Gómez Navarro presenta su dimisión como presidente de las Cámaras

El presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Javier Gómez Navarro, presentó su dimisión durante la reunión plenaria que se celebró este miércoles en la sede de la institución en Madrid, tal y como había adelantado El Confidencial. La figura de Gómez Navarro ha sido muy contestada en los últimos meses por su tibia actitud frente a la supresión del recurso cameral (el canon obligatorio que abonan las empresas para financiar las Cámaras) decretada por José Luis Rodríguez Zapatero. Desde entonces, los desencuentros de Gómez Navarro con el Ejecutivo socialista han sido continuos.

Cuando se aprobó la nueva normativa, que aboca a muchas Cámaras a padecer graves problemas de financiación, varios presidentes exigieron la salida del ex ministro socialista. Sin embargo, se optó por otorgarle un periodo de gracia para que intentase reconducir la situación. Pasado el tiempo, y dado que el recurso cameral supone de media el 60% del presupuesto de las 85 cámaras que integran el Consejo -su supresión les obliga a buscar otros métodos de financiación y a acometer un ajuste drástico de su plantilla de 3.250 empleados-, Gómez Navarro no ha tenido más remedio que renunciar a la presidencia.

De hecho, en un comunicado emitido por las Cámaras, Gómez-Navarro alude a que las "nuevas circunstancias que afectan a las Cámaras y su futuro modelo de funcionamiento requieren de una absoluta dedicación" que sus compromisos empresariales y profesionales no le permiten atender ahora en las condiciones que considera necesarias.

Las alternativas para sustituir a Gómez Navarro son, siempre según las fuentes mencionadas, Javier Taberna, presidente de la Cámara de Navarra, y Miquel Valls, presidente de la de Barcelona y del Consejo de Cámaras de Cataluña. Un tercer candidato sería Manuel Teruel, presidente de la Cámara de Zaragoza. Las elecciones se celebrarán el próximo 3 de mayo.  

“Un calentón de Zapatero”

Tal y como publicó El Confidencial, el Gobierno no comunicó a Gómez Navarro con antelación, ni oficial ni formalmente, la supresión del recurso cameral. No sabía nada, ni siquiera recibió una llamada de cortesía antes de que lo anunciara Zapatero en el Congreso, lo que refuerza la idea de que este último paquete de medidas se fraguó en Moncloa sin que hubiera una participación demasiado activa siquiera de los Ministerios afectados.

El desaire fue especialmente doloroso para Navarro, que a finales de febrero impulsaba la iniciativa www.estoloarreglamosentretodos.org, en la que las grandes empresas se retrataron con hasta seis millones de euros para promover la movilización ciudadana ante la crisis.

Los carteles con la leyenda aún presiden las paredes de la sede del Consejo Superior, cerca de la Feria de Madrid (Ifema). El PP le acusó de hacer “propaganda gubernamental” y hasta consiguió que RTVE retirara los anuncios. Notable esfuerzo para que después no fuese recibido por la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado. “Hemos hablado con otros ministerios, pero la vicepresidenta económica no nos recibe. Y se lo hemos pedido”, dijo entonces a este diario Gómez Navarro, visiblemente contrariado.

Al frente de las Cámaras desde 2005

Javier Gómez Navarro llegó a la presidencia del Consejo Superior de Cámaras en febrero de 2005. Posteriormente, en junio de 2006, en unas nuevas elecciones tras la renovación de los Plenos de las 88 Cámaras, fue nuevamente elegido presidente del Consejo con el 87,4% de los votos. Cuatro años después, en julio de 2010, fue reelegido en el cargo con el 93,3% de los votos. Durante su etapa al frente de las Cámaras, la competitividad ha sido su principal caballo de batalla. Ya en su primera elección, Gómez-Navarro se comprometía ante las empresas a trabajar por la competitividad del tejido productivo español y prácticamente todas sus actuaciones frente al Consejo de Cámaras se han desarrollado para conseguir ese objetivo.

Asimismo, bajo su presidencia, las Cámaras de Comercio han planteado a la sociedad española y a los principales poderes públicos algunos debates, como la necesidad de mejorar la regulación y reducir los trámites administrativos o la conveniencia de llegar a un 'Pacto de Estado' para lograr un modelo energético sostenible.