El Guardiola más vehemente se lleva un empate suficiente de Dortmund

Guardiola respira aliviado, y eso que no consiguió ganar en el Westfalen Stadium. Los cinco puntos que le lleva al Borussia Dortmund es una diferencia suficiente para alzarse con la Bundesliga al final del campeonato, requisito básico para su Bayern, un equipo que está muy por encima del resto de los alemanes. Que el técnico está algo tenso se pudo ver al final del partido, cuando se fue a hablar con Kimmich en una charla de una vehemencia que no se le recuerda a el técnico de Sampedor.

No fue tanto una bronca como la clase apasionada de un viejo profesor que le cuenta a su pupilo todo lo que sabe. Guardiola sabe que se marchará al final de la temporada del Bayern, y que la imagen que quede de él en Alemania tiene también que ver con lo que pase en estos últimos meses de temporada. Es casi una necesidad ganar la liga y sería un broche de oro ganar la Liga de Campeones, pero nadie puede exigir tan difícil desafío.

El Bayern no está teniendo sus mejores días. La pasada semana perdió contra el Mainz en casa y dejó abierta la Liga. Si el Borussia, que es su principal perseguidor, conseguía ganarles en su casa la diferencia quedaría reducida a dos puntos y cualquier error sería fatal para los intereses del Bayern. Por eso el empate a cero, en un partido nervioso e impreciso, suena a aprobado justo -y a descanso- para el Bayern.

El equipo de Guardiola fue más conservador que en otras ocasiones, especialmente en la primera mitad. El orden pareció ser el emblema de un equipo cuyas prioridades suelen estar en otras cuestiones futbolísticas. Los partidos a vida o muerte, y este lo era, requieren una aproximación diferente, menos alegre y más recta. Con esas bases acudió a Dortmund el Bayern y fue suficiente. No quedará como la mayor demostración estética del tiempo de Pep en Múnich, pero tampoco era lo que se buscaba.

El Schalke se acerca a la Champions

En todo caso, el empate le sirve más al Bayern que al Dortmund, que perdió la oportunidad de reducir a dos puntos su desventaja, lo que hubiera dado emoción a las próximas jornadas de la Bundesliga. En otro partido destacado de la jornada, el Wolfsburgo se impuso al Borussia Mönchengladbach por 2-1 y ascendió al séptimo lugar, que puede servir para la clasificación a la Liga Europa.

El partido más emocionante lo protagonizaron el Augsburgo y el Bayer Leverkusen -rival del Villarreal la próxima semana en la Liga Europa-, en el que el Bayer logró un 3-3 tras haber estado 3-0 por debajo en el marcador.

El empate llegó por un penalti convertido por el turco Hakan Calhanoglu en el tiempo añadido. El Schalke, por su parte, con una victoria a domicilio ante el Colonia (1-3) está ahora otra vez, al menos provisionalmente, en las casillas que dan la clasificación a la Liga de Campeones, sacando provecho de la derrota del Gladbach.