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El madridismo respira pese a la amenaza de Robben, Sneijder, Cambiasso, Samuel, Eto'o y... Figo
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FLORENTINO PÉREZ DESCANSA TRANQUILO

El madridismo respira pese a la amenaza de Robben, Sneijder, Cambiasso, Samuel, Eto'o y... Figo

Día grande para el madridismo. Florentino Pérez y compañía pueden respirar tranquilos. El 'marrón' de la final de la Champions que dejó el imputado Ramón Calderón

Foto: El madridismo respira pese a la amenaza de Robben, Sneijder, Cambiasso, Samuel, Eto'o y... Figo
El madridismo respira pese a la amenaza de Robben, Sneijder, Cambiasso, Samuel, Eto'o y... Figo

Día grande para el madridismo. Florentino Pérez y compañía pueden respirar tranquilos. El 'marrón' de la final de la Champions que dejó el imputado Ramón Calderón ya es menos problema sin el Barcelona el 22 de mayo merodeando por el Bernabéu. Nunca una eliminación del Barcelona fue tan celebrada por cualquier persona que tenga algo que ver con el Real Madrid. La imagen de Puyol levantando la cuarta Copa de Europa del equipo azulgrana se había convertido en una pesadilla desde que el Olympique de Lyon se permitió el lujo de eliminar al equipo blanco en los octavos de la Champions. Desde ese momento, el madridismo cruzaba los dedos ante la posibilidad de que el eterno enemigo paseara la Copa de Europa por el Bernabéu o por las cercanías de Cibeles.
 
El legado del ex presidente nunca gustó en la zona noble madridista. Primero por el problema que hubiera supuesto la llegada del Real Madrid y la segura falta de respuesta ante la demanda de todos los socios que suelen pensar que el Bernabéu es poco menos que un juguete de su propiedad. El segundo inconveniente no era otro que el de ver al Barcelona jugando un partido tan importante, haciendo de anfitrión y poniendo la mejor de las sonrisas ante situaciones nada deseadas. El tercer 'pero' hablaba del historial, de la mala racha que persigue al equipo que pone el estadio para la final y que no sabe lo que es jugarla desde 1984.
 
No piensen que el último partido de la Champions, el partido que decidirá el nombre del campeón será un camino de rosas para la clase dirigente del Real Madrid. Ni mucho menos. En el Bayern destaca la presencia de Robben, jugador que salió por la puerta de atrás del Bernabéu pese al deseo de Pellegrini de contar con el holandés. El cupo de damnificados en el Inter es más amplio. Hasta cuatro de los jugadores del equipo italiano tienen pasado blanco y directa vinculación con Florentino Pérez. Cambiasso era jugador madridista, pero la dirección deportiva decidió no renovar su contrato, fichando por el Inter. Amuela llegó como el mejor central del mundo y dejó el Real Madrid como un jugador de segundo nivel. Etoo fue traspasado al Mallorca, como paso previo a su fichaje por el Barcelona, convirtiéndose en enemigo público declarado del presidente madridista y de Jorge Valdano. El de esta lista es Sneijder. El centrocampista no habla muy bien del Real Madrid desde que el pasado verano le invitaran a salir de la entidad madridista.
 
En el banquillo hay doble referencia al madridismo. Por un lado, Luis Figo, que se ha convertido en ayudante técnico y que no olvida su manera de salir del Real Madrid, según él por decisión del presidente blanco. El último eslabón de la cadena no es otro que Mourinho, al que muchos ven en el banquillo madridista. Es más, algunos apuestan a su cambio de banquillo nada más terminar la temporada. ¿Tiene o no tiene morbo para el madridismo la final del próximo 22 de mayo?

Día grande para el madridismo. Florentino Pérez y compañía pueden respirar tranquilos. El 'marrón' de la final de la Champions que dejó el imputado Ramón Calderón ya es menos problema sin el Barcelona el 22 de mayo merodeando por el Bernabéu. Nunca una eliminación del Barcelona fue tan celebrada por cualquier persona que tenga algo que ver con el Real Madrid. La imagen de Puyol levantando la cuarta Copa de Europa del equipo azulgrana se había convertido en una pesadilla desde que el Olympique de Lyon se permitió el lujo de eliminar al equipo blanco en los octavos de la Champions. Desde ese momento, el madridismo cruzaba los dedos ante la posibilidad de que el eterno enemigo paseara la Copa de Europa por el Bernabéu o por las cercanías de Cibeles.
 
El legado del ex presidente nunca gustó en la zona noble madridista. Primero por el problema que hubiera supuesto la llegada del Real Madrid y la segura falta de respuesta ante la demanda de todos los socios que suelen pensar que el Bernabéu es poco menos que un juguete de su propiedad. El segundo inconveniente no era otro que el de ver al Barcelona jugando un partido tan importante, haciendo de anfitrión y poniendo la mejor de las sonrisas ante situaciones nada deseadas. El tercer 'pero' hablaba del historial, de la mala racha que persigue al equipo que pone el estadio para la final y que no sabe lo que es jugarla desde 1984.
 
No piensen que el último partido de la Champions, el partido que decidirá el nombre del campeón será un camino de rosas para la clase dirigente del Real Madrid. Ni mucho menos. En el Bayern destaca la presencia de Robben, jugador que salió por la puerta de atrás del Bernabéu pese al deseo de Pellegrini de contar con el holandés. El cupo de damnificados en el Inter es más amplio. Hasta cuatro de los jugadores del equipo italiano tienen pasado blanco y directa vinculación con Florentino Pérez. Cambiasso era jugador madridista, pero la dirección deportiva decidió no renovar su contrato, fichando por el Inter. Amuela llegó como el mejor central del mundo y dejó el Real Madrid como un jugador de segundo nivel. Etoo fue traspasado al Mallorca, como paso previo a su fichaje por el Barcelona, convirtiéndose en enemigo público declarado del presidente madridista y de Jorge Valdano. El de esta lista es Sneijder. El centrocampista no habla muy bien del Real Madrid desde que el pasado verano le invitaran a salir de la entidad madridista.
 
En el banquillo hay doble referencia al madridismo. Por un lado, Luis Figo, que se ha convertido en ayudante técnico y que no olvida su manera de salir del Real Madrid, según él por decisión del presidente blanco. El último eslabón de la cadena no es otro que Mourinho, al que muchos ven en el banquillo madridista. Es más, algunos apuestan a su cambio de banquillo nada más terminar la temporada. ¿Tiene o no tiene morbo para el madridismo la final del próximo 22 de mayo?

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