Las cajas encuentran en sus negocios aseguradores un nicho de capital

La alianza entre Mutua Madrileña y La Caixa con la compra del 50% de Adeslas por 1.075 millones de euros es el último movimiento en el sector asegurador. Las cajas necesitan la liquidez que no encuentran en el mercado y una buena forma es soltar lastre.

El segundo semestre de 2010 ha sido un periodo intenso en este sentido. Los procesos de fusiones y adquisiciones que vive el sector ha propiciado la venta del negocio de los seguros por parte de cajas de ahorros.

De esta manera, a Caja Navarra fue una de las pioneras en adoptar este tipo de estrategia en 2008 con la venta del 50% de No Vida a Zurich, que abonó 45 millones de euros.

Pero no ha sido la única. Caixa Catalunya completó después de verano la venta de la mitad de su división de sus seguros de vida a Mapfre por 549,6 millones de euros. También Caixa Manresa y Tarragona han llegado este año a acuerdos con la compañía presidida por José Manuel Martínez, que compró también el 50% de su negocio asegurador por 85,7 millones de euros en el contexto del proceso de integración con la primera.

Los dos últimos meses del año han sido especialmente movidos en este sentido. Una vez finalizada la finalizada la fusión de las casa catalanas, la nueva entidad resultante, Unnim, recompraba a Zurich ese 50% que tenía en Caixa Sabadell Vida y Caixa Sabadell Seguros generales para su posterior venta a Aegón.

También Caixa Penedés se ha sumado al carro de las desinversiones con la venta de sus filiales de seguros de vida y pensiones a Caser.