CEOE culpa al “populismo antibancario” del Gobierno de la subida de la prima de riesgo

Ni las tensiones en la zona euro, ni la reciente rebaja de Moody’s de la deuda portuguesa a bono basura. El Instituto de Estudios Económicos, dependiente de CEOE, culpó a las declaraciones de los últimos días de varios ministros contra la banca y a las medidas aprobadas en el pasado Consejo de Ministros en materia de hipotecas como responsables de la última escalada del diferencial del bono español con el alemán. El presidente de la institución, José Luis Feito, manifestó que la deriva de “populismo antibancario” que está adoptando el Ejecutivo hace más daño que cualquier decisión de las agencias de rating.

Feito, durante la presentación del informe de coyuntura económica del IEE, hizo una encendida defensa del sistema financiero español. “Después de la desastrosa gestión que ha hecho el Gobierno, si no fuera por nuestros bancos, estaríamos mucho peor”, sostuvo. Según el presidente del organismo, unas pocas actuaciones por parte del Ejecutivo pueden convertir una “mala situación en un caos”.

Las declaraciones del vicepresidente Rubalcaba o del ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, esta última semana en las que culpaban al sistema financiero de la crisis económica serían unas de esas actuaciones erróneas. Las otras, las medidas aprobadas en Consejo de Ministros que alivian la carga para las familias que no pueden hacer frente a su hipoteca. "Por beneficiar a unos pocos, se va a perjudicar a muchos", vaticinó el presidente del IEE, quien considera que estas disposiciones cerrarán aún más el acceso al crédito.

A pesar de que Moncloa intenta “demonizar” de esta forma al sistema financiero español, desde la institución no tienen ninguna duda de su fortaleza. De ahí que José Luis Feito prevea que los resultados de los bancos españoles en los test de estrés que se harán públicos próximamente "serán mucho mejor que los del resto de países de nuestro entorno".

Nuevas medidas de ajuste

El servicio de estudios del IEE presentó nuevas propuestas para conseguir una consolidación presupuestaria "que calmaría a los inversores". El think tank considera prioritario avanzar en un control del gasto por parte de las administraciones y rebajar los costes laborales, así como reformar el mercado de trabajo, en un marco de la negociación colectiva mucho mas duro del que ha presentado el Ejecutivo.

En relación a la política fiscal, el director del servicio de estudios del organismo, Gregorio Izquierdo, señaló que habría que introducir un techo de gasto para Ayuntamientos y Comunidades Autónomas y se mostró partidario de establecer "pérdidas de transferencias, prohibir un mayor endeudamiento e incluso sancionar a quien no lo cumpla". Según el IEE, los únicos ajustes que ha llevado a cabo el Ejecutivo han sido en materia de ingresos (principalmente a través de la subida del IVA), que "solo sirven para frenar el consumo”.

En el capitulo laboral, el organismo consideró que la rigidez y la falta de flexibilidad del sistema español han provocado que nuestro país haya alcanzado las cotas de desempleo más altas de la Unión Europea. Las propuestas pasan por rebajar los costes de despido, reducir el absentismo, ligar los salarios a la productividad y no a la inflación, impedir que los convenios sigan vigentes una vez que hayan finalizado, priorizar los acuerdos entre empresas por encima de convenios sectoriales y autonómicos y fijar por ley medidas de flexibilidad interna. Todas estas medidas se han puesto sobre la mesa en el proyecto de reforma de negociación colectiva que está pendiente de aprobar en el Parlamento, pero “se han quedado cortas”, según el IEE. Izquierdo puso como ejemplo que las empresas deben poder distribuir hasta un 25% de la jornada de sus trabajadores, en función de sus intereses, en lugar del 5% que quedó fijado.

También insistieron en que solo a través de la reducción de salarios se puede aspirar a crear empleo. Los datos presentados este jueves revelan que la productividad creció en 2010 a un ritmo del 2,3%, por encima del 1% al que vienen incrementándose de media los costes laborales. Sin embargo, el organismo de estudios exige más esfuerzos. “Es paradójico que con un despido tan caro, el despido sea el único mecanismo que pueden utilizar las empresas para reducir sus altos costes”, manifestó Gregorio Izquierdo.

El IEE cree que las previsiones económicas del Gobierno “han quedado desfasadas”, por lo que presentaron unos pronósticos bastante más pesimistas que los de Moncloa. Los datos del servicio de estudios establecen que el PIB español crecerá este año un 0,7% y que el Gobierno no podrá cumplir con el objetivo de déficit del 6%, que llegará según sus cálculos, hasta el 6,7%. Estas cifras “no son suficientes para crear empleo”, insistieron, por lo que desde el IEE prevén que este año el paro suba todavía un 0,5% más, lo que significaría la pérdida de unos 90.000 puestos de trabajo.