La prensa engrandece y atribuye el triunfo a Iker Casillas

Hoy todas las conversaciones, todos los periódicos, todos los sueños, todas las ilusiones de España se llaman Iker Casillas. Y no es para menos. El domingo, Iker derrotó a la historia tras 88 años de maleficio sin poder vencer a Italia en un partido oficial. Y no podía ser de otra forma que en penaltis, el fantasma encapuchado de la ‘Roja’. Iker detuvo dos tantos fatídicos: A De Rossi y a Di Natale, y con ello llegó el ansiado pase a semifinales. El pesimismo ha perdido la batalla ante el optimismo de San Iker.

La prensa española, tanto deportiva como general, se vuelca con la selección y con su protagonista. El Marca titula en primera: “Iker Cambia la historia” con una foto de Iker, Cesc Fábregas y Cazorla celebrando la victoria, y en su crónica, “Casillas acaba con los fantasmas”. El As titula “¡Que viva España!” con la foto de Iker y Cesc celebrando y remarca el buen fútbol de la selección, la merecida victoria, la ruptura del maleficio español y al héroe del partido: una vez más Casillas. El Sport abre su edición con “Héroe Casillas”, “Patada a la maldición” y añade las tres claves del triunfo: “Cesc aguantó la presión, Italia cayó antes una España que jugó con las mismas armas y la selección de Luis sabe jugar al fútbol y también competir”.

La prensa de información general celebra la victoria en términos similares. El Mundo abre con “Casillas rompe el maleficio” y en su crónica “Casillas derrota al destino”. El País abre con “España rompe el gafe. Dos paradones de Casillas llevan a la selección a semifinales” y resalta la actuación de Iker. “Casillas, el muro español. El Abc titula: “España y Casillas vencen a la historia”. La Razón apunta “Casillas y diez más”. Y el Público se deshace en elogios al portero del Madrid: “Iker, Iker, Iker. El mejor portero del mundo. El chico de los milagros…”.

La euforia se ha desatado. El pesimismo ha caído por su propio peso. Iker no sólo dio el triunfo a España, sino que demostró que es el mejor portero del mundo. Ha fortalecido la seguridad de sus compañeros. Su liderazgo es único. Hoy todos se lo reconocen. Hoy sólo hay una foto: y es la de Iker. Es muy positivo saber que Casillas está agigantado. La prensa se lo agradece. Pero esta es la primera de las tres batallas que deberá superar la selección para alcanzar el éxtasis. Que el ‘objetivo’ era pasar de cuartos. Sí, ese era. Pero ya en el camino al Olimpo, España no se puede quedar ahí. Vienen los rusos. Y las semifinales no son la fase de grupos. Es otro torneo. El corazón dicta favoritos, pero el fútbol no. El sueño y la ilusión se pueden prolongar hasta el jueves. Pero hasta ahí. Que para que los deseos se hagan realidad, hacen falta dos victorias.