¿El motivo? “No se fía de las supuestas buenas intenciones de los socialistas y, en concreto, de Patxi López”, asegura en privado. Ibarretxe prefiere negociar con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero cualquier acuerdo antes que con el candidato socialista vasco.

“Otras cosa es lo que decida la dirección del PNV -añade una de las fuentes consultadas por este diario-, donde hay reconocidos partidarios de llegar a acuerdos con el PSE, entre ellos el propio presidente, Josu Jon Imaz. No olvidemos que, tras la pérdida de cuatro escaños, el liderazgo de Ibarretxe ha empezado a ser cuestionado dentro de su partido”.

La postura que el todavía lehendakari en funciones intentará defender en las diferentes reuniones que mantenga con los dirigentes peneuvistas -ayer ya hubo un primer encuentro del Euskadi Buru Batzar, el máximo órgano del partido- es la conveniencia de reeditar un acuerdo de coalición con sus socios en la anterior legislatura -EA, con el que compartió listas electorales, y Ezker Batua-, además de intentar sumar el escaño de Aralar, la escisión de Batasuna, y, a partir de ahí, llegar a acuerdos puntuales con los socialistas. “Sería un apoyo tácito, bajo mesa”, apunta una fuente del Gobierno de Vitoria.

Patxi López tampoco quiere un Ejecutivo de coalición

Una opción que, además, no es mal vista por los dirigentes del propio PSE. “Patxi López tampoco quiere entrar en un Ejecutivo de coalición con el PNV si éste no escenifica antes cambios en su actual línea”, reconoce una fuente socialista consultada. Por el momento, Ibarretxe y el candidato socialista ni siquiera llegaron a hablar en la mañana de ayer, durante la rueda de contactos telefónicos iniciada por el lehendakari. La comunicación no pasó de las secretarias.

Fuentes cercanas al líder del PSE insistían ayer a El Confidencial que Patxi López será coherente con su promesa de la campaña electoral de no participar en un Ejecutivo que no presida él mismo. Una cesión del puesto de lehendakari que, en ningún caso, contempla el PNV. No obstante, fuentes socialista reconocen que la cuestión principal no es quién va a ser el jefe del Ejecutivo de Vitoria: “El PSE va a pedir algo básico para llegar a cualquier tipo de acuerdo, sea tácito o expreso: aparcar definitivamente el Plan soberanista para empezar de cero la reforma del estatuto en la mesa de partidos”. Ibarretxe, de momento, se resiste.

Juan José Ibarretxe, el gran derrotado de la jornada electoral del domingo pasado, aseguraba ante sus militantes, tras conocerse el batacazo de la coalición PNV-EA, que “tenemos una partida complicada, pero nosotros somos los que tenemos las cartas”. Unas cartas que, según ha señalado el propio lehendakari a sus más estrechos colaboradores, se resiste a compartir con el Partido Socialista de Euskadi (PSE) y con su líder, Patxi López.