Carlos Alcaraz, listo para su ofensiva en tierra batida: de las dudas de Djokovic a la incógnita Rafa Nadal

Simplemente con observar la actitud de Carlos Alcaraz tras caer derrotado ante Grigor Dimitrov en los cuartos de final del ATP 1.000 de Miami, en comparación a sus tropezones de finales del 2023, es para sentirse tranquilo con las expectativas deportivas del español para la temporada. Si hace unos meses Alcaraz salía de la pista sin entender qué había pasado, preguntándose por qué estaba ofreciendo su peor nivel de tenis, víctima de las dudas y de la falta de sensaciones, la gira de Estados Unidos ha permitido al murciano dar un paso al frente.

"Tengo que esperar unos días para verlo todo, pero no hay tiempo para parar. En la temporada hay muchos torneos y esto acaba de empezar. Tengo que seguir entrenando, estoy al 100% para seguir practicando bien. He disfrutado y tengo muchas ganas de jugar el siguiente torneo", reflexionó tras caer eliminado ante Dimitrov.

El veterano búlgaro realizó un partido casi perfecto, del que no se pueden sacar demasiadas conclusiones: "Estuve hablando con mi equipo diciendo que no sabía qué tenía que hacer. No veía su debilidad. Nada. Por eso tengo frustración en este momento, pero, pensando en el tenis, salí de la cancha contento con mi nivel". Las palabras de Carlo Alcaraz tranquilizan a la hora de afrontar su futuro. El más inmediato solo se entiende con la camiseta teñida de manchas de arcilla.

La gira de tierra batida, su gran oportunidad

Se cierra la etapa de Alcaraz al otro lado del charco. Una experiencia Las Américas que, aparte de sumar a su vitrina de trofeos el título de Indian Wells, le ha permitido recuperar las sensaciones perdidas en el último tramo del 2023. Ahora afronta la tierra batida como uno de los grandes favoritos a alzarse con Roland Garros, la guinda del pastel de estos meses.

Para empezar a hablar de rivales, hay que poner por delante al vigente campeón Novak Djokovic, número uno del mundo actual, el mejor tenista de la historia... pero que él mismo ha reconocido estar pasando por un bache en la pista. Todas estas dudas, seamos sinceros, se pueden disipar en cuanto llega la hora de la verdad. El serbio acostumbra a realizar ese doble juego, que tantas veces le ha beneficiado.

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Pero lo cierto es que Djokovic ha tenido un par de traspiés impropios de su nivel en las últimas fechas, además, hace pocos días se confirmó su divorcio deportivo con Ivanisevic, el entrenador que le ha llevado a lo más alto de su carrera. Los términos de su separación fueron agradables, a juzgar por la sentida despedida que Nole le dedicó a su exmentor: "Goran y yo decidimos dejar de trabajar juntos hace unos días. Nuestra química en la pista tuvo sus altibajos, pero nuestra amistad siempre fue sólida como una roca".

El otro nombre a destacar entre los candidatos es Rafa Nadal. El español regresará a las pistas en su Last Dance particular en Montecarlo, a partir del próximo 7 de abril, donde también estará Carlos Alcaraz. El tenista balear es toda una incógnita, pero a ver quién es el listo capaz de no situar el nombre de Nadal entre los candidatos para ganar Roland Garros.

Sinner, quien podría arrebatar a Alcaraz el número dos del mundo si gana en Miami, y otras figuras como Medvedev, asoman en la lista de favoritos. Si Alcaraz sigue con su inercia positiva, será difícil para cualquiera que se interponga en su camino. Después de Montecarlo, su agenda pasa por el Barcelona Open y el Masters de Madrid, para luego, ya en mayo, competir tanto en Roma como en la tierra batida de París. Palabras mayores.