Desconcierto en las cajas de ahorros: "Nadie ha visto el decreto"

Es el secreto mejor guardado de España en estos momentos. Nadie ha visto el borrador del decreto de recapitalización que ha sembrado el pánico en el sector financiero, ni siquiera las entidades o los partidos con los que se suponía que lo iban a negociar. Y la intención del Ejecutivo era aprobarlo este viernes. Según confirman fuentes cercanas al supervisor, el Banco de España  todavía está haciendo los números para fijar los requisitos definitivos que Economía exigirá a bancos y cajas.

"No existe el borrador, sólo tienen un folio con ideas", señala una fuente conocedora de la situación. "Se han tirado a la piscina con cuatro ideas pero no saben cómo van a concretarlas, todo está en el aire y el sector está harto de incertidumbre", añade.

En una caja de ahorros aseguran que "nos sentimos engañadas porque nos habíamos embarcado en los SIP y en los procesos de reestructuración, y ahora nos encontramos con que eso no vale y con que tenemos mucho menos tiempo del que nos habían dicho. O esto es una tomadura de pelo o lo era lo de antes".

El decreto pilló con el pie cambiado al propio gobernador Fernández Ordóñez, a quien el decreto deja a los pies de los caballos porque implica que todo lo que ha hecho hasta ahora no vale para nada. "No debía de saberlo, porque en diciembre aprobó los últimos SIP y el subgobernador Aríztegui insistía en la validez de la fórmula, aunque había que acelerar el proceso", señala la fuente cercana al supervisor.

Rato lidera las cajas

Con todo en el aire, continúan las fuertes presiones desde las cajas, con un papel muy activo del presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, según confirman varias fuentes. Su objetivo es reducir el requisito de core capital desde el 9,5% inicialmente estimado para las cajas hasta el 8% en que se ha fijado para los bancos. Su argumento es que se trata de un agravio comparativo que distorsiona la competencia, pero en realidad se trata de algo mucho más grave: "Si es el 8% llegaremos con capital privado; si es el 9,5% no", según una de las entidades consultadas.

Tan importante como el número final es cómo se calcula, si con las normas actuales (Basilea II) o con las nuevas de Basilea III, que penalizan las participaciones industriales y financieras -e incrementa el déficit de capital-. Según las fuentes, ni lo uno ni lo otro: "Vamos a inventar Basilea 2,5 porque el cálculo no se ajusta a Basilea III, se añade alguna cosa al cómputo actual y se quita otra".

Probable retraso de una semana

Lo que sí ha prometido el Ejecutivo a las cajas es que el FROB ya recibido sí computará para calcular el core capital, aunque técnicamente no debería formar parte del mismo.

Con tantas incertidumbres por concretar y con el decreto sin redactar, parece imposible que pueda aprobarse este viernes como se pretendía, y cobra fuerza la idea de que se dejará para la próxima semana.