¿Los horarios televisivos están dañando la imagen del fútbol español?

La sensación de una primera jornada de Liga que empieza un sábado y acaba en la madrugada del lunes al martes es cuando menos extraña. Así está nuestro fútbol. Las televisiones mandan (para eso pagan) y establecen los horarios que más les interesan a los operadores para retransmitir los partidos, aunque oficialmente sea la Liga de Fútbol Profesional (LFP) quien los fije. Esto en buena parte ha provocado una pérdida de alrededor de un 10% en el aforo de los estadios de Primera División durante este largo ‘fin de semana’ con respecto a la campaña pasada. La próxima fecha en el calendario futbolístico mantiene los horarios, es decir, continuarán los partidos discotequeros de las once de la noche, pero en la tercera, tal como informamos ayer, habrá hasta diez franjas horarias distintas, una para cada partido. Curiosamente, una de ellas será a las 16 horas, cuando hasta ahora se ponía al calor como justificación para los horarios after-hour. Será que el 1 de septiembre bajan mucho las temperaturas en España…

Pero hay un aspecto evidente que condiciona todo esto, y es que los derechos de la Liga pertenecen a dos plataformas audiovisuales. Una de ellas, Mediapro, no dispone de un sistema para emitir varios partidos al mismo tiempo, de ahí la locura de horarios. Esto no pasa en Italia, Alemania o Inglaterra, donde el grueso de sus jornadas se juega a la misma hora, y casualmente los propietarios de los derechos televisivos del Calcio, la Bundesliga o la Premier rentabilizan bien sus inversiones. Algo falla entonces. Mientras en el resto de grandes ligas europeas hay un solo operador que gestiona estos asuntos y un reparto centralizado de la explotación televisiva, aquí hay una dualidad nada beneficiosa.

Al final, los grandes perjudicados están siendo los aficionados, que han mostrado su descontento en todos y cada uno de los estadios durante esta jornada, e incluso los futbolistas, aunque estos procuran no alzar mucho la voz porque saben que parte de su sueldo se debe a las grandes cantidades que las televisiones desembolsan a los clubes por ofrecer sus partidos. Aún así, algunos profesionales han dejado clara su opinión, caso del ‘Cholo’ Simeone, quien declaró antes de su enfrentamiento con el Levante que “el horario del partido es una falta de respeto a la gente, a los jugadores y a todos”, o Míchel, que mostró su indignación al señalar que “el fútbol se está moviendo por intereses que nada tienen que ver con este deporte”.

Los entrenadores de Atlético de Madrid y Sevilla han representado en los últimos días la división que existe en nuestro balompié, y que se deriva también de los derechos de televisión y el reparto tan poco equitativo que provoca un distanciamiento cada vez mayor entre Real Madrid y Barcelona y el resto. Colchoneros y sevillistas enarbolan, junto a otros once clubes, una bandera por un fútbol español más justo y que trate de igualar en cierta medida las fuerzas entre los dos grandes y los demás, de manera que la competitividad sea mayor.

La afición tiene 'su' culpable

A tenor de todas estas premisas, la pregunta es bien clara y es la que encabeza esta información: ¿la televisión está perjudicando la imagen del fútbol español? Los hinchas lo tienen claro y los futbolistas también, aunque mantengan su comprensible silencio. Uno de los que se ha atrevido a hablar de este tema abiertamente es Víctor Añino Bermúdez, más conocido como ‘Vitolo’, exjugador de Tenerife, Racing y Celta y ahora en el Panathinaikos, que en la previa de su enfrentamiento de ‘Champions’ contra el Málaga comenta para El Confidencial que “no hay duda que la Liga española es la mejor del mundo, pero aquí en Grecia ha perdido interés con respecto a otras ligas por la falta de emoción”.

Ante el cabreo generalizado de la masa futbolística de este país, la LFP ha querido salir al paso con respecto a las acusaciones que le están llegando en forma de pancartas en los estadios, redes sociales y todos aquellos medios de comunicación que han podido utilizar en los últimos días. El vicepresidente de la Liga, Javier Tebas, a través de su cuenta de Twitter, “hay que buscar el equilibrio entre los aficionados que ven el partido por tv y los que acuden al campo. Todos son importantes, lo he dicho mucho”. Al mismo tiempo, a Tebas le parece extraño que los aficionados se quejen del horario de las once de la noche, que “tan sólo será las dos primeras jornadas de Liga”. “Que se critique en un país donde los grandes programas de radio deportivos son hasta ¡¡ la 1 d la madrugada!!“.

La polémica está servida y no parece que esto vaya a cambiar mientras se mantengan dos operadores audiovisuales al frente de este ‘tinglao’. La lógica dice que debe tender a que sea sólo uno quien explote este negocio, pero quizá eso sea hablar demasiado…