Pautasso, sobre el balón parado: "El equipo es bajo, sabemos que tenemos ese defecto"

A tenor del 4-1 que reflejaba el electrónico del Camp Nou tras el Barcelona-Almería, se podría sacar la fría y poco real conclusión de que se trató de un encuentro cómodo para el Barcelona. Nada más lejos de la realidad. Aunque el equipo azulgrana recuperó sensaciones y dejó muestras del infinito potencial que atesora, volvió a errar a balón parado y en algún momento se vio dominado por un Almería que trató de apurar sus opciones. "La primera parte fue inmejorable. El equipo dio de nuevo sensación de vida. En el inicio del segundo nos equivocamos", comentaba Jorge Remigio Pautasso, que comparecía ante los medios por la expulsión del Tata Martino en la derrota en Anoeta.

Con el instinto asesino de Alexis y la sutileza de Messi bien engrasadas, el Barcelona tomaba Pero entonces llegaron las dudas a balón parado que atormentan al equipo culé con más frecuencia de la deseada. En un corner sin aparente peligro, los despropósitos en cadena de Puyol y Valdés propiciaron el cabezazo de Trujillo. Un gol caído del cielo que, casi sin quererlo y pese al dominio azulgrana, metía de a los visitantes de lleno en el partido "El equipo es bajo. Es una preocupación que vamos a tener hasta el final de la temporada, sabemos que tenemos ese defecto. Los rivales nos vienen a buscar eso. Vamos a seguir tratando de mejorar eso", ha apuntado.

Para resolver esas debilidades defensivas, la receta para el técnico argentino pasa por evitar ese tipo de situaciones: “En la medida que evitemos ceder córners y fouls, podremos evitar goles de pelota parada", adivinó. Pautasso también se ha referido al rendimiento del brasileño Neymar, con destellos de calidad pero muy desacertado de cara a gol, de quien ha dicho que espera que con minutos vuelva a mostrar "el desequilibrio" de la primera vuelta., reconocía el segundo de abordo. Pese al remate en falso de Puyol y el arrepentimiento en la salida de Víctor Valdés, Cesc Fábregas quiso entonar el mea culpa y asumir el error garrafal que costó el gol al equipo culé. "El gol del Almería es culpa mía porque me la he comida con patatas". Así de explícito se mostró el de Arenys de Mar ante las cámaras de la Barça TV.

Tras el paso por vestuarios, el equipo almeriense salió cargado de energía y no dudó en subir las hasta el momento retrasadas líneas. Un par de acciones bien trenzadas por el cuadro visitante, unidas a la lentitud en la circulación del balón de los suyos, hicieron resonar los primeros pitos en la grada. "Fue cuando Almería hizo circulación de la pelota, dio la sensación a la gente que no teníamos intensidad", aclaró el lugarteniente del Tata al ser preguntado por los dardos envenenados, siempre hambrientos de morbo, de los periodistas. Como si de un oasis en el desierto se tratara, el descontento del respetable se esfumó en cuestión de segundos. "La gente nos apoyó, sobre todo cuando hacíamos los cambios", concluía al respecto el preparador argentino.

En la 'flash interview' ante las cámaras deCanal +,Sergio Busquetsanalizó el encuentroy se mostró satisfecho por la victoria y su consecuencia más inmediata: echar sutemible aliento sobre el cogote del eterno rival."Nos acercamos un poco más al líder. Hay cosas buenas y otras que debemos mejorar, no ha sido nuestro mejor partido", confesaba el mediocentro catalán. Enarbolando la bandera del positivismo emergióXavi Hernández, encargado de cerrar el encuentro con un hermoso disparo desde la media luna del área. "Hemos recortado a los dos, hoy sale reforzado el Barcelona, está todo intacto", aseguro uno de los integrantes de una vieja guardia que dio alas a los suyos para volverles a meter de lleno en la lucha por una Liga que se aumenta en emoción por momentos.

Por su parte, el cuadro andaluz se marcha de la Ciudad Condal con otra derrota (11 en total, además de tres empates en los catorce duelos directos ante los azulgrana) en su haber. Más allá de lo indiscutible del resultado, al sentir andaluz le acompaña una sensación de satisfacción por la labor realizada sobre el campo. "Estoy muy orgulloso de mis jugadores, a pesar del resultado final, que puede parecer que haya sido un partido fácil para el Barça", reconocía el técnico almeriense, Francisco García, en rueda de prensa. "En la segunda parte, el Barça no se encontraba cómodo. Quien vea un 4-1 puede pensar que fue demasiado fácil", sentenciaba.