Afectuoso adiós a Molowny

Centenares de personas acudieron al Tanatorio de San Miguel para despedir al ex futbolista y ex entrenador del Real Madrid y de la UD Las Palmas Luis Molowny, que falleció a última hora del viernes en esta capital.

Representantes institucionales y deportistas dejaron de lado el carnaval grancanario y se apresuraron a ofrecer las condolencias a los familiares del otrora internacional, cuyos restos serán incinerados esta medianoche.

Estuvieron en el tanatorio, entre otras personalidades, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, y el seleccionador nacional, Vicente del Bosque. El Real Madrid también estuvo representado por Emilio Butragueño y Amancio Amaro, quienes arribarán a la isla poco antes de la incineración de Molowny.

José Miguel Pérez, presidente del Cabildo de Gran Canaria, valoró el "orgullo" que mostró siempre Luis Molowny por defender la camiseta de la UD Las Palmas, aún habiendo nacido en Tenerife.

El 'Mangas', como cariñosamente le conocían en su época -fichó por el Real Madrid en 1947-, no sólo destacó por sus cualidades técnicas como profesional, sino por las humanas. Era persona muy considerada y de exquisito saber estar.

En Canarias, asimismo, se le recuerda como técnico del combinado de Las Palmas -'Los diablillos amarillos'- que se proclamó campeón de España en la categoría Juvenil en el año 1962.

Molowny, todo un ídolo en el Real Madrid

Luis Molowny fue técnico de la primera plantilla del Real Madrid en varias etapas (1974, 1977-79, 1982 y 1985-86), conquistando tres Ligas, 2 Copas de la UEFA y 2 Copas de España. Molowny ejerció también como director deportivo entre 1986 y 1990.

"En cada una de las facetas, dejó su impronta de profesionalidad, talento, responsabilidad y compromiso. Su personalidad, su forma de ser y de comportarse, son ya esencia del madridismo, y su herencia ha sido transmitida tanto a jugadores como a entrenadores, que siempre tuvieron en Molowny un modelo de profesional, el espejo donde mirarse", destaca la nota del club.

Su andadura deportiva comenzó con 15 años, en el Santa Cruz, de Primera regional, con quien, debido a su corta edad, sólo pudo disputar partidos amistosos. Poco después fichó por el Marino, con el que proclamó campeón de Canarias.

Y, en la temporada 1946-47, con 21 años ficha por el Real Madrid, que ganó la puja ya que el Barcelona también estaba interesado en contratarle. Molowny debutó, precisamente ante el Barcelona, en el viejo estadio Metropolitano. El nuevo interior izquierdo no defraudó ya que en los últimos minutos del choque logró, de cabeza, el gol de la victoria.

El juego de Molowny destacaba por su gran precisión en el pase, la facilidad en el regate y sus fulminantes internadas. A lo largo de su carrera como jugador disputó 198 partidos oficiales y 71 amistosos. Además, fue internacional en siete ocasiones. En junio de 1990, Molowny se desvinculó definitivamente del mundo del fútbol.